Clasificacion De Las Eticas

Eticas materialistas y no – materialistas

Estas clasificación fue propuestas por G.E. Mooreen su afán de mostrar en lo moral no puede ser identificado con ninguno de los fenómenos de la naturaleza que afectan la vida humana. En consecuencias las éticas que reducen lo moral a lo placentero, o a lo que desean las personas, o a lo que proporciona la felicidad. Etc serian consideradas como naturalistas, mientras que aquellas otras que tienen lo moral como un ámbito autónomo y, por lo tanto, irreductible a otros fenómenos serian éticas no- naturalistas.

Éticas congnitivista y no- cognitivista

En ocasiones se ha dicho que el criterio de distinsion entre estos dos tipos de éticas recide en la posicion que se ponga respecto a la posibilidad de considerar a los enunciados morales como suseptibles de vedad o falsedad. Desde este punto de vista , las éticas cognitivistas serian aquellas que conciben el ámbito moral como un ámbito mas del conocimiento humano , cuyos enunciados pueden ser verdaderos o falsos. En cambio, las éticas no cognitivistas serian las que niegan que se pueda hablar de verdad o falsedad en este terreno y, en consecuencia, las que conciben la moralidad como algo ajeno al conocimiento.

Sin embargo, es preciso corregir este criterio en nuestros días, puesto que se han puesto de relieve algunas matizaciones importantes por parte de las éticas que hoy se inspiran en Kant (particularmente la ética discursiva de Apel y Habermas). Estas éticas se consideran asi mismas como cognitivas, a pesar de que no aceptan que se pueda considerar a los enunciados morales verdaderos o falsos. Lo cognitivo no es solo cuestión de verdad o falsedad (propio del ámbito teorico), si no es cuestión de que sea posible argumentar racionalmente sobre la corrección de las normas (propio del ámbito practico). De las normas no puede decirse que sean verdaderas o falsas, pero si que son correctas o incorrectas. En este sentido, las éticas kantianas distinguen entre la validez de una norma (su corrección racional argumentable) y la vigencia de la misma (su consideración como vinculante o no para los sujetos morales) y, dados que estas cuestiones pueden considerarse como parte del “saber practico”, se puede afirmar que estas éticas son cognitivistas.

Éticas de móviles y éticas de fines

Tanto las llamadas << éticas móviles>> como las llamadas << éticas de fines>> coinciden en considerar la naturaleza humana como pauta de la conducta, pero acceden a tal naturaleza desde diferentes métodos y la entienden, por tanto, de modo diverso.

Las éticas de móviles realiza una investigación empirica de las causas de las acciones. Pretenden descubrir cuales son los móviles que determinan fácticamente la conducta humana. El bien o el fin moral consistirá en satisfacer estas aspiraciones fácticas, que una investigación psicológica puede descubrir. Este tipo de éticas suele surgir de un afán empirista de recurrir como fundamento de lo moral a hechos constatables huyendo de las justificaciones metafísicas o transcendentales. Este afán empirista se refleja en ocasiones en una pretensión científica de dotar a la moral de bases desentrañables por las ciencias, hasta el punto de poder acceder a la cuantificación en el terreno de la ética.

La pauta de la conducta es la naturaleza humana, pero entendiendo por <<por naturaleza>> el comportamiento humano empíricamente accesible. Dentro de las éticas de móviles cabria considerar como paradigmáticas al epicureísmo, a una parte de la sofistica, y a las distintas versiones del hedonismo, muy especialmente la versión utilitarista. Los problemas que estas éticas plantean se resumen fundamentalmente en la dificultad que para una fundamentación de lo moral supone el subjetivismo de los móviles no es base suficiente para una prescripción universal; pero, por otra parte, la fundamentación en hechos se encuentra siempre con el problema de la falacia naturalista.

Las éticas de fines intentan superar tales dificultades, consciente y inconscientemente y para ello no tratan de investigar solo que mueve de hecho al hombre a obrar, si no sobre todo en que consisten el perfeccionamiento y la plenitud humanas porque en ello radica el bien de todo hombre.

A partir de que el hombre es verdaderamente podemos extraer lo que debe ser: cual es el fin de la naturaleza metafísicamente considerada. El acceso a la naturaleza no es, pues, si no empirico sino que se trata de llegar a la esencia del hombre. La esencia del hombre nos muestra que debe hacer el hombre para comportarse plenamente como hombre, sin caer en falacia naturalista alguna, porque el factumal que se accede es un factum

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