El Despertar De La Conciencia

Introducción

Haciendo un viaje en los distintos periodos, y haciendo una parada en la corriente renacentista, llegamos al siglo XV donde observamos un instante muy peculiar, un boom en el arte italiano denominado Quattrocento; y ya que hablamos de apelativos para dicho momento histórico, se puede hacer referencia al “Primer Renacimiento” o “Bajo Renacimiento”

La palabra renacimiento significa renacer, resurgimiento, reactivación, etc. El arte había cambiado, no solamente era usado para contar historias sagradas de manera conmovedora. El arte también servía como imagen del mundo real. Una gran cantidad de escuelas de pintura surgieron en el siglo XV, específicamente en Florencia, sede del Renacimiento en este siglo conocido como el Quattrocento. La ciudad de Florencia fue la cuna del Renacimiento, donde surgió un grupo de artistas liderado por Filippo Brunelleschi, al que se le conoce como el que inició la arquitectura del Renacimiento y la perspectiva.

Imitación de la arquitectura y la escultura de Grecia y Roma, la producción de una belleza ideal, ajustada a cánones dictados por la razón, una implacable búsqueda de la serenidad y el equilibrio que proceden de la armonía del todo.

Creación de obras, cuya claridad y perfección, atributos exigidos por la razón universal, les dan una validez permanente.

Ahora el arte es narrativa, expone historias y sucesos, reales o ficticios, sacados de la religión, de la mitología o de la historia; también es realista, las figuras humanas o de animales, y los objetos inanimados están reproducidos con el mayor cuidado.

El cuadro se presenta con la perspectiva geométrica y da la ilusión de profundidad y se da interés preferente al cuerpo humano, en particular al desnudo, cuya anatomía se estudia y copia cuidadosamente.

El Momento cúspide

Este periodo según Wolfflin se divide en dos tiempos el Quattrocento y el del s. XVI; refiriéndonos a éste como un siglo de descubrimiento por parte de lo artístico, durante el cual, a Florencia se le conoce como el mismo centro de esta corriente.

Es el renacimiento de una nueva corriente ideológica, desaparece la pintura “espontáneamente cristiana”. Ahora, el objetivo del arte es crear un enfoque hacia la figura del hombre como tal, se independiza y se convierte en laico, como puede verse con Masaccio. Comienza un pequeño resplandor de lo que en un futuro conoceremos como la idea de un ser consciente y racional; evoca lo antiguo y la observación de la naturaleza.

En cuestión de la perspectiva utiliza dos dimensiones, comienza a jugar con la profundidad, deja atrás el arte plano de la Edad Media, el dorado y azul simbolizando divinidad y terrenal para pasar a una precepción de mas allá.

El gusto por el mundo sensible es decisivo. El universo material, de ahora en adelante inspira amor por si mismo y ya no como lenguaje simbólico. A esto se debe la primera conquista de Florencia: el cuerpo. EI realismo se presenta con mas detalles, se centra en el detalle y rivaliza con la naturaleza al copiarla. Un aspecto notable a resaltar, es el uso de un paisaje de fondo, detalles minuciosos, ni un espacio en blanco, y la libertad de comenzar con estilos nuevos, un claro ejemplo son las obras de Boticelli; su estilo se compone de cuatro elementos: es una estética del trazo, del plano, del arabesco y antes que nada una estética del instante.

Se retoman de la Antigüedad los ideales clásicos, un aspecto sobresaliente es la perspectivas de su concepto de belleza, la belleza clásica.

La estética del Renacimiento italiano del

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