El amor auténtico para Simone de Beauvoir

[pic 1]

Pregunta: ¿En qué consiste el amor auténtico para Simone de Beauvoir?

Simone de Beauvoir es una de las filósofas más importantes de la tradición occidental. Su pensamiento pertenece a la filosofía existencialista, la cual plantea que los seres humanos, desde una perspectiva individualista, tienen el deber de ser libres. Sin embargo, ella encuentra que hay condiciones sociales e institucionales que no permiten que todos puedan ejercer su libertad por igual, situación en la que se encuentran las mujeres. Esta situación es criticada a través de su obra, El segundo sexo. Aquí, De Beauvoir critica las condiciones sociales y culturales del amor que afectan al ejercicio de la libertad de la mujer. Y, como una solución, Simone plantea el concepto de “amor auténtico”. Para comprender en qué consiste el amor auténtico, en primer lugar, se explicará como lo describe Simone de Beauvoir y, luego, qué elementos son los necesarios que las mujeres realicen para que este se concrete. 

En primer lugar, según De Beauvoir, el amor auténtico implica el reconocimiento recíproco de dos personas libres, lo cual solo se podrá lograr si existe la posibilidad de que las mujeres accedan a otras esferas de reconocimiento de la sociedad, además de la familia. Al afirmar esto, ella crítica directamente al pensar de Hegel. Este filósofo afirmaba que: “... las mujeres pueden por supuesto ser cultas, pero no están hechas para las ciencias más elevadas” (Hegel 1999: 213). Es decir, él planteaba que la mujer no podía desarrollarse en otro nivel de eticidad fuera del familiar, debido a su naturaleza. En ese sentido, si bien Simone de Beauvoir concordaba con Hegel respecto a la noción de amor como reconocimiento, discrepa ante su idea del rol de la familia y la mujer, ya que ella reconocía que el rol en el cual ha sido encasillada la mujer ha sido determinado a través de las relaciones sociales en el tiempo, lo cual no tiene relación con su naturaleza biológica. 

Este concepto erróneo sobre la mujer la ha subordinado; y, ha conllevado a que se sitúe en relaciones románticas desiguales, lo que trae consecuencias como la decepción y el sufrimiento. Por ejemplo, al poder la mujer solo buscar reconocimiento en la esfera familiar y afectiva, crea una fuerte dependencia al buscar en el amor romántico el sentido de su vida e idealizar al hombre, lo cual termina en decepción ya que los hombres no son dioses.

Como una solución, De Beauvoir plantea que las mujeres deben reivindicar su independencia y tomar el control de su vida, para así poder acceder a otras esferas de reconocimiento, lo cual será posible a través de ciertos elementos que generarán un amor “auténtico”. El primer elemento será la autonomía económica de la mujer. Según De Beauvoir: “El hombre soberano protegerá materialmente a la mujer súbdita y se encargará de justificar su existencia” (2018: 52). Es decir, para que las mujeres puedan ser reconocidas como libres, es necesario que sean independientes económicamente. Esta idea tiene influencia marxista, ya que se plantea que el trabajo es esencial para que los seres humanos sean libres y, además, se confía en que las transformaciones económicas provocarán transformaciones en otros ámbitos de la sociedad. A través del trabajo y estas transformaciones, las mujeres podrían tener acceso a otras esferas de reconocimiento, como la política, la cultural, entre otras; y, así, concretar relaciones románticas más igualitarias.

Un segundo elemento es el que las mujeres puedan tener carácter de proyecto. Esta idea existencialista se basa en que los humanos tienen la libertad para trascender y poder ser activos en la realización de sus vidas y su constitución como personas, por lo cual se les califica como proyectos autónomos abiertos hacia el futuro. Sin embargo, De Beauvoir ha identificado que a las mujeres no se les ha permitido ese carácter de proyecto. Esta filósofa afirma que la mujer, pese a ser un ser humano con libertad autónoma, se descubre en un mundo donde los hombres le imponen que se identifique como una alteridad (De Beauvoir 2018: 60). Esto quiere decir que las mujeres han sido subordinadas a un solo rol social que depende del hombre, y, por ende, no tienen las condiciones necesarias para poder ser libres y trascender su situación.

...