Ensayo de redaccion ¿Qué es una familia? ¿Cómo debe ser?

En el presenta trabajo plasmaré lo que muchos autores han dicho al respecto de qué es una familia, visto desde la antropología y la sociología. La finalidad es plantear una base de la cual podamos partir para desarrollar la estabilidad familiar. Cierto es que a lo largo de la historia se han modificado las relaciones en la familia, esto no quiere decir que se tenga que deformar en su función y en su interior, sino más bien es porque buscaba reajustarse según las condiciones en las que se encontraba para mantenerse como una comunidad estable, unidos por los lazos de sangre, el amor, el respeto, los valores. Por eso veremos a la familia como una comunidad de relaciones, primero en su interior para luego proyectarse al exterior. Además, presentaré un análisis de la realidad familiar que se vive en la actualidad en nuestra sociedad, sobre todo en estos últimos años en el que se ha visto amenazada la estabilidad familiar con ideologías erróneas y equivocas de ella. Es cierto que los tiempos van cambiando y la realidad familiar también, pero eso no es motivo para formar familias al ahí se va, pensando que más adelante todo marchará bien. La experiencia nos demuestra que lo mal iniciado, mal terminará.

Ahora en nuestros tiempos muchos nos preguntamos ¿Qué es una familia? ¿Cómo debe ser? ¿Qué debe hacer? Son las interrogantes que nacen ahora. Y a esta primera podemos responder de la siguiente manera: “Una reunión de individuos, constituido por un hombre y una mujer, y sus hijos, basada en el vínculo de la sangre o parentesco, o simplemente de servicio o dependencia de la comunidad familiar^[1].”

Es una reunión de individuos^[2] en cuanto hay una participación de todas las personas involucradas, de forma libre, voluntaria y consciente, para hacer una comunidad. No se puede hablar de comunidad si el hombre está solo. Está constituida por un hombre y una mujer, y sus hijos^[3], solo de esta manera se construirá una verdadera familia. Son las tres personas que la conforman: el padre, la madre e hijos. Son los pilares, los cimientos de ella, son únicos y a falta de uno de ellos, su lugar será insustituible. Es a esto lo que llamamos núcleo familiar. Muchas de las veces, sino es que, en la mayoría de sus casos, esta relación está basada en el vínculo de la sangre^[4], en cuanto que los hijos pueden ser fruto del acto sexual, hecho con amor, de la pareja. En él los lazos de sangre producen un afecto que el paso del tiempo no hace sino aumentar^[5].También puede serlo de “parentesco”, ya sea que incluya a otros miembros con diversos grados de parentesco, que están unidos por lazos legales y morales^[6]. Estos pueden ser los abuelos, tíos, sobrinos o algún otro pariente cercano, incluso los hijos que pueda adoptar la familia.

Tratando de responder a la pregunta de cómo debe ser esta familia, podemos decir que tiene que ser una e indisoluble^[7]. La unidad solo se da entre un hombre y una mujer, vinculados por el amor que los atrae^[8]. Esta unidad, cuando se trata de formar una familia, no puede ser entre un hombre y varias mujeres o una mujer con varios hombres, como se da en algunas sociedades, o aún más, los dos del mismo sexo, como está ocurriendo en la actualidad, un hombre con otro hombre o una mujer con otra mujer, que es un concepto erróneo de unidad familiar que se tiene hoy, pues atenta contra la naturaleza misma de la familia. También es indisoluble porque la propia naturaleza, al traer hijos, pide que la familia sea indisoluble^[9], es decir, que no pueden separarse. Por el amor que se profesan, están unidos de por vida, pues su propia naturaleza les exige perdurar hasta la muerte, ya sea de él o de ella. Recordar que familia que no permanece unida por el amor está llamada al fracaso en sí y en la sociedad.

Estas dos razones del ser de la familia nos ayudaran a comprender la siguiente pregunta y a su vez nos da paso a responderla también. La familia, como primera comunidad de personas, tesoro de la sociedad y escuela de vida^[10], tiene la obligación de cumplir su función como tal de amarse, procrear y criar a los hijos. He aquí la respuesta del hacer de la familia. En cuanto al amor, este tiene que ser la fuente que los una, es el motor que dinamiza a la familia, y éste no puede existir cuando la razón que los mueve a estar unidos es otro. El amor es lo que le da forma y sentido a la familia, y sin él no puede existir un verdadero vínculo familiar. Este amor tiene que ser estable, es decir, se tiene que aceptar y compartir la responsabilidad que en ella se conlleva. El deber de amarse mutuamente con exclusividad y solicitud es el fundamento de la unidad y felicidad de un matrimonio^[11]. Este amor es el que nos ayuda a buscar de forma desinteresada la felicidad del otro, el hacerlo feliz, no buscar al otro para sentirme o que me haga feliz. La familia, al ser partícipes de la procreación de sus hijos, asegura su supervivencia^[12], y no solo la de ella sino de toda la especie humana. Por tanto, está llamada a trascender a través de las generaciones, no puede quedarse estancada, como lo vemos ahora creyendo que entre menos sean más felices serán, la verdad es que no importa el número de hijos que se pueda tener, todos tienen que ser acogidos de la misma manera, pues en ellos está en juego el futuro de las familias venideras que conformarán a la sociedad. Sabemos que al traer hijos se tiene que ser responsable de la educación de ellos, de irlos formando en el seno de los valores de la familia, inculcarles lo bueno de esta vida. Es la primera escuela de esas virtudes sociales, que son el alma de la vida y del desarrollo de la sociedad misma. Dentro de la familia, el niño aprende los patrones culturales que le faciliten la participación en la sociedad^[13]. Los hijos, por medio de la observación, irán aprendiendo, conociendo y discerniendo lo que les es bueno, les conviene y les es aceptable en la sociedad. Pero serán los padres quienes tendrán el cuidado de irlos formando en el amor que solo les puede dar un hogar bien formado en valores y virtudes.

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