FORDISMO

Antes del surgimiento del fordismo, Frederick Taylor había propuesto una forma de organización del trabajo que consistía en establecer normas para realizar una tarea de la mejor manera posible y en el menor tiempo. Sobre estas normas, se asigna a cada trabajador una tarea específica e individual y un tiempo impuesto por la velocidad de movimiento de la cadena de montaje.

La fabrica fordista requiere un gran número de trabajadores especializados en determinadas tareas, estos son controlados por los supervisores. También, existen gerentes que se encargan de la gestión empresarial, además de los dueños de las empresas.

La división social del trabajo constituye un orden jerárquico que complementa la división técnica del trabajo en la fábrica.

La gran fábrica y la relación entre empresas

La empresas se beneficiaron con la economía en escala, y esto hace posible lograr mayores beneficios aumentando la producción, mediante la inversión en instalaciones y maquinarias.

El modelo fordista permitió que las empresas aumentaran el número de empleados, la cantidad de equipamiento y el aumento de la superficie que ocupaban. Así se diferenciaron las distintas funciones dentro de la empresa: un sector se ocupaba de la fábrica, otro de la comercialización, otro del personal, otro de las tareas de oficina. También, las empresas se dispersaron territorialmente, en un lugar se fabricaba, y en otro se dirigía y administraba.

Las industrias buscaron integrar los primeros eslabones de la cadena productiva con los últimos, reuniendo las diversas actividades en un mismo lugar. De este modo, se abarataban costos, y se procuraba disminuir el riego de interrupciones en la continuidad de funcionamiento de la fábrica, ante eventuales inconvenientes en el suministro de alguna pieza o en la comercialización del producto final.

Obreros y patrones

Un aspecto significativo del fordismo fue la relación que se estableció entre la capital y el trabajo. Por un lado, para poder mantener las fabricas en permanente funcionamiento. Por otro lado, para colocar los productos en el mercado, se necesitaban clientes, por ese motivo, los salarios tendieron a ser altos y además se incrementaron relación con la antigüedad y se complementaron anualmente con un sueldo adicional. Por otra parte, los obreros organizaron su representación en sindicatos y sostuvieron una fuerte acción corporativa para poder negociar con los empresarios y con el gobierno, y así se logro que se estableciera la duración de la jornada de trabajo, el periodo de vacaciones, las indemnizaciones por despidos y los limites mínimo y máximo de edad para trabajar.

El estado empresario

Durante la Gran Depresión de 1929, John Maynard Keynes postuló que el crecimiento de la economía depende del consumo, y este, de un nivel de empleo alto y permanente, que no puede ser garantizado solo mediante inversiones privadas. Entonces, propuso que el Estado invirtiera y participara directamente en la economía. Esta teoría

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