Humanismo

“EL HUMANISMO”

El hombre es capaz de trasformar las cosas, por la actuación de su espíritu, también puede modificar su cuerpo e incluso la actividad espiritual inteligente y libre, todo esto con la finalidad de buscar su propia perfección.

En toda la actuación espiritual aun si es sobre las cosas materiales, el hombre no deja de realizar bienes o valores positivos o negativos, entonces considero que el hombre no puede dejar de perfeccionar o deteriorar las cosas e incluso su propio ser.

Entonces el humanismo, constituye a la actividad espiritual que transforma las cosas, su cuerpo y su actividad espiritual buscando su propio bien.

El humanismo se denomina como tal porque cuando el hombre toca algo con su espíritu lo impregna de humanidad, entonces la actividad humana penetra en las cosas y en la propia vida del espíritu para otorgarle sentido humano, con todo esto se dice que ocurre la humanización.

Un ejemplo de cómo sucede esto puede ser algo muy sencillo como una piedra que se utiliza para hacer fuego, o las maquinas que el hombre ha ido desarrollando a los largo de su existencia. Así también puede ser el desarrollo de una acción espiritual, en la inteligencia, o en la adquisición de la verdad o de la voluntad libre para hacer mejores los hábitos o las virtudes morales. Todo esto se ve representado como un perfeccionamiento humano, donde está presente un humanismo, que busca la mejora de los objetos materiales y de la actividad espiritual. Cuando se lleva a cabo esto, solo puede ser por el espíritu, y cuando ocurre solo por él puede ser descubierto y aprovechado.

Cada que el hombre somete su dominio en el mundo material y espiritual, el humanismo avanza, ya que el espíritu humano conquista nuevas áreas del mundo y de él mismo, entonces al mismo tiempo que su dominio se va engrandeciendo, también comienza a profundizar sobre el ser material y el ser espiritual.

La acción sobre los entes materiales es muy importante ya que el avance del humanismo para mejorar el bienestar del hombre, es continuo y creciente. Al referirnos a esto nos podemos dar cuenta de cómo ha ido evolucionando todo, por ejemplo antes las primeras civilizaciones vivían en cavernas, después fueron mejorando su infraestructura hasta llegar a los palacios, los castillos, las mansiones, cada una con un estilo. Continuando con este ejemplo de cómo ha ido cambiando todo las primeras herramientas que se construyeron eran hechas de piedra, después de madera, y así hasta llegar al metal.

Con el trascurso del tiempo, podemos ver como se ha presentado la maravillosa conquista y creciente del mundo material, encabezada por el hombre, impregnando su espíritu sobre la materia como un humanismo que no tiene fronteras y que trasforma cada vez más el mundo contemporáneo y así someterlo a valores humanos, con ello llegar a la perfección del hombre.

El humanismo se hace más visible en el sector material ya que aquí se puede apreciar con mayor facilidad la penetración del espíritu del hombre en las cosas así como sus valores. Esta penetración y el dominio del espíritu humano sobre la naturaleza material y espiritual, se llama con razón humanismo. También puede denominarse como Cultura, esta palabra proviene del latín colo, que significa cultivar o desarrollar.

La cultura es, un desarrollo de la naturaleza material o espiritual para lograr nuevos bienes o valores, así también para construirlos con más perfección. U ejemplo de cómo se utilizaba el término de cultura es cuando se refiere al cultivo de la tierra, con lo que el hombre logra abundantes y perfectos frutos, esta cultura o cultivo se logra con el espíritu del hombre, por su inteligencia y su voluntad, es decir, por un humanismo, que impregna la tarea de la producción del campo para ordenarla y lograr cada vez más y mejores frutos.

Pero ahora hay que referirnos a la cultura en función de valores, que también se aplica en sectores naturales, tanto materiales como espirituales. Este desarrollo, preparado por la inteligencia y realizado por la voluntad libre con las manos y otros instrumentos materiales, creados por el propio hombre, cuando son necesario para trasformar y mejorar el mundo espiritual con el fin de alcanzar otros bienes o valores, es lo mismo que humanizar o impregnar de humanidad ese mundo natural, es decir lo mismo que humanismo.

Humanizar o cultivar las cosas y el propio hombre en su cuerpo y su actividad intelectual y libre, para hacer crecer nuevos bienes y valores, es decir para perfeccionarlos, es realmente lo mismo ya que ambos están realizados por el espíritu con el mismo fin. Podemos usar el término humanismo o cultura para designar esta obra donde se impregna de espíritu humano en la naturaleza material y espiritual, con el fin de transformarla. Se trata siempre e cambiar de forma a los entes naturales por acción de la inteligencia y de la voluntad humana.

El hombre no puede dejar de actuar como hombre, es decir, sin desarrollar su actividad espiritual, no puede tampoco dejar de hacer humanismo, desde su origen el hombre lo ha realizado a veces consiente y a veces inconscientemente.

Sin las cosas materiales, la habitación, el arte, los alimentos, los medicamentos, los progresos científicos y tecnológicos, la vida humana sería muy difícil, ya que ahora nos hemos vuelto dependientes de cada uno de ellos. Por eso antes de los grandes progresos científicos, tecnológicos, medicinales de los últimos tiempos, y si retrocedemos en el pasado, el termino medio de la vida humana era cada vez menor. Por eso los pueblos menos desarrollados, esta media de vida es menor que en otros pueblos. Mucho menos el hombre podría vivir una vida digna de su ser personal o espiritual sin los entes culturales de las buenas costumbres morales, de la educación, de la familia bien constituida y organizada, de la sociedad política estructurando el bien común y el orden jurídico. Alejado de la familia, de la sociedad y de sus bienes culturales, el desarrollo espiritual humano sería casi imposible.

Sin dejar de ser inteligente y libre, por naturaleza, su vida reduciría en gran manera a una vida casi natural, sin desarrollo específicamente humano. Esta deficiencia se notaria sobre todo en la cultura, en la vida religiosa, por la que el hombre se une con su ultimo Fin que es Dios.

Si un hombre no puede vivir sin hacer cultura, tampoco puede vivir sin cultura. Y cuando está esta en menor grado del espíritu, como e orden moral y religioso, el orden social y jurídico, el deterioro de la cultura influye en la vida personal y comunitaria humana.

Pienso que en un

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