Humíferos, cuento

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—Año 2060, diciembre 24, noche buena. Al sur del continente asiático, el clima está totalmente en desorden, las cuatro estaciones pasaron en un abrir y cerrar de ojos, los habitantes están desconcertados, no tienen palabras para atestiguar lo que pasa, son las 7:32 horas, no es su mejor mañana, están en total incomunicación y nadie sabe qué lo provoca. Países vecinos actúan y refugian a toda víctima, la acción se debe a que todo se pone aún más grave ya no es problema de una región, es a escala mundial. La humanidad está atemorizada, pero sus reacciones son muy inquietantes no pensaron dos veces para saber que la situación está ya fuera de manos terrestres, hay algo más grande fuera de órbita que provoca toda éste drama mundial. La NASA no puede callar más y protestantes han iniciado la reclamación de la verdad, exigen poder enterarse de lo que está pasando, y no son sólo ciertas personas, es el mundo quién reclama una explicación. El presidente de Estados Unidos ha querido aclarar que esto es sólo un proceso exterior que tiene solución, pero las evidencias dicen todo lo contrario. Una revuelta a iniciado por el norte de América y se ha expandido hacía el sur.

 Son las 14:38 horas del día, el mundo pasó de celebrar noche buena a sentir el fin del mundo en un par de horas, las preparaciones para Navidad ahora son preocupaciones por el mañana, después de 44 años de una separación y odio continuo entre naciones, al fin todos compartimos algo en común: miedo y desesperación. Noticias Internacionales seguirá informando—Termina la reportera al mando de la noticia.

—Año 2060, diciembre 26, día después de Navidad. Han pasado exactamente dos días desde la noticia que revolucionó al mundo en par de parpadeos, son las 7:38 horas del día y hemos sobrevivido al extremo cambio de clima sólo 48 horas, han estado cayendo personas de todas partes, todos somos vulnerables a lo desconocido, quedamos incomunicados durante 24 horas y solamente podemos transmitir desde una estación de radio, el canal internacional se ha dado por vencido y el temor dominó sobre ellos, pero quedamos humanos qué aún tienen fe en este mundo basura, noticieros de todo el mundo han estado intentando comunicarse con nosotros para poder informarles acerca de sus testimonios y estados actuales, así como los valientes están cayendo los cobardes nos levantamos, esto no es una película más en cartelera es la realidad, no sabemos si es el fin del mundo, pero seguiremos al tanto. ¡Es más increíble! que el mismo ser humano éste más preocupado por no informar a los suyos a lo que se enfrenta, a qué esto esté sucediendo, deberían sentir al menos una vez que también fueron humanos con fe— Termina la transmisión de radio, realizada por la reportera a cargo de la noticia

—Año 2060, diciembre 31, año nuevo, 6:34 horas del día, de nuevo incomunicados por cinco días, del miedo no sabemos ni lo que sucede a tres metros de nosotros, la humanidad ha decaído, en menos de una semana, y lo único que ha pasado es un repentino cambio de clima, me informan otros países que solo se han presentado cambios de salud por alergias desconocidas, no se han presentado muertes por causa del fenómeno, pero los desastres naturales son inmensos y sólo han aparecido en lugares deshabitados por el humano, han desaparecido misteriosamente animales, y grandes grupos de estos seres han migrado a el continente Asiático, exactamente hacia el Sur. Los que no han podido ir solamente se quedan mirando al cielo por horas, son 12:45 horas del día, y seguiremos informando …— continúa la reportera.

(Aquí termina el primer avance que entregue, lo de a continuación es lo que le seguí)

50 años pasaron después de la aparición del fenómeno que atacó a cada rincón del mundo. ¿Qué sucedió después de año nuevo? El 2061, fue un año de mentes vacías, la humanidad estaba sin razonamiento, el mundo se apaciguó por una larga temporada, quisieron regresar a su estado normal, pero ¿a quién engañaban? todos sabemos que nadie puede regresar el tiempo ya lo hecho, hecho está y los cambios radicales serán. Ya no tenía mucha importancia molestar a la NASA, o a un tipo de gobierno que pudiese tener información súper secreta, ya que USA siempre tenía en mente que los humanos eran seres estúpidos, retrasados o incapaces de procesar este tipo de sucesos. Se equivocaron, lo procesamos aún mejor que ellos, nos tachaban de humanos, cuando ellos también formaban parte de nuestra raza. Ahora ya nada es certero, lo que se creía imposible ahora es posible, la humanidad tiene un historial caótico, y para nada fructífero. A lo largo de seis meses la tecnología volvió a la vida, máquinas qué fueron dañadas por el fenómeno ya eran funcionales, solo ciertos dispositivos pasaron a ser gravemente dañados y nadie sabía el porqué.

Tuvimos pérdidas, grandes pérdidas y nada se pudo evitar, cualquier intento de ayuda fue absurdo. El fenómeno no solo cambio el clima un par de semanas, eso fue solamente un síntoma que sufría la Tierra, solo se preparaba para recibir a un huésped especial, lo llamaron "El Visitante". No hizo caos, no afectó más al clima, si más todo regresó a la normalidad, en ese entonces “El Visitante” se aproximaba rápidamente, pero con demasiada cautela…

La llegada fue un acto que un simple mortal no puede detallar, su extraña y grandiosa belleza dejó a todo ser sin reacción, era un espectáculo en cámara lenta. El cielo era una explosión de colores, las nubes tomaron forma de aros a su alrededor, detrás de su camino le seguían aún más nubes de tonos extravagantes. El aterrizaje en suelo terrestre duró aproximadamente 16 horas, fue un impacto lento, pero desastroso, sí antes la Tierra contaba con cinco continentes, solo quedaron 2 y fracción.

El costo de su llegada fueron pérdidas, pérdidas muy grandes, dolorosas, y rápidas. La humanidad quedó reducida, tanto en cantidad como en terreno, sobre todo débil y desprotegida. Las pérdidas ocurrieron, lo extraño pasó, la probabilidad de extinción subió, el miedo creció, el luto apareció, el ego humano bajó, y lo desconocido atacó. Todo pasó fuera de lo normal, de lo conocido, fuera de ciencia actual, no había posible entendimiento, las teorías eran infinitas, todo podría ser o no correcto, lo intentaban bautizar de mil y un maneras, pero al final continuó como el extraño y desconocido “Visitante”. No hubo respuesta negativa por parte de nuestro planeta, no se descontroló, no se desbocó, no hubo aparición de algún tipo de desequilibrio fuera de lo humano y las pérdidas de naciones. El planeta ya estaba preparado para esto, nos advirtió, pero cómo aún seguíamos sin entender señales obvias, simplemente nos quedaba recibir la “tragedia”. Cuando las nubes dejaron de rodear al huésped extraterrestre, los humanos no pensaron dos veces para acercarse a él, para simplemente curiosear.

Era cuestión de tiempo para qué los pocos gobiernos que quedaban se quisieran adueñar de lo desconocido, o restringir a los simples y pocos civiles el acceso a intentar conocerlo, una ley mundial se estableció: Quedaba prohibido el acercamiento o contacto con “El Visitante”. El castigo era la muerte. “El Visitante” no tocaba las profundidades del mar, pero en si abarcaba casi exactamente una tercera parte de la Tierra, tamaño colosal, esférico, tenía un místico tono Lunar, era ligeramente atraído hacía el centro de la tierra, su acomodo no hizo daño profundo a la tierra, solo a la superficie en donde aterrizó, y un tanto a sus alrededores.

La Nasa no tardó en iniciar investigaciones a profundidad. La civilización fue forzada a vivir con ello, e intentar salvar lo poco que quedaba, pero todos sabíamos que sí antes, no se hacía nada para salvar el mundo de pequeñas problemáticas, ¿qué haría la diferencia ahora que estaban reducidos?, nada, solo se redujo la forma de pensar inhumana, y junto con ello la mitad de la raza terrestre. El pequeño planeta llamado Tierra, pasó por mucho desde sus inicios, cambios pequeños que con su acumulación pasaron a grandes, evolución de una raza inteligente que lo único que hacía era destruirlo y con ello, a ellos mismos. De cada 100 descubrimientos que se hacían, 98 eran para su autodestrucción y satisfacción nefasta, ¿qué ganaba el humano haciendo mal, sí solo nacía para vivir y después morir?, ¿por qué tanta insistencia en llegar a su propia extinción para después ser transformados en polvo?, ¿qué se ganó?, nada, absolutamente nada, pero aun así seguían sin entender razones simples que no necesitaban ni siquiera un máximo esfuerzo, era simplemente observar un poco la grandeza que había y el diminuto ser que era frente todo lo existente en su propia realidad. Año 2103, han transcurrido 50 años desde la llegada del “Coloso Visitante”, el huésped ha perdurado, la Tierra ha cambiado, y sus habitantes también. La raza inteligente se ha vuelto “más inteligente”, y después de mitad de siglo no se ha descubierto nada, el fenómeno sigue siendo avanzado para nuestro entendimiento. Y gracias a la censura mundial de gobiernos todo se quedará solo para unos pocos, los demás se retrasarán otra mitad de siglo o más en comprender. Maquinas nuevas, tecnología súper avanzada, la humanidad se dedicó totalmente a sobrevivir con escases, pérdidas, vacío, se unieron más que nunca, las indiferencias ya no eran tanto problema, pero el trauma era aún más grande. Por más que se quería seguir, no tardaban mucho en volver a caer en la melancolía. Todo recurso se utilizaba de manera precavida, se intentó salvar lo que aún sobrevivía, el humano se hizo más culto sobre su propia cultura, aun así, eso no quitaba el hecho de que seguían cegados por su situación. Año 2150, la humanidad aún sobrevivía, y se acostumbraba aún a la presencia del Visitante. Uno de los factores buenos de nuestra raza, era la insistencia. Y otra mitad de siglo pasó para llegar a un descubrimiento sobre el coloso. Lo nuevo de este siglo fueron los cambios radicales en las sociedades que se formaron, seguían siendo muy cultas, un tanto tradicionales y muchas cosas que se practicaban quedaron en el olvido, “El Visitante” pasó a ser parte de la historia, y lo consideraban parte de la Tierra. Seguía el fantasma del pasado en lo que quedaba del planeta, los humanos aún sentían tristeza. Esta generación pasó a ser grande siendo tan pocos. Oceanía quedó un tanto completo, fracción de África y Europa sobrevivieron, el único continente sin pérdidas fue el americano, lo mayor sucedió en Asia, ya no existía más en esta actualidad. Ese gran espacio y más de la mitad de lo que se hacía llamar Europa era territorio prohibido por leyes máximas que el hombre estableció. El descubrimiento del “Visitante”, era más allá de lo imaginable, se excavó en la superficie de este para intentar descubrir el centro del coloso, muchos llegaron a la idea de que era un huevo enorme de alguna especie inteligente y gigante, otros decían y aseguraban de que era una incubadora de extraterrestres, o un simple satélite. Sí confirmaron su existencia ya cuando se acercaba a la Tierra, fuera de órbita, se mostraba invisible, y nada lo podía identificar fue silencioso, solo apareció en forma de nube hasta que aterrizó mostrando su verdadera apariencia. Al parecer su corteza era delgada, y era posible excavar en ella, era rocosa pero no muy gruesa las teorías de muchos empezaban a convertirse en realidad y esto impartió terror por ciertos periodos. Investigadores caían y el miedo ganaba, otros se arriesgaban, y mucho, cuando el ser humanos llegó a la superficie, tardó en descubrir otro metal o material más resistente para alcanzar perforar más a fondo. Tuvieron que pasar otros 50 años para esto.

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