Institucional de la filosofía

El Instituto

Filosofía Institucional

Los principios filosóficos en los cuales se sustenta la existencia del Instituto de Estudios Superiores de Chiapas, fueron elaborados con la participación de toda la Comunidad Institucional, con base en su Misión y Visión, dando paso a través de la Mejora Continua a generaciones de Líderes renovadas, capaces de enfrentar los desafíos con excelencia y calidad.

Principios

Sustentar las actividades en filosofía del desarrollo para el mejoramiento de nuestro Estado y la condición socioeconómica de sus habitantes, optimizando todos nuestros recursos.

Brindar una educación de calidad y liderazgo con un costo justo.

Fomentar acciones que identifiquen las necesidades de la comunidad, dirigiendo esfuerzos estudiantiles, docentes y administrativos a promover mejoras en la misma.

Mantener una organización con disciplina y armonía, que sea ejemplo de convivencia social a la vez ágil y receptiva a los cambios y necesidades de la comunidad.

Consolidar la cultura de la educación para el desarrollo individual, profesional y social en el Estado y País.

Para el Instituto de Estudios Superiores de Chiapas es importante y básico entender la educación como eje fundamental de la formación integral de la persona, fomentando y viviendo, valores y actitudes.

Sin dejar a un lado la generalidad de los valores universales, el IESCH se propone enfatizar los siguientes como básicos para la Institución:

Valores

Liderazgo: Todo líder, tiene el compromiso y la obligación de velar por la superación personal, profesional y espiritual de quienes lo rodean. Es una responsabilidad que como personas, estamos obligados a asumir.

Honestidad: Es un valor que debe aludir a todas las acciones humanas, su ejercicio eleva la ética y profesionalismo de quienes la practican.

Disciplina: Es la capacidad de actuar ordenada y perseverantemente para conseguir un bien. Exige orden y lineamientos para poder lograr los objetivos deseados. La principal necesidad para adquirir este valor es la autoexigencia, es decir, la capacidad de pedirnos a nosotros mismos un esfuerzo “extra” para hacer las cosas de la mejor manera. La disciplina es indispensable para optar con persistencia por el mejor de los caminos, por el que nos va dictando una conciencia bien formada, que sabe reconocer los deberes y se pone en marcha para actuar.

Respeto o Reconocimiento: Se refiere a la consideración de alguien

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