Inteligencia Animal

Introducción:

En un grupo de monos, un crío observa a otro macho adulto comiendo una fruta especialmente apetecible. Con los ojos clavados en la comida, el monillo se acerca lentamente al macho. Éste, sin prestarle atención alguna, sigue con su pequeño picnic. De pronto, el pequeño emite un chillido desgarrador. Al instante, la madre del mono se da la vuelta y llega corriendo para perseguir al supuesto agresor que quería hacer daño a su hijo. El pobre macho suelta la comida y echa a correr. Mientras el pícaro recoge tranquilamente la fruta del suelo y, con mucho gusto, se la come. ¿Qué hay detrás de este curioso episodio de la vida de los simios? ¿Se podría llamar a esto inteligencia?

La existencia de la inteligencia animal ha sido una polémica desde hace ya mucho tiempo desde cuando antiguos filósofos se cuestionaban sobre este tema, hasta nuestro siglo. “Hay quienes consideran a los animales como organismos reactivos, guiados por impulsos impresos en su cerebro gracias a la herencia” este pensamiento es muy común en la gente que piensa de manera antropológica, ya que miran a los animales como organismo inferiores que no poseen conciencia, memoria, ni inteligencia. Sin embargo, autores como Matej Hochel y Emilio Gómez Milán, los cuales escribieron el documento “La Inteligencia Animal” plantean una postura de que los animales poseen capacidades cognitivas, y que no se debe de mirar en menos su capacidad por su poca similitud hacia la especie humana.

Concepto de inteligencia

Al buscar el significado del concepto de inteligencia en un diccionario o en la página de la Real Academia Española aparecen un conjunto de definiciones como:

1. f. Capacidad de entender o comprender.

2. f. Capacidad de resolver problemas.

3. f. Conocimiento, comprensión, acto de entender.

4. f. Habilidad, destreza y experiencia.

Conociendo estas definiciones, no se puede entender un concepto claro de inteligencia animal, ya que estas definiciones están centradas para la especie humana sin englobar a los animales, como ya se ha dicho por su diferencia con los humanos.” Las personas tienen un curioso prejuicio y suelen presumir que cuánto más se parece un animal a nosotros mismos, más listo es”. Atribuiremos con mayor facilidad el pensamiento abstracto a «nuestros parientes más cercanos» o a los más parecidos que son los monos; pero existen otros animales como las ratas que han sido probadas en experimentos para ver sus capacidades cognitivas y han dado exitosos resultados. El ejemplo de las ratas muestra que la inteligencia no se debe a la similitud o al parentesco con la raza humana: “Hank Davis , de la Universidad de Guelph en Canadá, ha estudiado las habilidades numéricas de los animales. En uno de sus experimentos, que realizó junto con Sheree Ann Bradford, diseñó un espacio rectangular en el que había túneles, con entradas en la misma pared. El conjunto entero de túneles podía ser cambiado de posición a lo largo de la pared. La entrada de cada corredor estaba equipada con una pequeña puerta. Para entrar en cual- quiera de ellos tenía que empujar la puerta. Al final de cada conducto se encontraba un poco de comida. No obstante, en cinco de los seis túneles el paso a la comida estaba bloqueado por una verja (así la rata podía ver la comida pero no acceder a ella.)” Luego de obtener los resultados del experimento, se vio que las 12 ratas que fueron utilizadas, obtuvieron resultados distintos, ya que para un grupo de estas ratas un túnel era el correcto pero para otras no, y esto podría descartarse como inteligencia y solo ser una medición. Pero para descartar la posibilidad de una simple medición, se corrió el túnel unos centímetros, y luego de un número menor a 100 ensayos, la rata descifro cual era el correcto. Es por esto que se afirma que la rata puede haber aprendido algo, gracias a la inteligencia animal.

Teoría de la mente y la mentira

Los autores mencionados hacen cita a una teoría que coopera con el punto de vista de que los animales poseen inteligencia, un estudio hecho por E.W. Menzel en 1974 sobre una comunidad de chimpancés cautivos: en presencia de una chimpancé hembra llamada Belle, cuidador escondía en el recinto en que habitaban, una ración de fruta. Al principio la chimpancé iba directamente hacia el escondite ante la presencia de sus compañeros, y un macho dominante llamado Rock, los espantaba y se quedaba con la comida. Belle comenzó a aprender, y con el tiempo iba lentamente hacia el escondite para que Rock no se enterara, y dejara de prestarle atención. Pero Rock, también comenzó a aprender y cada vez que Belle se sentaba para engañarlo el la perseguía, así que Belle debió cambiar de estrategia, y decidió sentarse más lejos del escondite de la fruta. Pero ante esto Rock comenzó a inspeccionar los alrededores de donde estaba Belle sin dejar de quitarle la mirada a ella, y cuando se acercaba al escondite, Belle lo delataba al ponerse nerviosa y Rock se quedaba con la fruta. El cuidador decidió hacer otro cambio, y le enseño a Belle dos escondites, uno con menor cantidad de fruta y el otro con la cantidad normal. Belle aprendió que si llevaba al grupo a donde había menos fruta, ella podría quedarse con más fruta, pero Rock descubrió esto y dejo de prestarle atención al escondite con poca fruta y a fijarse en Belle hasta que logro encontrar el otro escondite con más fruta, lo que causo mucha rabia en Belle. Ambos simios ponen de manifiesto su habilidad no sólo para ver las intenciones del otro, sino también para comprender su punto de vista (lo que el otro sabe o no sabe) y descifrar sus pensamientos.

Diferencia entre Instinto e Inteligencia

Instinto se puede definir como las características y comportamientos no aprendidos y que tienen relación con la conservación y supervivencia de una especie, no influye la voluntad del individuo. Un claro ejemplo de instinto es el de las tortugas marinas. La tortuga marina madre se dirige a desovar a la misma playa en la que nació, esto es por obra del instinto. Las crías de tortugas marinas al nacer, salen de la arena y se dirigen instintivamente hacia el

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