La Filosofía Y Su Historia

Filosofía - Plan Fines - CHARO, Juan Manuel

Filosofía

La palabra filosofía, de origen griego, está compuesta de dos términos: filos, que significa amor, amistad, y Sofía que significa sabiduría. Es decir, filosofía se puede traducir como "amor por la sabiduría". Esto significa que la filosofía no es en sí misma la sabiduría, sino la acción de buscarla. Ser filósofo, según la idea griega, no es ser sabio, sino querer serlo, lo que puede ser aún mucho más sabio que creerse sabio.

La filosofía y su historia

Antes de la filosofía estaban los mitos que eran relatos que trataban de dar una respuesta a las cosas sobre las que el hombre se preguntaba.

El mito refiere a un relato de hechos maravillosos cuyos protagonistas son personajes sobrenaturales o extraordinarios (dioses, monstruos, héroes).

En su origen el mito es un relato oral, con el correr del tiempo sus detalles van variando de acuerdo a la transmisión del conocimiento de generación en generación. Surgen para dar explicaciones al hombre sobre fenómenos que ellos no podían explicar.

La filosofía se va desarrollando a lo largo del tiempo a través de la secuencia de relatos y escritos que marcan líneas de continuidad y ruptura, de posturas semejantes o antagónicas.

Las ideas planteadas por algunos fueron pensadas, discutidas, retomadas por otros a las cuales modificaron o complementaron según las experiencias de su historia personal.

La filosofía tiene su origen en Grecia y luego se despliega por todo occidente. Toda la historia de occidente está impregnada de filosofía.

Edades de la filosofía

Antigua o Griega VI a.C. - II a.C.

Medieval II / III - XV/ XVI

Moderna XVI - XVIII

Contemporánea o Posmoderna a partir del siglo XIX

Edad antigua: se dio en la antigua Grecia antes de cristo, sus pensamientos se basaban más que todo en suposiciones acerca del origen del cosmos, del ser, etc.

Edad media: lo que se estudiaba era teología ya que la iglesia tenía mucho poder en esa edad.

Edad moderna: en esta junta la filosofía con diversas áreas del conocimiento como la ciencia, el arte, etc.

edad contemporánea: se ve todo tipo de conocimiento filosófico.

El nacimiento de la filosofía

La filosofía comienza en Grecia antigua alrededor del siglo VII a.C. Allí se establecen los Jonios, uno de los primeros pueblos de habla griega.

En esta época la situación económica era muy buena y permitió el crecimiento cultural de estas colonias por un fluido contacto con Egipto y la civilización babilónica.

En esta época se dieron las condiciones especiales para el desarrollo de las artes y en especial de la filosofía.

Los primeros filósofos se inclinan por la búsqueda de respuestas tratando de comprender la naturaleza. Tratan de dar respuesta al origen, el fundamento de todo lo que es real.

La pregunta no era nueva, cada cultura había respondido con un mito que renovaba el origen el universo y de los hombres. La diferencia es que estos pensadores respondieron a la misma pregunta desde una nueva posición. No decían que hablaban por la inspiración de las musas o los dioses, sino que sus respuestas eran producto de sus propias conclusiones. Además, estos no apelaban a que su discurso sea un reato transmitido (relatos míticos). Esta nueva actitud frente al conocimiento se vio también reflejada en la necesidad de una nueva forma literaria de expresión: la prosa reemplazó al verso.

Por ocuparse del problema de los cambios de las cosas de la naturaleza (movimiento de las estrellas, los cambios de las situaciones, la generación y corrupción de los entes naturales, etc.) son llamados fisiólogos, en el sentido de filósofos preocupados por la physis.

En este sentido la physis es la fuente originaria de la cual todas las cosas brotan, el arjé u origen, fuerza divina de la naturaleza.

La filosofía estaba entonces en sus inicios, faltaba aun crear las palabras y pulir los conceptos que expresaban los nuevos pensamientos. Con esta filosofía comenzó a crearse paulatinamente el nuevo lenguaje de un nuevo saber.

Los primeros filósofos

Los primeros fueron los filósofos naturalistas, quienes intentaron dar una explicación física del universo.

Tales de Mileto: todo nació del agua, el agua es el elemento básico del cual están hechas todas las cosas.

Anaximandro: la tierra es esférica y gira en torno a su eje. El hombre procede de un fenómeno húmedo por lo cual tiene como antepasado a los peces y otros animales primitivos, razón por la cual podía ser considerado como antecesor del evolucionismo. Una sustancia indeterminada: origen de todas las cosas.

Anaxímenes: el origen de todas las cosas es el arjé. Por medio de dos procesos, rarefacción y condensación, que dan origen a todas las cosas.

Pitágoras: el número es el principio de todas las cosas. Los números tenían un sentido genérico y decisivo en la constitución del cosmos.

Heráclito: el principio de todas las cosas es el fuego a quien identifica con el logos, que a partir de su pensamiento se convertirá en una de las palabras más importantes de toda la filosofía. Logos es el principio unificador de todas las cosas, las cuales se encuentran en constante devenir.

Parménides: el ser es una esfera estática, inmóvil; homogénea, perfecta, engendrado, indestructible.

Todo lo que hay ha existido siempre, todo lo que existe en el mundo es eterno. Nada puede surgir de la nada (“de la nada nada viene”). Nada puede surgir de la nada, y algo que existe no se puede convertir en nada.

La importancia de Sócrates

Sócrates nació alrededor del año 470 a.C. en Atenas. Vivió el mejor periodo cultural de Atenas, la edad de oro ateniense.

En este clima social la reflexión se concentró de los problemas relacionados con las acciones morales y el sentido de la vida personal y política.

Sócrates no escribió ninguna obra. Probablemente se lo vería por las calles conversando acerca de la política de los ciudadanos de Atenas.

La necesidad de una educación que no se redujera a la música, gramática y gimnasia impulso la llegada de maestros de diferentes regiones de Grecia, atraídas por este fenómeno cultural.

Así convivieron en la Atenas de estos años los sofistas y Sócrates. Estos dos constituyen dos posiciones diferentes frente al saber. Sofista era el sabio que hace sabio a otros.

El método socrático

La forma elegida por Sócrates para la enseñanza era el diálogo, privilegiando la función de preguntar más que la de contestar los interrogantes que se plantaban: provocar la reflexión del discípulo para que por sí mismo descubriera la verdad. Su misión era ayudar a dar a luz un conocimiento que ya estaba en el discípulo. El maestro es quien provoca la búsqueda del saber.  A ese método lo llamó mayéutica. Consiste en interrogar acerca de un problema que supuestamente el oyente dominaba, llevaba al interlocutor a una contradicción. Y el sujeto en cuestión se mostraba incapaz de expresar clara y conceptualmente aquello sobre lo que se le había interrogado.

Sócrates le daba la ocasión al interlocutor de reconocer su ignorancia. Este es el momento de la refutación, verdadera liberación intelectual, en la que el otro descubre que no sabe lo que creía saber. De aquí la afirmación socrática “solo sé que no se nada”, verdadero principio de la sabiduría. Saber que no se sabe, o sea adquirir la conciencia de la propia ignorancia, es el primer escalón de la sabiduría.

Sócrates fue acusado y condenado a muerte en el 399 a.C. bajo el cargo de enseñarles a los jóvenes a no respetar las leyes y los dioses de la ciudad. La “Apología de Sócrates” fue escrita por Platón.

Platón: la idea como fundamento

Muchos filósofos concuerdan en que la metafísica comienza con Platón. Él es el heredero de una tradición filosófica que ya en el siglo IV a.C. era muy rica. Recibió, a través de Cratilo, el convencimiento acerca de la relatividad del conocimiento que tenemos respecto de las cosas percibidas por los sentidos.

A Platón se le reconoce haber centrado su conocimiento en un mundo, ámbito (topos), propio de la inteligencia. A este ámbito se le dio el nombre de lugar inteligible y se lo distinguió de todas aquellas cosas que conocemos sensiblemente (lugar sensible). Platón señala que la verdad de todas las cosas se encuentra en este ámbito en el cual la inteligencia conoce las ideas.

Las Ideas, o lo que las cosas son en sí, constituyen la máxima perfección con que algo puede ser pensado, y por ende son aquello a lo que las cosas cambiantes e imperfectas del mundo aspiran. De este modo el Bien, la Belleza, la Justicia son ideas, modelos originarios (arquetipos). Para Platón el Bien es la Idea originaria, que rige a todas las ideas, ya que es condición de todas las otras, pero no es condicionada por ninguna. La Idea del bien es el fundamento último de todo lo que es.

Las Ideas son el verdadero ser, el ser por excelencia, lo que hace que las cosas sean lo que son. Esto es lo que le da su permanencia, su inmutabilidad.

La filosofía primera Aristóteles

Aristotéles va a sostener que la verdad de las cosas (de los entes) se encuentran las cosas mismas que el objeto de la inteligencia está en ellas (en el ente mismo).

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