Macbeth Ensayo

Macbeth, poder, control y maldad

Antes de comenzar, aclaro que no soy erudita de tan reconocido dramaturgo, leí esta obra hacer mucho tiempo, pero hoy, me ha animado un excelente documental de la BBC dedicado a “Macbeth”, narrado por Ethan Hawke actor estadounidense (de mis favoritos) Por eso insisto en que la inspiración al escribir estas reflexiones, surgen animadas por los hechos que me han refrescado tan recientemente tal personaje, enfocados más hacia su lado oscuro y temible, que a la excelentísima creación de Shakespeare, en sus detalles históricos o artísticos.

Macbeth, luego de regresar victorioso de una batalla, encuentra en su camino a tres brujas, hechiceras, quienes le profetizan que él será Rey Escocia. Este evento se anida en su ser más como una verdad que como una profecía y se convierte en el objetivo de su existencia, se confabula como una serpiente venenosa que lo domina, despierta el ego de la ambición, vanidad, arrogancia, orgullo, pero no solo ocurre en su persona, ya que al comentarlo a su esposa, lady Macbeth, ella misma se transforma en la primera artífice para fraguar la logística que permita que su esposo sea el próximo Rey de Escocia, por supuesto, ya se sabe que los reyes tenían un carácter divino y la planificación de Macbeth y su esposa se consolida en una serie de asesinatos en serie que los lleva ejecutar la maldad en sus extremos más dantescos, eliminando del camino a todo quien impida la meta propuesta, vaticinada, previamente, por las citadas pitonisas. Comienzan asesinando a Duncan, Rey de Escocia por derecho y con lady Macbeth a su lado <combustible inagotable que aviva la flama compartida y desmedida hacia el poder> Macbeth no consigue saciar su sed aún ante la continuidad de asesinatos que no cesan. Frente cualquier presunta amenaza que se vislumbrara en el horizonte y pudiese afectar su permanencia de tan nefasto reinado, es eliminada a sangre fría. A esta obra suelen llamarla la obra maldita, de hecho existe la superstición de que llamarla por su nombre, es decir “Macbeth” acarrea mala suerte, por ese motivo, se refirieren a la creación maestra como “Tragedia escocesa” cito “La canciones de las hechiceras en Macbeth, se comenta que son hechizos malvados, que van echando maldiciones a diestro y siniestro a los que participan en esta obra y hasta a sus espectadores” fuente http://www.madridoculto.com/supersticionesentrecamerinos.htm

Monólogo Macbeth habla tras la muerte de Lady Macbeth:

“Un día u otro había de morir. Hubiese habido un tiempo para tales palabras… El día de mañana, y de mañana, y de mañana se desliza, paso a paso, día a día, hasta la sílaba final con que el tiempo se escribe. Y todo nuestro ayer iluminó a los necios y la senda de cenizas de la muerte. ¡Extínguete, fugaz antorcha! La vida es una sombra tan sólo, que transcurre; un pobre actor que orgulloso, consume su turno sobre el escenario para jamás volver a ser oído. Es una historia contada por un necio, llena de ruido y furia, que nada significa”

¿Qué hace que un ser, valiente y admirado, reconocido por el Rey a quien sirve en las luchas por la defensa de Escocia se transmute en semejante engendro? En esa época de brujas, hechiceros y oráculos, sus mensajes poseían el poder de la palabra, tenían gran peso y ejercían su “magia” en seres cuyo corazón, fuese abono fértil para que la crueldad se prendara en ellos, floreciera y se instaurara de manera permanente, sin retorno. Realidades así entendidas, unido a la esposa, lady Macbeth, igualmente ambiciosa y cruel, conjugan a dos seres como símbolo de la impiedad, asesinos seriales cuyas maléficas existencias generan aterradoras consecuencias ¿la peor? muerte de inocentes únicamente para “beber” el poder y ejercerlo a toda costa.

La maldad llevada a extremos del crimen, no tiene retorno, es una de las decisiones más nefastas de la vida <el mundo no vuelve a ser el mismo> y el perpetrador, tampoco. En la obra, lady Macbeth se va deshaciendo, va dejando jirones de piel y distancias… mientras que su esposo, aún impactado por sus acciones, en vez de redimirse, se transmuta en máquina de matar.

En la vida nos tropezamos con “Macbeth” quienes asesinan parte del ser que somos, dejan daños colaterales, decepciones y vacíos Cabe preguntarse ¿Por qué lo permitimos? Únicamente si somos infantes estamos a merced de la maldad, pero luego, detectar y bloquear a esos seres inhóspitos debe ser ley de vida. Exámenes exhaustivos de quiénes somos ayudan en las emergencias de la vida, cuando vamos buscando caminos para despertar el ser.

Vale la pena destacar que como ha sido tradición, el papel de la mujer en la obra, persiste en su carácter de “tentación malsana” fuente de perversiones que incitan al hombre por los caminos del crueldad y la perdición. En este caso, ya la tierra venía abonada por las profecías de las hechiceras; no obstante, Lady Macbeth, típico caso de sexismo histórico, viene a ser el oxígeno que enciende aún más, las ansias de poder anidadas en su esposo. Felizmente, ahora, el hombre culto, seguro de sí mismo, inteligente pronóstico del siglo XXI, ve a la mujer como un ser igualmente inteligente y capaz, a quien valora en la misma medida que se respeta él mismo. Obviamente, el siglo XXI sigue plagado de seres, de ambos sexos, brutos e ignorantes.

He buscado algunos fragmentos de El miedo a la libertad de Erich Fromm, texto que estudié en la universidad y en su momento, como ahora, me ha parecido un ensayo muy profundo sobre el ser humano y el tema de la libertad en cuanto a individuo por construirse conscientemente, así como análisis de las relaciones de “poder” Cito:

“El proceso de crecimiento de la libertad humana posee el mismo carácter dialéctico que hemos advertido en el proceso de crecimiento individual. Por un lado se trata de proceso de crecimiento de su fuerza e integración, de su dominio sobre la naturaleza, del poder de su razón y de su solidaridad con otros seres humanos. Pero, por otro lado, esta personalización creciente significa un aumento paulatino de su inseguridad y aislamiento, y por ende una duda creciente del propio papel en el universo, del significado de la propia vida, y junto con todo esto un sentimiento creciente de la propia impotencia e insignificancia como individuo”

Fuente http://es.scribd.com/doc/3814940/Erich-Fromm-Miedo-a-la-libertad

La

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