Pasiones Del Alma

El Tratado sobre las Pasiones del Alma fue publicado en París en 1649 y es la pieza de Filosofía Moral por excelencia de Rene Descartes (considerado el padre de la filosofía moderna, 1596 – 1650), fue la última obra que publico en vida y se puede considerar como su testamento filosófico; fue escrita a instancias de la princesa Isabela de Bohemia, y su idea central es analizar la posibilidad de moderar y dominar las pasiones.

Descartes afirma que Cuerpo y Alma son substancias independientes y autónomas que pueden subsistir independientemente, aunque en algunas partes de su Tratado esta separación no esta tan clara (según algunos autores, Descartes hizo hincapié en la separación de cuerpo y alma para evitar problemas con la Iglesia), pero en el Hombre aparecen unidas, están juntas y se comunican.

En su obra, Descartes asegura que el Alma puede tener sus placeres propios pero los que comparte con el Cuerpo y tienen su fuente en las pasiones, por lo que toda felicidad depende de las pasiones así como toda desgracia.

El Tratado de las Pasiones del Alma, desarrollado con la intención de explicar las pasiones, no desde el punto de vista del filosofo moral sino como Físico, consta de tres partes: en la primera trata de las pasiones en general y de la naturaleza del Alma, localización de recuerdos y pasiones, etc.; en la segunda trata de las seis pasiones fundamentales (admiración, amor, odio, deseo, alegría y tristeza) y, en la tercera, de todas las demás.

Inicia su explicación sobre las pasiones del Alma por una descripción de la fisiología humana, para aclararla con una reflexión acerca de la moral y darnos a entender que las mismas son el resultado de la unión entre Cuerpo y Alma.

Nos habla sobre la Virtud y la Felicidad y un punto extremadamente interesante de su “Tratado” es que Descartes es uno de los primeros autores (por no decir el primero) que señala otro lugar que no es el corazón como el recinto del Alma, de las pasiones y del pensamiento; el lugar que designa como fundamental para la Vida es la GLANDULA PINEAL que, aunque sabe que se encuentra en el cerebro, no lo toma (al cerebro) como centro de pensamiento (Alma). Y nos da la idea de que en nosotros residen “espíritus animales” que son los que controlan la glándula pineal, por ejemplo: para Descartes, las imágenes entran divididas para que luego estos “espíritus” las unan y se conciban como un todo. Y se esfuerza en explicar el origen natural de las pasiones como “espíritus animales” asociados a acciones de nuestro cuerpo pero que afectan a nuestra alma.

Lo propio del Alma es pensar y sus pensamientos son de dos tipos: unos son las acciones del Alma y los otros sus pasiones, Las acciones son actos voluntarios o “voluntades” que parecen depender solo de nuestra Alma y proceden de ella. Las pasiones son agitaciones del Alma producidas por los humores del cuerpo (espíritus animales) o por la acción de la propia Alma; por el temperamento del cuerpo o por las impresiones que se encuentran fortuitamente en el cerebro. Todas pueden ser causadas por los objetos que mueven los sentidos; por consiguiente, para hallarlas todas, bastará con considerar que efectos producen en nosotros dichos objetos.

Se puede decir que los Estados Espirituales (Pasiones) son el efecto de una acción del cuerpo sobre el alma. (1)

2 ARTICULOS:

Art. 91 Definición de la alegría.

La alegría es una de las seis pasiones más importantes contempladas por Descartes en su Tratado sobre las pasiones del

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