ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Platón Teoría De Las Ideas


Enviado por   •  10 de Marzo de 2014  •  2.187 Palabras (9 Páginas)  •  251 Visitas

Página 1 de 9

PLATÓN

TEORÍA DE LAS IDEAS

ANTECEDENTES

Antes de abordar la célebre doctrina platónica se hace necesario analizar los antecedentes filosóficos de la filosofía de Platón.

Parece que Platón fue discípulo de Cratilo (a su vez discípulo de Heráclito) que afirmaba el carácter perecedero, cambiante y esencialmente variado de la naturaleza sensible. Por otra parte, conoció a los eléatas y su visión monista y estática de la realidad. Pues bien, la teoría de las ideas de Platón implica un dualismo ontológico en el que el mundo sensible se va caracterizar por la pluralidad y el movimiento (de acuerdo a la visión de Heráclito) y el mundo de las ideas por la inalterabilidad y el estatismo (realidad parmenidea).

Además, Platón rechazó la explicación atomista de la naturaleza por entender que el orden no puede ser el resultado azaroso el desorden: ha de haber un modelo que estructure la realidad de modo que esta resulte armoniosa y cognoscible, este modelo lo constituirán las ideas.

Entre los antecedentes filosóficos de Platón cobra especial relevancia la figura de su maestro Sócrates, quien se había opuesto tajantemente al relativismo de las sofistas, defendiendo la existencia de una verdad única y absoluta, una definición universal y objetiva de los conceptos morales. Platón fue más lejos que su maestro al establecer que a estos conocimientos universales y necesarios corresponde una realidad con esas mismas características.

Por último, no hay que olvidar la influencia del pitagorismo y su interpretación matemática del universo, así como su doctrina de la trasmigración de las almas. Platón dará gran importancia a las matemáticas cuyos objetos considera reales y captables con la inteligencia y defenderá la inmortalidad del alma, relacionando con ella su famosa teoría de la reminiscencia.

INTENCIONES

Posiblemente sea la Teoría de las Ideas el tema platónico fundamental, pues es a la vez el punto obligado de referencia para todos los demás temas. Tres son, al menos, las intenciones de esta teoría:

• Una intención ética: Platón, como Sócrates, quiere fundar la virtud en el saber. Para ser justo, por ejemplo, es preciso conocer qué es la justicia. Frente al relativismo moral de los sofistas, Platón reclama la existencia de una Idea eterna e inmutable de Justicia (o de cualquier otra virtud). Esta preocupación llena sobre todo los primeros diálogos aunque no haya todavía en ellos una formulación explícita de la Teoría de las Ideas.

• Una intención política (íntimamente ligada con la anterior): los gobernantes han de ser filósofos que se guíen no por su ambición política, sino por ideales (las Ideas) trascendentes y absolutos. Este constituirá el principal proyecto platónico: educar a futuros gobernantes filósofos para que lleguen alcanzar el conocimiento de las ideas superiores (Bien, justicia etc.)

• Una intención científica: La ciencia (epistéme) sólo puede versar sobre objetos estables y permanentes, universales. Si queremos hacer ciencia, esos objetos han de existir. Y como todos los objetos sensibles están sujetos a cambios permanentes, son contingentes y particulares, habrá que buscar otro tipo de objetos para la ciencia: las Ideas.

DUALISMO ONTOLÓGICO

Veamos la problemática a la que se enfrentaba Platón a través de un texto de la “Metafísica” de Aristóteles:

“Platón desde su juventud se había familiarizado con Cratilo, su primer maestro, y, efecto de esa relación, era partidario de la opinión de Heráclito de que todos los objetos están en flujo o cambio perpetuo, y no hay ciencia posible de esos objetos. Más tarde conservó esa misma opinión. Por otra parte, fue discípulo de Sócrates, cuyos trabajos no abrazaron ciertamente mas que la moral y de ninguna manera el conjunto de la naturaleza, pero que al tratar de la moral se propuso lo general como objeto de sus indagaciones, siendo el primero que tuvo el pensamiento de dar definiciones. Por ello, Platón, heredero de esta doctrina y habituado a la indagación de lo general, creyó que sus definiciones debían recaer sobre otros seres que los seres sensibles, porque ¿cómo dar una definición común de los objetos sensibles que mudan continuamente? A estos seres los llamó Ideas, añadiendo que los objetos sensibles están fuera de las Ideas y reciben de ellas su nombre, porque en virtud de su participación en las Ideas todos los objetos de un mismo género reciben el mismo nombre que las Ideas”

Platón realiza una duplicación del mundo: “Mundo sensible”, compuesto por realidades particulares, contingentes y cambiantes y “Mundo inteligible”, compuesto por realidades universales, necesarias, inmutables absolutas y eternas (las ideas o formas). Estas últimas constituyen la auténtica realidad. Lo que de realidad hay en el mundo físico deriva precisamente de ellas. A cada clase de objetos existentes en el mundo sensible le corresponde una idea, una esencia en el mundo inteligible. Por tanto, no hay que entender la palabra idea como representación mental, son realidades que existen con independencia del carácter perecedero de lo particulares, son la auténtica realidad, causa del ser de las cosas y fundamento de todos los juicios que podemos realizar sobre ellas.

EVOLUCIÓN DE LA TEORÍA EN LA OBRA DE PLATÓN

Esta duplicación del mundo la realizará Platón en sus diálogos de madurez. Dos de los más significativos son “El Fedón” y “La República”.

En “El Fedón” aparece por primera vez, de manera explícita, la teoría de las ideas, pero subordinado al tema de la inmortalidad del alma y la doctrina de la reminiscencia (El conocimiento se explica como reminiscencia o recuerdo de un conocimiento previo de las ideas). Según esto, Platón sostiene en este diálogo la trascendencia de las ideas, su existencia independiente de las cosas individuales que se aproximan a ellas. El principal problema que se plantea en relación con esta formulación de la teoría de las Ideas es el de cuál es la relación entre las cosas sensibles y las Ideas, pues Platón utiliza dos lenguajes distintos:

1) El lenguaje de "participación» y "presencia" (lenguaje predominante en los diálogos anteriores), que significa que los particulares "participan" de las Ideas, mientras que estas se hacen “presentes” en los particulares.

2) El

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (13.7 Kb)  
Leer 8 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com