RESUMEN: Capitalismo De Marx (Adolfo Carpio)
NatiZappa13 de Mayo de 2015
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El capitalismo histórico: MARX
(Capitulo XII- Principios de la Filosofía- Adolfo Carpio )
Crítica de la filosofía
Como filósofo hegeliano que era, estaba convencido de que la filosofía de Hegel era la expresión más acabada de la sociedad burguesa; estaba convencido que la filosofía de Hegel era la filosofía perfecta y que filosóficamente no se podía ir más allá de ella. Por lo tanto, Marx dice "ya no debiéramos ocuparnos más de la filosofía sino realizarla, llevarla a la práctica.
Para Marx la realidad –cuando él habla de realidad se refiere generalmente a la realidad histórico-social, al mundo del hombre- tiene una estructura dialéctica que se encamina a la perfecta realidad consciente.
Hegel creía que las formas sociales y políticas de su época eran adecuadas para el pleno cumplimiento de las exigencias racionales; que mediante el mero desarrollo gradual del sistema socio-político vigente se llegaría se llegaría a la realización de las supremas capacidades del hombre, pero entonces las dialéctica quedaba detenida y se consagraban los hechos e instituciones políticos y sociales ya existentes como si fueran perfectamente adecuados a la razón.
Existencia del proletariado - praxis
Con el sistema de Hegel la dialéctica había llegado a su cumplimiento final, la filosofía llegó a su final. Pero, la dialéctica por ser el movimiento de la realidad misma, no puede detenerse sin que la realidad misma se detenga y desaparezca; por lo tanto, la dialéctica debe ser abierta y "revolucionaria".
Marx sostiene que las contradicciones están lejos de haber quedado conciliadas. La verdad, los principios de la razón, no coinciden con el orden social y político existente. Hay en el mundo humano un elemento irracional, inadecuado respecto de la idea, desajustado o inarmónico respecto de la totalidad, y que es señal de que la verdad todavía no se ha realizado plenamente, ese elemento irracional es la existencia del proletariado. La sola presencia de éste contradice la supuesta realidad de la razón, porque la existencia del proletariado significa la existencia de una clase social entera que representa la negación de la razón. El proletariado es la clase totalmente desposeída, la que carece de toda propiedad, y por eso no es libre ni es persona, si es que la libertad y la persona se objetivan y apoyan en la propiedad. Hegel enseño que "el hombre es hombre gracias a su espíritu", es decir, mediante las actividades espirituales, como el arte y la filosofía, es donde se encontraría la forma más perfecta de vida humana. Pero el proletariado está completamente separado de esa esencia, porque las condiciones de su existencia no le permiten ocuparse de ello, agobiado por su trabajo, por sus necesidades puramente animales que a duras penas logra calmar, el proletariado carece de posibilidad de acceder a las formas de vida propiamente humanas, a la cultura. El proletariado es entonces "un hombre que no puede realizarse como hombre". Escribe Marx: "el hombre (el obrero) solo se siente obrando libremente en sus funciones animales, en el comer, beber y engendrar, y todo lo relacionado a la habitación y la vestimenta, y en cambio en sus funciones humanas se siente solo como animal. Lo animal se convierte en humano y lo humano en lo animal."
La existencia del proletariado es el testimonio de que la razón no está plenamente realizada. Según Marx, las reconciliaciones hegelianas están logradas solamente en el reino del pensamiento, pero no en la realidad, porque el suyo es "un superar pensante que deja intacto su objeto en la realidad".
Según Marx, se trata de hacer coincidir los hechos y la razón, pero no en el plano abstracto del pensamiento sino en el plano social y político. Esta tarea no puede cumplirse solo teoréticamente mediante la teoría filosófica, sino que debe consistir en la praxis socio-política y revolucionaria.
Marx sostiene que lo que importa ya no es propiamente filosofar sino modificar el mundo (el mundo humano, que conlleva la transformación del mundo natural), niega la filosofía (como pura teoría) y pretende reemplazarla por la praxis. Porque la filosofía es pura teoría y la teoría deja las cosas tal como están, y la teoría en su forma más perfecta ha declarado que todo lo real es racional a pesar de que un aspecto muy importante de la realidad, el proletario, está excluido de la racionalidad, por esto hay que sustituirla por la praxis:
"la solución de las mismas oposiciones teóricas solo es posible de modo práctico, solo es `posible mediante la energía práctica del hombre y por eso su solución no es tarea exclusiva del conocimiento, sino una verdadera tarea vital que la filosofía no pudo resolver porque la entendía únicamente como tarea teórica."
La solución de los problemas del hombre solo se alcanzará mediante la praxis revolucionaria, la acción críticamente dirigida.
Idea del hombre
Qué es el hombre no puede determinarse a partir del espíritu ni de la Idea, sino a partir del hombre mismo, de lo que es concretamente, el hombre de que se debe hablar es:
"el hombre real, corpóreo, en pie sobre la tierra firme y aspirando y exhalando todas las fuerzas naturales"
Anteriormente la esencia del hombre pero solo se llegó a una determinación de autoconciencia abstracta, pero el hombre no es un ser abstracto, agazapado fuera del mundo; el hombre es el mundo del hombre: Estado, sociedad. (Hegel)
El hombre no se el "ego" del ego cogito sino que el hombre es su mundo humano. Marx, en lugar de buscar la esencia del hombre como determinación interior, la busca en las relaciones exteriores que cada hombre tiene con la naturaleza y con los otros hombres en conjunto con sus relaciones sociales, "con el mundo del hombre".
"el hombre no es algo abstracto e inherente a cada individuo. Es en su realidad un conjunto de las relaciones sociales."
Las relaciones sociales, la sociedad y la naturaleza Marx no las piensa como algo dado y estático, como objeto de pura contemplación, como algo teórico, sino que las piensa como realizaciones del hombre mismo, como creaciones suyas e históricamente cambiantes. Marx concibe al hombre como el ente que se produce a si mismo. Y ese acto autogenerador del hombre es el trabajo: "el trabajo es el acto de autoproducción del hombre".
Para Marx el trabajo es una relación real del hombre con las cosas mismas, con la naturaleza y con los demás hombre, praxis histórico-social: "el hombre mismo se diferencia de los animales en el preciso momento en que comienza a producir sus medios de vida. Lo que el hombre es coincide con su producción, tanto con lo que produce como con el cómo lo produce.
El trabajo constituye entonces la esencia del hombre, el modo cómo es concretamente, el medio para su realización y para el desarrollo completo de sus posibilidades, para su satisfacción y felicidad.
Producir: la acción mediante la cual el hombre hace algo sacándolo de si y poniéndolo fuera de sí, en la naturaleza. El trabajo es la traducción en realidad objetiva de lo que en primera instancia es una representación. Por ejemplo, el carpintero va a fabricar una mesa, para ello ha de tener primero una idea o representación de lo que quiere hacer, y precisa un material donde esa idea se objetive (se plasme), la madera. La operación del trabajo se basa en que el carpintero transforma la madera con sus herramientas hasta el momento en que la mesa esté lista: ha objetivado plenamente lo que en primera instancia era solamente una idea.
"lo que de antemano distingue al peor arquitecto de la abeja es que, el arquitecto ha construido la célula en cabeza antes de construirla en la cera. Al fin del proceso del trabajo surge un resultado que ya al comienzo estaba en la representación del obrero, ya existía idealmente. No es solo que éste opera un cambio en la materia prima, sino que también realiza en ésta su finalidad, que él conoce y, determina como ley, el modo de su obrar y a la cual tiene que subordinar su voluntad".
El animal también trabaja, pero a diferencia de éste, el trabajo humano está acompañado de conciencia, es un trabajo social y realiza un proceso histórico. La diferencia entre el trabajo humano y el "trabajo animal" consiste en que el trabajo humano está siempre procedido o dirigido por una idea o representación, por la conciencia. Marx señala la finalidad como categoría fundamental del trabajo, forma de causalidad donde lo primero es el "efecto", pero no ya realizado sino como meta a la que tiene un proceso.
El trabajo consistirá en la objetivación o exteriorización en la naturaleza de la representación que el hombre tenga, una objetivación de sí mismo. Esto produce en el hombre un desdoblamiento donde es a la vez sujeto y objeto, no solo intelectualmente, como en la conciencia, sino que además se desdobla "activa y realmente " y se contempla a sí mismo en un mundo creado por él.
El proceso de autoproducción del hombre mediante el trabajo es un proceso dialéctico: un salir de sí del hombre, una exteriorización suya en la naturaleza. El trabajo significa una humanización de la naturaleza, porque en ella el hombre va dejando su huella, sus ideas, en definitiva, su propia esencia. La transformación introducida en la naturaleza trae como consecuencia la transformación de la vida humana:
"La sociedad es la plena unión del hombre con la naturaleza, la verdadera resurrección de la naturaleza, el naturalismo realizado del hombre y el humanismo realizado de la naturaleza"
La ciencia
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