Taller de ética

INSTITUTO TECNOLÓGICO NACIONAL DE MÉXICO. [pic 1][pic 2][pic 3]

CAMPUS: H.C JUCHITÁN DE ZARAGOZA, OAXACA (ITI)

INTEGRANTES:

• HENRY IRÁN JIMÉNEZ LÓPEZ.

• CRISTIAN JIMÉNEZ JIMÉNEZ.

• MARLET RAMÍREZ RAMÍREZ.

• HÉCTOR DANIEL TALÍN TALÍN.

• INGRID MICHELLE ENRIQUEZ CALLEJA

• ALMIRA SANTIAGO DÍAZ.

DOCENTE: M.A ARTURO ALAVEZ MAYO.

MATERIA: TALLER DE ÉTICA.

CARRERA: CONTADOR PÚBLICO.

SEMESTRE: 2DO

INTRODUCCIÓN:

El comportamiento ético es esencial en todos los ámbitos de la vida, tanto en el ámbito personal, social, académico, como en la ciudadanía. En cada uno de estos ámbitos, el comportamiento ético se refiere a la conducta de una persona que cumple con los principios y valores éticos que se consideran adecuados para cada entorno.

En el ámbito personal, el comportamiento ético se refiere a la conducta de una persona en su vida diaria, en la que se deben considerar valores como la honestidad, la responsabilidad, la tolerancia y el respeto a los demás. Esto implica que debemos ser conscientes de las consecuencias de nuestras acciones y decisiones, y trabajar por nuestro propio bienestar y el de las personas que nos rodean.

En el ámbito social, el comportamiento ético se relaciona con la conducta de las personas en relación con la sociedad en la que viven. Esto implica que debemos ser responsables y respetuosos con las normas y leyes establecidas, y trabajar por el bienestar y la justicia social.

En el ámbito académico, el comportamiento ético se refiere a la conducta de los estudiantes, profesores y demás miembros de la comunidad académica que cumple con los principios y valores éticos que se consideran adecuados para este entorno. Esto implica que debemos ser honestos, responsables y respetuosos con los derechos de propiedad intelectual y la propiedad académica.

En el ámbito de la ciudadanía, el comportamiento ético se refiere a la conducta de las personas como miembros de una comunidad, en la que se deben considerar valores como la solidaridad, la justicia y la democracia. Esto implica que debemos participar activamente en la vida política y social, y trabajar por el bienestar común y la construcción de una sociedad justa y equitativa.

En resumen, el comportamiento ético es fundamental en todos los ámbitos de la vida, y su práctica es esencial para el desarrollo de una sociedad más justa, equitativa y respetuosa con los derechos humanos. Por lo tanto, es importante fomentar y practicar el comportamiento ético en cada uno de estos ámbitos, mediante políticas y normas claras, programas de capacitación y sensibilización, y la promoción de una cultura de integridad y respeto en todos los ámbitos de la vida.

1.2.- Significado y sentido del comportamiento ético.

El comportamiento ético se refiere a la conducta de una persona que es considerada moralmente correcta, es decir, que cumple con los principios y valores éticos que se consideran adecuados para una sociedad determinada. Estos principios y valores éticos se basan en ideas como la honestidad, la justicia, la integridad, la responsabilidad, la empatía, la tolerancia y el respeto a los demás.

El sentido del comportamiento ético radica en la idea de que todos tenemos la responsabilidad de actuar de manera correcta y justa para nosotros mismos y para los demás, y de respetar los derechos y la dignidad de todas las personas. Esto implica que debemos ser conscientes de las consecuencias de nuestras acciones y decisiones, y trabajar por el bienestar de la sociedad en su conjunto.

1.2.1 En el ámbito personal y social.

Ética en el ámbito personal y social La palabra ética proviene del vocablo griego ethos que significa comportamiento o costumbre.

Ética son los principios de la conducta humana. En la historia de la ética hay tres modelos de conducta principales: la felicidad o placer; el deber, la virtud o la obligación; y la perfección, el más completo desarrollo de las potencialidades humanas. Como una ciencia normativa, la ética debe ser aplicada por todos los integrantes de una sociedad en todos los ámbitos para un equilibrio en la conducta.

Los ámbitos en que la ética aparece son en el ámbito personal, social, académico, y en el ámbito del ejercicio de la ciudadanía.

Ética personal:

La ética en el ámbito personal se refiere a la valoración de la persona en sí misma, es decir, la autovaloración, al desarrollo de una conciencia sobre la propia dignidad personal, y esto determina la atención y desarrollo de ciertos valores. La ética en el ámbito de la sociedad corresponde a los valores que nos formamos, aplicados en la forma de relacionarnos con el medio social.

La ética personal forma parte integral del actuar de las personas respecto a las acciones realizadas en la ejecución de sus actos vivenciales, sean estos de cualquier naturaleza. Se trata de una forma de vida, de un compromiso permanente cuya violación es inexcusable ante la propia persona y aquellos que conocieron de las acciones violatorias.

El alma humana está compuesta por tres elementos —el intelecto, la voluntad y la emoción— cada uno de los cuales poseen una virtud específica en la persona buena y juega un papel específico. La virtud del intelecto es la sabiduría, o el conocimiento de los fines de la vida; la de la voluntad es el valor, la capacidad de actuar, y la de las emociones es la templanza, o el autocontrol.

La virtud última, la justicia, es la relación armoniosa entre todas las demás, cuando cada parte del alma cumple su tarea apropiada y guarda el lugar que le corresponde.

La responsabilidad o ética individual se considera más importante que la obediencia a la autoridad o a la tradición.

Ética social:

La ética social comprende todas las normas de comportamiento que tiene el ser humano para poder convivir con los demás.

Estas normas también rigen la conducta del ser humano en relación con el medio ambiente y con las instituciones. Busca que el ser humano se comporte de manera tal que se beneficie él y a lo que lo rodea.

Por consiguiente, se dice que la ética social rechaza toda acción que pueda resultar perjudicial. En consecuencia, estas normas establecen que las relaciones en la sociedad deben ser de manera voluntaria y deben generar un beneficio para todos los que participan en ella.

Por tal motivo, la ética social requiere que cada ser humano tenga un estado de conciencia que le permita identificar lo que “está bien” y lo que “está mal”.

También es necesario que tenga sentido de cooperación y participación, voluntad e iniciativa. Todo con el objeto de que pueda hacer de manera voluntaria lo que los demás quieren y evitar aquello que no quieren.

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