Como se da La llegada de los españoles a territorios Incaicos.-

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Trabajo De Ensayo #2

Nombre: Rosa Elena Bravo Castillo

Fecha: 20/12-2017

Paralelo: 9NO EGB “B”

El Sacrificio Del Último Inca

La llegada de los españoles a territorios Incaicos.-

     El momento en que los españoles superaron  los diferentes problemas y dificultades las caravanas españoles llegaron al anhelado Tumbes al mando de Francisco Pizarro en el año 1532. La expedición fue organizada y financiada  en panamá. Cuando llegaron encontraron a la maravillosa ciudad, una ciudad espectacular, sus templos, palacios y todo en si eran cubiertos con oro a lo que los españoles llamaron “El dorado”.

     Las adversidades no habían acabado debido a que los españoles no conocían su idioma, los Incas les contaban acerca de sus maravillosas en innumerables aventuras, la manera en la en andas llevaban a su líder con sus respectivos honores y por su puesto las enormes cantidades de oro que ese líder tenia.

     Los españoles tuvieron que dejar de lado sus sueños y concentrarse en el presente y así poder establecer un pequeño asentamiento para poder organizar las expediciones y para el descanso de soldados exhaustos por el viaje, fue así que en una ciudad Inca, debilitada por los constantes ataques recibidos fundaron uno de sus primeros asentamientos, algunos españoles describían a esta como la ciudad homónima del lugar de donde ellos prevenían. Los incas se encontraban debilitados debido a una guerra civil entre los hermanos Atahualpa y Huáscar para poder tener el poder del imperio, en el cual las tropas quiteñas que representaban al líder Atahualpa salieron victoriosas pero esto benefició de alguna u otra manera a las tropas españolas ya que fue una guerra entre hermanos lo cual debilito a los dos centros administrativos del imperio.

     Los indígenas que apoyaban al posible líder Huáscar no lograban asimilar la derrota por parte de las tropas quiteñas, así que decidieron llevar las cosas en paz, y formar alianzas con las comunidades posiblemente vencedoras  de los huiracochas. Atahualpa se encontraba descansando en un tumbo del hermoso centro administrativo de Cajamarca, Francisco Pizarro estaba totalmente consciente y conocía cada detalle sobre este problema, pero se encontraba un tanto preocupado ya que no sabía con qué tipos de armas contaban los indígenas y tenía temor a perder todo el oro de los territorios Peruanos,

     Y asi es como empezó, cuando el capitán Pizarro empezó a cruzar los distintos desiertos, en donde el día era extremadamente caluroso y en la noche los fríos extremos hasta que un dia después de la inmensa odisea pasada llegaron a las orillas des espectacular rio “Chira” donde fundaron la ciudad de “San Miguel”, la cual les serviría como un asentamiento en el cual proporcionarían lo necesario para empezar la conquista.

     Permanecieron en ese lugar 5 meses dejaron un sinnúmero de provisiones con Sebastián de Benalcázar quien años después conquistaría el Reino de Quito, parte hacia la sierra con sus hermanos Hernando y Gonzalo y con Hernando de Soto quien exploro la Florida. Estaban liderando a 100 soldados y 67 de ellos estaban a  caballo, días después se envió al capitán Hernando de Soto acompañado con un ejército conformado por cuarenta soldados capacitados y preparados para llegar un asentamiento Inca y ejercer su dominio en ellos, para llegar al pueblo de Caxas tuvieron que atravesar un sinnúmero de pueblos con diferentes técnicas de ataque o defensa. Al llegar a Caxas inicio el proceso de mestizaje y evangelización del mismo.

     El capitán Pizarro y sus soldados se encontraban terriblemente desconcertados debido a las adversidades que se les presentaban ya que los caminos eran exageradamente inhóspitos y con desniveles en los cuales se incluía los diferentes tipos de flora y fauna, el clima, la inestabilidad del territorio entre otros. Pizarro con el paso del tiempo iba confirmando que los presuntos rumores de aquel indio bien puesto, con una contextura extraordinaria, un rostro bellísimo y unos ojos tan profundos que aterrorizaba a cualquiera de sus enemigos bastaba con capturarlo y todo el ejercito que lo rodeaba quedara terriblemente debilitado.

     Fue así que Pizarro y sus soldados llegaron a una ciudad cercana del centro administrativo de Cajamarca, el Inca se encontraba consciente de los planes de aquellos “comedores de oro” fue así que decidió enviar al capitán Pizarro un par de patos rellenados con las lanas de sus distintos animales, a lo que al capitán Pizarro no le llamo la atención. Seis meses después llegaron al centro administrativo de Cajamarca, pero no con la apariencia de conquistadores sino totalmente sucios y con olores extremadamente desagradables.

“Cajamarca: todas las calles están empedradas aunque pesimamente, a pesar de que la cantería es abundante y barata. Tiene nueve templos entre grandes y pequeños; de ellos cuatro de cantería y bóveda de lo mismo, cuya descripción ira por separado. Todas las casas son de adobe y techos de paja; generalmente mal distribuidas y de un solo piso.”

     Cajamarca era una ciudad muy sencilla pero muy hermosa a la vez, sus templos eran magníficos. En esta ciudad se encontraba la casa de Atahualpa, pero no se la puede considerar como un templo ya que eran cuatro paredes con la altura de un hombre normal. En el centro de la ciudad había una pileta de piedra con hermosas figuras de tres tazas, la primera haciendo cascada.^[1]

     Cuando llegaron vieron a un ejército conformado entre veinte mil y cuarenta mil hombres, mando al capitán Hernando de Soto a que mantuviera y conociera al líder Inca Atahualpa, debido a que aquel capitán se demoró y la impaciencia de Pizarro eran muy marcadas decidió enviar a su hermano a cumplir el objetivo que el primer enviado aun no conseguía.

Deidades de los Incas.-

     Para los Incas el único dios en el sentido pleno de la palabra era Viracocha tenían otras deidades importantes como el Sol o Inti, Mama Quilla o Luna, La Pachamama, las estrellas entre otras. Para un Inca es difícil regalar algo que no le pertenece por más poderoso que sea.

“Viracocha era el dios creador del universo, surgió de las aguas y luego creo el cielo y la tierra. Considerado el señor o maestro del mundo, su culto estaba destinado solo a la nobleza. Como eran un dios nómada, se desplazaba  sobre el Corikente (su compañero) alado”^[2]

       Los Incas creían que el Dios Viracocha había creado a los seres humanos, la tierra, el cielo, los fenómenos naturales, etc. Las personas con rangos sociales tenían que rendirle culto, creían que volaba con un pájaro mago y de las plumas de esta bellísima ave elaboraban y confeccionaban la corona del emperador Inca.

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