Divino Comediante

La Divina Comedia

Canto 1: Dante está en un camino de vida errado e intenta enmendar el rumbo. Toma noción del Purgatorio y se da cuenta de que su pecado puede ser purificado. Sin embargo, para pasar deberá enfrentar a tres bestias: un león, una loba y una especie de tigresa, que representan la expiación (padecer el castigo) en el infierno, la purificación en el purgatorio y la beatificación en el infierno. Toma temor pero es ayudado por Virgilio.

Canto 2: Se inicia el viaje al inframundo, por solicitud de Beatriz, quien ha sacado a Virgilio del limbo y le ha pedido que lleve a Dante en vida por el infierno. Ya ha habido personas que han llegado al infierno, puntualmente Eneas (quien baja para tomar sabiduría y fundar la espiritual y gloriosa Roma, sede de Pedro) y San Pablo (antes de dirigirse a los corintios en el Apocalipsis). Ante tales figuras, Dante se siente amedrentado e indigno de conocer el infierno en vida, pero Virgilio lo exalta y lo motiva a seguir, dado que hay alguien que cree en sus virtudes: Beatriz, quien ha encargado el viaje. Dante entra por un camino salvaje y duro.

Canto 3: Dante llega a la puerta del infierno, a una suerte de preludio al limbo (lugar donde están aquellos indiferentes a Dios), donde se halla con una inscripción que guarda relación con la santísima trinidad (la divina potestad es Dios padre, la sapiencia es hijo y el primer amor es el espíritu santo).

* Dante menciona a un tal individuo de la gran renuncia que puede ser un papa (Celestino V)

1.- El río Aqueronte y Caronte, el barquero: las almas cruzarán un río en barca, conducida por Caronte, quien se molesta por la presencia de un humano vivo (Dante) en su barca. Sin embargo, Virgilio lo calma y, al igual que a Pluto, informa que están allí por orden del cielo (por lo tanto superior a las fuerzas del inframundo). Se logra inferir que hay una ley divina que impide hacer pasar a las “almas buenas”, o sea a los no condenados por delitos contra Dios.

2.- Hay un terremoto, Dante pierde la conciencia y luego se halla al otro lado del río.

Canto 4: Virgilio y Dante llegan al primer círculo del Infierno, el limbo, donde están las almas de aquellos que no conocieron a Dios. En breve, no cometieron pecados pero no fueron limpiados del pecado original de Adán y Eva mediante el bautismo. Se nota que ya no hay quejidos, sino suspiros, porque no tienen un destino asignado. Son sometidos a la indiferencia. Hay un lugar especial para los más notables, ejemplos de la virtud, como Saladino, Electra, Casandra, Homero, Ovidio, Lucano, etc. (se encuentran en un castillo).

Virgilio menciona que a ciertas personas Dios les confirió la posibilidad de ascender al paraíso sin estar bautizados: Adán, Abraham, Moisés, etc.

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