UNA PERSPECTIVA HISTÓRICA DE VENEZUELA

Nombre: Lina María Lozano Bonilla

UNA PERSPECTIVA HISTÓRICA DE VENEZUELA

La relación mágica entre la naturaleza, la riqueza y la sociedad

El presente texto busca hacer una remembranza a grandes rasgos de los hechos históricos y políticos de Venezuela, para así de algún modo dar cuenta de la actual situación y ver como este es un buen caso, no solo para comprender su fracaso económico, sino también social e institucional. Y es por eso, que haciendo alusión a una reconstrucción histórica se dice que en un comienzo la economía venezolana se basaba esencialmente en una agricultura tropical pre-moderna, la cual presenta un cambio y transformación en la dictadura de Juan Vicente Gómez, al ser este quien promueve la explotación de petróleo y quien a su vez es capaz de generar una transformación social, aunque el petroestado nació durante la primera administración de Pérez. Y es aquí donde se le dio paso a una estabilidad política y económica, tanto así, que el 60% de la población paso a pertenecer a la clase media del país, llegando a estar el PIB per cápita tan alto y tan cerca como el de los países europeos; donde el estado se hacía cargo del manejo de la fertilidad del subsuelo y los puestos burocráticos en la distribución “justa” de lo que esta podía producir, pues este dinero al surgir de un bien común pertenecía a ese grupo social, el cual gozaba de ese derecho inherente e inmanente a participar y obtener beneficios, generando así muchas divisas para la sociedad. Ya conceptualizándolo en el momento actual, la burocracia es una fiel muestra de la paradoja de “lo que pertenece a todo el mundo realmente no pertenece a nadie”, es simplemente para ser consumido o apropiado, por lo que en Venezuela, la idea de la propiedad suele ser muy frágil en todas las capas de la sociedad. Si cualquier individuo, clase social o grupo étnico consume más que el resto, el origen sólo puede encontrarse en la corrupción, el saqueo, la explotación o, simplemente, la influencia o la conexión de la persona o grupo social con el mecanismo de la producción y distribución de la riqueza, es decir, el estado.

Por otra parte, se hace necesario enfatizar que el poder político en Venezuela se ha caracterizado por poderes y tendencias autoritarias, por sucesiones de dictaduras y por jefes políticos poseedores de carisma, que han logrado legitimidad dentro de esta y han imposibilitado a otras personas, partidos o sectores por ir en contravía de sus perspectivas, tal cual la situación actual. Entonces, Venezuela es presentado como un estado intervencionista, como un estado legal con una participación burocrática sistematizada en todos los niveles del estado, aunque claro, hay muchas circunstancias en las que la burocracia se convierte en un mal necesario, pues un estado para funcionar de manera eficiente requiere una forma eficaz de recoger las decisiones sobre las actividades de las que es responsable, así como una forma de asegurar que los fondos públicos se empleen para los fines a los que se les hayan asignado, pero donde no es, ni era casualidad que cada proceso electoral fuera precedido por el lanzamiento de nuevas “misiones sociales” presentadas como el medio por el cual habían logrado mantener vivo su consenso sustancial popular en los sectores socioeconómicos de bajos ingresos, es decir, su fuente de capital electoral, tan comunes en este país y reducidos en becas, subsidios, donaciones, viviendas, créditos y demás, llevando a ver una cultura economía estructuralmente parasitaria, acostumbrada a dichas misiones y a beneficios por el estado, pues el igualitarismo ligado a la idea de la riqueza, desprendido de una ética de trabajo sólida y basada en la naturaleza; cancelaba el mérito, la virtud y el incentivo para trabajar; trayendo entonces grandes consecuencias para esta comunidad, en la medida en que no se presentó un cambio de modelo económico y por tal la sociedad se había acostumbrado a contar con esos subsidios y beneficios, sin que la cultura “rebuscadora” tomara un papel dentro de la estructura y donde estos no imaginaban que este recurso podría llegar a un límite, siendo entonces, este el momento en el que empiezan a aparecer sectores que buscan un cambio político pero que también van tras busca de un puesto y espacio en el botín burocrático.

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