ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Arte Mueble Versus Arte Parietal


Enviado por   •  19 de Febrero de 2013  •  2.030 Palabras (9 Páginas)  •  620 Visitas

Página 1 de 9

Arte Mueble versus Arte Parietal

Ayer buscando por internet y entre los documentos sobre arte paleolítico que me he bajado o me han dado como apuntes, para así poder realizar esta recensión, me encontré con uno escrito por Smith P. en el 2003 llamado “Arte Rupestre Paleolítico en Cantabria”.

Dentro de este libro hay un primer apartado que se usa como introducción para aquellas personas novatas en estas andaduras, como yo, en el arte paleolítico de Cantabria. En la primera hoja de este capitulo, aparte del título; Técnica, temas, significados, motivos y dataciones del arte rupestre paleolítico de Cantabria, aparece una nota a pie de pagina para quien esta referida esta sección, “lectores menos familiarizados con el tema de referencia”, de antemano nos da una pauta de lo digerible que va ha ser este libro.

En el se habla del arte mueble en Cantabria, y como dice el título de este comentario, hace una reflexión cuantitativa y cualitativa del arte cantábrico, realizando un pequeño inventario de lo descubierto y de los lugares de donde proceden.

Aunque en algunas partes va un poco más allá, y habla de algunas de las diversas teorías existentes, todo en un plan un poco básico. Bueno, no del todo, porque yo no sabía que unos de los inventos más antiguos era el aerógrafo, y me llamó mucho la atención. También habla de las diferentes técnicas utilizadas, los colores, los temas, las pinturas realizadas, los animales y los no animales pintados y su significado, los soportes, los utensilios usados diariamente por los hombres paleolíticos, y por último las dataciones y sus problemas para dar una fecha aproximada de la pintura rupestre.

Pero a veces a los que leemos sobre este tema nos gustaría que la información no sea tan básica y se nos diera más información, para no tener que incrementar nuestro bagaje cultural con otros autores, para comprender o tener la mayor información posible de una sola vez. Así de esta manera me gustaría agregar esta información, que no es que no falte, sino que tal vez el autor consideró que no debía incrementar y ser más objetivo y más entendible en el tema. Tal vez lo que sigue no sea tan básico y no sea tan fácil de leer ya que agrupo ideas de otras personas y pensamientos míos, que son conclusiones muy precarias de lo que he leído hasta ahora.

En la primera monografía sobre Altamira, por ejemplo, se dedicaba un capítulo a enunciar los puntos de coincidencia entre las dos series: “la técnica de los grabados muebles y parietales es de hecho la misma... En unos y otros se utilizan los mismos procedimientos, líneas grabadas con silex de una forma idéntica. Aquí y allá se aprecia la misma perfección, el mismo cuidado por la exactitud, el mismo sentimiento de la realidad; la mayoría de los dibujos revela la misma seguridad de mano, pues a menudo y sin necesidad de enmendarse el dibujante ha acertado en la actitud, el aspecto y los rasgos característicos del animal representado, pues es un observador consumado de la naturaleza; trabaje sobre un hueso o sobre un panel rocoso le guían los mismos principios y los métodos” (Barandarián 1994: 45-79). Otra de las cosas que se pueden resaltar es la dificultad para clasificar las manifestaciones materiales de la cultura de los primitivos en términos excluyentes de la “práctico” frente a lo “no práctico”, de lo “ergológico” frente a lo “simbólico”, también, que aún no se sabe de la función de muchos de los objetos que lo portan ni sobre la intención de sus usuarios. Dicho de otra forma, y según el argumento de Sauvet, muchos signos parecidos del arte paleolítico pueden corresponder a significados diferentes como resultado final de un proceso: sea de homografía (por convergencia en un aspecto final simplificado de temas muy distintos de partida) o de polisemia (es decir, por adición o acumulación posterior de distintos significados ajenos al que inicialmente poseía el signo como propio, algo complejo pero válido).

De que el arte mobiliar se asienta sobre soportes variados en materia prima, tratamiento y destino. Como materias, se emplearon soportes de origen orgánico (astas y huesos de varias clases) y minerales. Por su tratamiento y destino se distinguen los soportes no elaborados de aquellos que se acondicionaron más o menos para usos particulares; y también se pueden diferenciar los utensilios de uso precario (por su mayor fragilidad) de los que durarían más tiempo.

Ya H. Breuil (1907: 394) había advertido el imperativo de las dimensiones de los soportes sobre la composición de la obra de arte mobiliar: “la estrechez de las superficies en que grababa el artista y su gusto por la simetría y el ritmo también debieron contribuir frecuentemente a hacerle modificar el motivo que copiaba o reproducía de memoria”. En principio, la ubicación y morfología de cada figura (dimensiones, orientación y actitudes) y la organización de los temas en cada campo suelen verse directamente condicionadas por las características del soporte (tamaño, formato y textura).

En bastantes casos, cada soporte mobiliar acoge un solo tema, sea signo o figura, pero también se produce una agrupación de figuras, similares o no, sobre el mismo soporte y hasta sobre un solo campo (cada una de sus caras o superficies continuas).

O, en la propuesta de H. Delporte en que las escenas responderían a varios modelos genéricos de asociación significativa: la asociación aleatoria, es decir, de figuras que pudieran considerarse independientes, sin que exista un parentesco figurativo evidente; la superposición repetitiva, que implica una asociación efectivamente intencional; la asociación dramática o narrativa; las asociaciones de carácter más o menos temático, quizá mitológico, y la asociación de organización geométrica.

M.W.Conkey, propuso en 1980, que Altamira y El Cueto de la Mina habrían sido puntos focales del Paleolítico Superior regional, de los modelos de la Arqueología social. Los caracteres de su grafismo (con gran diversidad de diseños y considerados prototípicos algunos de ellos) apoyarían el reconocimiento de ambos lugares como puntos de reunión, de encuentro y redistribución de los grupos que explotaban los territorios próximos

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (12.2 Kb)  
Leer 8 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com