Ataque a Pearl Harbor

ATAQUE A PEARL HARBOR

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Corría el tercer año de la segunda guerra mundial, en este contexto Estados Unidos seguía manteniendo su neutralidad en este conflicto, si bien abastecida al reino unido y a la unión Soviética de suministros bélicos, su neutralidad era clara, pero una decisión por parte del almirante Japonés Yamamoto Isoroku, cambiaría todo el curso de la guerra.

La mañana del 7 de diciembre de 1941, los mandos japoneses toman la decisión de atacar la base estadounidense Pearl Harbor, ubicada en el pacífico, en Oahu Hawái, en donde su comandante era el Almirante Husband E. Kimmel quien compartía su mando con el General Walter Short, quien se encontraba a cargo de la defensa en la zona terrestre de la isla de Pearl Harbor. El ataque se realiza con el fin de lograr que el país norteamericano no interfiriera en sus planes de expansión sobre el sureste asiático.

Debido a este ataque, tomado como una decisión cobarde por parte de los norteamericanos, Estados Unidos le declara la guerra a japón, sacándolo de su neutralidad del conflicto.

El país nipón empleó un ataque aéreo con más de 350 aviones con ametralladoras, además de lanzar bombas y torpedos a las flotas estadounidenses las que contaban con una tecnología muy avanzada, provocando 2500 muertes. A raíz de este conflicto, todas las criticas llegaron a los mandos estadounidenses, ya que se le reprochaba que debieron prever el ataque Japones, ya que este era inminente en cualquier momento debido al expansionismo que estos estaban ejerciendo en la guerra.

Cada uno de estos actos fue como un efecto domino y fue aprovechado en el momento exacto por Adolf Hitler, quien le declara la guerra a Estados Unidos, por otra parte, los norteamericanos se unen a los Aliados para enfrentar a la Alemania Nazi. Sin embargo, la potencia americana reacciono al instante, en el país lo tildaron como un acto cobarde, debido a esto las movilizaciones por la guerra fueron de inmediato. Roosevelt declara la guerra y el reclutamiento comienza de inmediato en el país.

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 Almirante Yamamoto Isoroku

En el momento del ataque a Pearl Harbor, Estados Unidos estaba experimentando varios problemas políticos, sociales, económicos y militares que contribuyeron a la vulnerabilidad del país.

USA estaba dividido en cuanto a su participación en la Segunda Guerra Mundial. Por un lado, estaban aquellos que creían que el país debería permanecer neutral y mantenerse alejado de los conflictos en Europa y Asia. Por otro lado, había quienes apoyaban la intervención en la guerra para proteger los intereses estadounidenses en el Pacífico y en Europa.

Se estaban experimentando tensiones raciales y discriminación contra minorías étnicas, particularmente hacia la comunidad japonesa. Esta discriminación agravó la desconfianza y la sospecha hacia los japoneses en general, lo que contribuyó a la decisión del gobierno estadounidense de internar a miles de japoneses-estadounidenses en campos de concentración durante la guerra.

En cuanto a la economía, el país estaba recuperándose de la Gran Depresión. La producción industrial estaba en aumento y el desempleo estaba disminuyendo, pero la economía todavía estaba en una posición frágil y dependía en gran medida del comercio internacional para mantener su estabilidad financiera. Estados Unidos no estaba preparado para un conflicto de la escala de la Segunda Guerra Mundial. El país carecía de una fuerza militar y una industria de defensa que pudieran igualar a las potencias europeas y asiáticas. Además, el ataque a Pearl Harbor dejó al país en una posición vulnerable, ya que los planes de guerra y defensa no previeron un ataque sorpresa tan devastador. Por parte de Estados Unidos tuvieron un aproximado de 2500 bajas, por otro lado, los japoneses tuvieron alrededor de 70 bajas.

 En el contexto de la II guerra mundial, las relaciones entre los japoneses y los estadounidenses era tensión pura, esto por las ideas expansionistas de Japón. Como una posible solución a esto, Estados Unidos pudo haber generado propaganda disuasiva, tales como ejercicios militares conjuntos y combinados con el objetivo de mostrarle al mundo y específicamente a Japón que no se metieran con ellos, antes del ataque. En general no es posible saber que tan eficaz hubiera sido esta solución, sin embargo, tenía la posibilidad de evitar el crecimiento del conflicto.

Esta solución es muy viable y probablemente hubiera evitado la entrada de EE. UU. al conflicto, pues los japoneses en ese entonces estaban en busca de expansión con el objetivo de extraer recursos, pues combatir contra una potencia mundial probablemente era lo que menos quería Japón por la cantidad de recursos requeridos para ellos. Por otra parte, cuán factible era llevar a cabo esta solución, pues era muy factible también, al ser una potencia mundial y teniendo en cuenta el contexto económico y político mundial las medidas disuasivas militares eran muy factibles para EE. UU.

Como segunda posible solución, contar con una buena inteligencia, una buena distribución de la flota y una mejor fortificación y preparación de la base naval pudo haber sido de las mejores combinaciones para repeler este ataque desde la primera oleada. Esta hubiera sido la opción más eficaz para repeler el ataque, sin embargo, EE. UU. no esperaba recibir un ataque por este frente.

La viabilidad de esta solución no es tan fuerte como la anterior, pero no deja de ser menor, la base está a unos 6000km de Japón y EE. UU. a unos 4000km de Hawái, por lo que la potencia mundial tiene distintos frentes que cubrir y proteger, por lo que dirigir recursos a la base naval de Hawái no era el principal esfuerzo, pues era lo más alejado del frente con Alemania. Sin embargo, era igual de factible, puesto que EE. UU en ese entonces era de las potencias más grandes sin entrar al conflicto.

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