EL 18 Brumario De Luis Bonaparte Karl Marx
Enviado por williambarrero • 12 de Noviembre de 2012 • 5.522 Palabras (23 Páginas) • 763 Visitas
KARL MARX.
EL 18 BRUMARIO DE LUIS BONAPARTE
El proletariado de las fabricas es el que sufre en carne propia, con marcas que quedan grabadas a fuego en su mente y en su corazón, todos los aspectos destructivos y todos los rigores de la explotación capitalista y, por lo tanto, es el principal interesado y el único que jamás traicionara, los intereses revolucionarios, más allá de la pequeña burguesía y del campesinado del que se diferencia y distancia.
Las brumas.
En este libro plasmo esas frases inolvidables que se marcan a fuego en la memoria de los hombres,
El hombre como obrero, se siente separado de sí mismo. El trabajo, es trabajo forzado, el está cómodo cuando no trabaja, y cuando trabaja no lo está., el obrero no es feliz.
La única y verdadera función que se alza es la de los dominadores y los dominados.
EL 18 BRUMARIO DE LUIS BONAPARTE
I
Hegel dice, que todos los grandes hechos y personajes de la historia universal se repiten dos veces. Pero se olvidó de agregar que la primera es como tragedia y la segunda como farsa.
La tragedia de todas las generaciones muertas oprime como una pesadilla en cerebro de los vivos.
Los héroes de Francia como Napoleón, Danton y tantos otros, lo mismo que los partidos, y la masa de la antigua revolución francesa, cumplieron, bajo el ropaje romano y con frases romanas, la misión de su tiempo, librar de las cadenas a la sociedad burguesa moderna e instaurar. Los unos parcelaron el suelo feudal y segaron las cabezas feudales que habían brotado en él. El otro creo en el interior de Francia las condiciones con las cuales ya podía desarrollarse la libre concurrencia, explotarse la propiedad territorial parcelada, aplicarse las fuerzas productivas industriales de la nación, que habían sido liberadas.
Recapitulemos, en sus rasgos generales, las fases recorridas por la revolución francesa desde el 24 de febrero de 1848 hasta el mes de diciembre de 1851.
Hay tres periodos fundamentales que son el inconfundibles: el periodo de febrero, otro el 4 de mayo de 1848 al 28 de mayo 1849: periodo de constitución de la república o de la Asamblea de las Nacional Constituyente, otro del 28 de mayo de 1849 al 2 de diciembre de 1851: periodo de la republica constitucional o de la Asamblea Nacional legislativa.
El 1º periodo, de la caída de Luis Felipe, pude calificarse como de prólogo de la revolución, el gobierno se declara provisional. Todos los elementos que habían determinado la revolución: la oposición dinastía, la burguesía republicana, la burguesía democrática-republicana, los obreros social-demócratas, encontraron su puesto provisional en el Gobierno de febrero.
Proponían una reforma electoral y el proletariado con las armas en la mano le imprimió su sello y la proclamo Republica Social.
El proletariado de Paris se entregaba con seriedad a discusiones sobre los problemas sociales, se reencontraron con un apoyo inesperado de la maza de la nación, en los campesinos y los pequeños burgueses.
El 2º periodo desde el 04/05/1848 hasta fines de 05/1849, es el periodo de constitución, de la fundación de la Republica Burguesa
La asamblea nacional que se reunió el 04/05/1848, salida de las elecciones nacionales, representaba a la nación.
En vano el proletariado de Paris, intento el 15/05 destacar por fuerza su existencia ya que lo único que lograron fue alejar de la escena pública a Blanqui y sus camarada, es decir a los verdaderos jefes del partido proletario.
A la Monarquía Burguesa de Luis Felipe, solo puede suceder la republica burguesa, es decir que si, en nombre del rey, había dominado una parte reducida de la burguesía, ahora dominara la totalidad de la burguesía en nombre del pueblo. El proletariado de Paris contesto con la insurrección de junio, el acontecimiento más gigantesco en la historia de las guerras civiles europeas. Venció la republica burguesa.
Después de la victoria los insurrectos fueron matados o deportados, con esta derrota, el proletariado pasa al fondo de la escena revolucionaria. Por esta insurrección queda de manifiesto que la republica burguesa se asimilaba aquí a despotismo ilimitado de una clase sobre otras. Todas las clases y partidos se habían unido, habían dado forma a su ejército bajo la consigna de: propiedad, familia, religión y orden.
Toda reivindicación, aun de la más elemental reforma financiera burguesa, del liberalismo más vulgar, del más formal republicanismo, de la más trivial democracia, es castigada en el acto como un atentado contra la sociedad. Por último los pontífices de la “religión y el orden” se ven arrojados, metidos en la cárcel o arrojados al destierro.
2
Desde las jornadas de junio es la historia de la dominación y de la desagregación de la fracción burguesa republicana.
Durante la monarquía burguesa de Luis Felipe, esta fracción había formado la oposición republicana oficial. Tenía sus representantes en las cámaras, campo de acción en la prensa. Se trata de una fracción burguesa, una pandilla, escritores, abogados, oficiales y funcionarios de ideas republicanas., combatía la aristocracia financiera, como lo hacía el resto de la oposición burguesa.
Por lo demás, el partido Nacional era puramente republicano, exigía que el dominio de la burguesía adoptase formas republicanas en vez de monárquicas.
Esto a Luis Felipe le costó su impopularidad entre los pequeños burgueses demócratas y, sobre todo, entre el proletariado revolucionario.
Marrast, antiguo redactor en jefe del Nacional, se convirtió en el presidente perpetuo de la asamblea nacional constituyente, y los ministerios y todo lo demás puestos importantes cayeron en manos de los republicanos puros.
La fracción burguesa republicana llego al poder por una insurrección sofocada a cañonazos del proletariado contra el capital.
La dominación exclusiva de los republicanos burgueses solo duro desde el 24/06 hasta el 10/12/1848. Su historia se resume en la redacción de una constitución republicana y en la proclamación del estado de sitio en Paris.
La nueva constitución no era en el fondo, la edición republicana de la carta constitucional de 1830.
La revolución de febrero proclamo el sufragio
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