Experiencias de aprendizaje de la historia en contextos no escolarizados

Experiencias de aprendizaje de la historia en contextos no escolarizados

La historia siempre ha estado inmersa en nuestra vida, independientemente de la escuela, vivimos el día al día con la historia presente.

Aunque no nos damos cuenta o no le damos la importancia necesaria, vivimos en un entorno en donde la historia es parte de nosotros e incrementa con nuestro vivir diario. Todo lo que realizamos de alguna manera forma parte de la historia, nuestra historia personal, pero, así como inconscientemente realizamos historia, inconscientemente aprendemos historia por medio de nuestras experiencias.

Desde niños, adquirimos conocimientos históricos que en el momento no vemos relevantes pero que con el paso del tiempo, nos damos cuenta de que aprendemos cosas significativas que nunca olvidaremos.

En lo personal, eh estado inmersa en situaciones que tienen que ver con la historia.

Como punto principal, quisiera tomar los viajes familiares, que pueden ser vistos como una “aspiración de los viajeros que desean ocupar su tiempo libre en la realización de actividades que sean simultáneamente recreativas y educativas” (ZAVALA, S/F). Estos acontecimientos tan emocionantes en los que lo único que importa es salir de la rutina y dirigirte a lugares nuevos, para descubrir nuevas culturas, arquitecturas y experimentar cosas que jamás habías vivido antes.

Los viajes sin duda, son la mejor herramienta para aprender historia de una forma completamente fuera de lo tradicional y por supuesto, más interesante. Conocer nuevos lugares siempre es emocionante y queda plasmado en tu memoria para siempre ya que son experiencias significativas que difícilmente vas a poder olvidar.

Nuestro país, es un lugar lleno de una riqueza histórica impresionante, por lo tanto, existe una infinidad de lugares que pueden ser de gran importancia para nuestra formación histórica.

Uno de los lugares que puedo mencionar en el cual aprendí mucho ya que fue una experiencia sumamente interesante fue el recorrido a la ciudad prehispánica de “Chichen Itzá”, la capital más sobresaliente del área Maya. En ella aprendí que a la llegada de los españoles esta ciudad se constituía como el centro de culto y de peregrinación más reverenciado en la península de Yucatán. Actualmente es un centro sagrado para nuestra cultura maya.

Esta experiencia fue algo que nunca voy a olvidar ya que me pareció muy interesante todo lo que nuestra cultura hacia y como era su estilo de vida. Considero que por ser la primera vez que visito este lugar, fue más significativo para mí ya que conocí sobre otra cultura que está muy alejada de mi entorno habitual y pude presenciar cosas nuevas que sin darme cuenta, estaba aprendiendo historia de una manera distinta, más atractiva a mi perspectiva.

Así como este, puedo mencionar muchos otros viajes realizados dentro del país que sin duda han sido significativos para mi aprendizaje. Por tanto, este tipo de actividades hacen de la historia algo divertido y fuera de lo cotidiano, captando la atención de los que tienen el privilegio de presenciar en vivo dichos acontecimientos que son de suma importancia para nuestra cultura.

Aprendizajes construidos durante la visita a México

Durante nuestra visita a México logramos adquirir un sinfín de aprendizajes en relación con la historia. Este viaje iba dirigido principalmente a conocer un poco de historia de nuestro país, así como algunos acontecimientos de gran importancia histórica que sucedieron en el mundo y de su influencia y gran impacto para nosotros.

Desde que pisamos la ciudad, hasta que partimos de ella, estuvimos siempre en un acercamiento directo con la historia.

Comenzamos con la visita a la Benemérita Escuela Nacional de Maestros, en la cual, uno de los profesores nos dio un pequeño recorrido por las instalaciones, y nos explicó desde sus orígenes hasta la actualidad, y sobre la importancia de la escuela en la sociedad mexicana.

Como primer aspecto, tenemos que ésta escuela fue fundada el 24 de febrero de 1887, y en un principio adopto el nombre de Escuela Normal para Profesores de Instrucción Primaria. Posteriormente, surgieron algunas transformaciones a cargo del profesor Lauro Aguirre, quien asumió la dirección del plantel para dejarlo convertido en la Escuela Nacional de Maestros.

A partir de ese momento, la normal se convirtió en un inmenso centro profesional en el que se graduaban una gran diversidad de maestros, tanto rurales como misioneros, educadoras, de primarias urbanas y maestros para diversas actividades técnicas, además, atendía los niveles de preescolar, primaria y secundaria.

Estos cambios fueron tan trascendentes que otras instituciones que también

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