ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Guernica: Análisis Iconográfico/iconológico


Enviado por   •  15 de Enero de 2014  •  3.922 Palabras (16 Páginas)  •  1.406 Visitas

Página 1 de 16

ÍNDICE

1. Introducción: el método iconográfico/iconológico. ......................... pp. 2-5

2. Análisis iconográfico/iconológico de la obra. .................................. pp. 6-10

3. Conclusión. ....................................................................................... p. 11

4. Ilustraciones. ..................................................................................... pp. 12-20

5. Bibliografía. ...................................................................................... pp. 21

2

1. INTRODUCCIÓN: EL MÉTODO ICONOGRÁFICO/ICONOLÓGICO

A finales del siglo XIX, y principios del XX, la iconografía surgió como una corriente en oposición al positivismo y formalismo dominantes en aquella época. Cabe mencionar que los términos iconografía e iconología acostumbran a usarse indistintamente para aludir a este determinado método de interpretación1. El principal objeto de estudio de esta corriente es el significado de las artes visuales (icono = imagen), que considera como documentos testimoniales de una cultura y una época determinada. Por ello, para reconstruir su sentido y su función original, el iconólogo busca las fuentes literarias o figurativas en que se basa o con las que se relaciona la obra estudiada, y estos vínculos le ayudan a situarla cronológicamente, a determinar sus conexiones con la tradición, a identificar su tema y a conocer su significado2. La ciencia surgida de este planteamiento la llamamos Iconografía y sus principales representantes son historiadores como E. Panofsky, E. Gombrich o R. Wittkower3, estrechamente unidos al Instituto Warburg4.

Muchos autores quisieron aplicar el método iconológico para el análisis de una obra de arte. Los verdaderos creadores del método son Warburg y Saxl, aunque el sistematizador de dicho método ha sido Panofsky5, el cual, creó un sistema de interpretación que facilitaría el análisis de una obra de arte; para ello estableció tres pasos o niveles a seguir6: la descripción preiconográfica, el análisis iconográfico y la interpretación iconológica, explicándolos a través de un ejemplo:

1. La descripción preiconográfica:

En esta primera fase, Panofsky se centra en captar el sentido de lo que estamos viendo, es decir su asunto primario o natural, fijándonos en las formas puras que están llenas de significados primarios o naturales y que para identificarlos sólo necesitamos nuestra propia experiencia vital. De esta manera, se examina la obra de arte formalmente además de los hechos análogos a ella misma7. Panofsky lo ejemplifica de la siguiente manera:

“Cuando un conocido me saluda por la calle quitándose el sombrero, lo que veo desde el punto de vista formal, no es nada más que el cambio de ciertos detalles dentro de una configuración que forma parte de unos patrones generales de color, líneas y volúmenes, que constituyen mi percepción visual. Cuando identifico, como hago automáticamente, esta configuración como un objeto (un caballero), y el cambio de los detalles como un evento (quitarse el sombrero), ya he excedido los límites de la

1 Freixá, Furió et al. (1990) Introducción a la Historia del Arte. Barcelona. Editorial Barcanova, pp. 26-27.

2 Ibídem.

3 Ignacio Martínez Buenaga et al. (2009). Historia del Arte. Valencia. Editorial Ecir, p. 37.

4 Furió et al., Op.Cit., Pp.26, 27.

5 Jesús Viñuales (1986) El comentario de la obra de arte (metodologías concretas). Madrid. Edición de la UNED. Pg. 71

6 Furió et al., Op. Cit., pp. 26-27.

7 Viñuales, Op. Cit., p. 71.

3

percepción puramente formal y he entrado en una primera esfera de temática o significado. El significado así percibido es de una naturaleza elemental y fácilmente entendible, y lo llamaremos significado factual (o de hecho); se aprehende simplemente al identificar ciertas formas visibles con ciertos objetos que me son conocidos por experiencia práctica, y al identificar el cambio en sus relaciones con ciertas acciones o eventos8. En resumen, el sombrero se ha movido, y yo me he dado cuenta de ello.

Ahora, los objetos y eventos así identificados naturalmente producirán alguna reacción dentro de mí. Por la manera en la que mi conocido realiza su acción puedo ser capaz de percibir si está de buen o mal humor, y si sus sentimientos en cuanto a mí son indiferentes, amigables u hostiles. Estos matices psicológicos conferirán a los gestos de mi conocido un significado que va más allá del factual, a lo que llamaremos significado expresivo. Difiere del factual en que se aprehende, no por simple identificación, sino por empatía. Para entenderlo, necesito una cierta sensibilidad, pero esa sensibilidad sigue siendo parte de mi experiencia práctica, es decir, de mi familiaridad diaria con los objetos y eventos. Por lo tanto, tanto el significado factual como el expresivo pueden ser clasificados juntos: constituyen la clase de los significados primarios o naturales9.” Dependiendo del gesto del individuo, que acompaña al movimiento del sombrero, puedo identificar diversos estados de ánimo o emociones que ya son conocidos por mí gracias a mi experiencia vital.

2. El análisis iconográfico

En este nivel Panofsky, dice que el análisis de la obra de arte debe centrarse en las historias contadas a través de las imágenes que componen la misma, sin embargo no debe olvidarse que un buen análisis iconográfico debe identificar correctamente los motivos que son portadores de ese significado secundario o convencional. En esta fase, para poder interpretar una obra de arte es necesario tener un amplio conocimiento intelectual de los temas y conceptos específicos de la misma10. Siguiendo con su ejemplo Panofsky continúa:

“Sin embargo, darme cuenta de que quitarse el sombrero significa un saludo, pertenece a un campo distinto de interpretación. Este tipo de saludo es característico del mundo occidental y es un residuo de la caballería medieval: los hombres armados solían quitarse los cascos para dejar claro que sus intenciones eran pacíficas y que confiaban en las intenciones pacíficas del otro. Ni un bosquimano australiano, ni un griego viviendo en la antigüedad podrían darse cuenta de que quitarse un sombrero no es sólo un evento práctico

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (25.1 Kb)  
Leer 15 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com