La Independencia De Mexico
diegholiin31 de Enero de 2013
5.354 Palabras (22 Páginas)355 Visitas
El proceso de la Independencia de México fue uno de los más largos de América Latina. La Nueva España permaneció bajo el control de la Corona por unos tres siglos. Sin embargo, a finales del siglo XVIII, ciertos cambios en la estructura social, económica y política de la colonia llevaron a una élite ilustrada de novohispanos a reflexionar acerca de su relación con España. Sin subestimar la influencia de la Ilustración, la Revolución Francesa ni la independencia de Estados Unidos, el hecho que llevó a la élite criolla a comenzar el movimiento emancipador fue la ocupación francesa de España, en 1808. Hay que recordar que en ese año, Carlos IV y Fernando VII abdicaron sucesivamente en favor de José Bonaparte, de modo que España quedó como una especie de protectorado francés.
En las colonias españolas en América, se formaron varias juntas que tenían como propósito conservar la soberanía hasta que regresara el rey Fernando VII al trono. Nueva España no fue la excepción (encabezados por Francisco Primo de Verdad y Ramos), la diferencia es que el primer intento de este tipo concluyó con la destitución del virrey y la sujeción del Ayuntamiento de México a la autoridad directa de la nueva cabeza de la colonia (que a diferencia de Iturrigaray, no simpatizaba con la Junta). Tal situación llevó a los criollos a radicalizar su posición. Finalmente, el núcleo donde hubo de comenzar la guerra por la independencia fue Dolores, Guanajuato, luego que la conspiración de Querétaro fue descubierta.
Aunque aquélla madrugada del 16 de septiembre de 1810 el cura Miguel Hidalgo y Costilla se lanzó a la guerra apoyado por una tropa de indígenas y campesinos, bajo el grito de "Viva la Virgen de Guadalupe, muerte al mal gobierno, abajo los gachupines", finalmente la revolución le llevó por otro camino y se convirtió en lo que fue: una guerra independentista.
El conflicto duró once años y distó mucho de ser un movimiento homogéneo. Como se ha dicho, al principio reivindicaba la soberanía de Fernando VII sobre España y sus colonias, pero con el paso del tiempo adquirió matices republicanos. En 1813, el Congreso de Chilpancingo (protegido por el generalísimo José María Morelos y Pavón) declaró constitucionalmente la independencia de la América Mexicana.
La derrota de Morelos en 1815 redujo el movimiento a una guerra de guerrillas. Hacia 1820, sólo quedaban algunos núcleos rebeldes, sobre todo en la sierra Madre del Sur y en Veracruz. Por esas fechas, Agustín de Iturbide pactó alianzas con casi todas las facciones (incluyendo al gobierno virreinal) y de esta suerte se consumó la independencia el 27 de septiembre de 1821. España no la reconoció formalmente hasta diciembre de 1836 y de hecho intentó reconquistar México, sin éxito.
La ex colonia española pasó a ser una efímera monarquía constitucional católica llamada Imperio Mexicano. Finalmente fue disuelto en 1823, cuando luego de varios enfrentamientos internos y la separación de Centroamérica, se convirtió en una república federal.
El proceso de la Independencia de México fue uno de los más largos de América Latina. La Nueva España permaneció bajo el control de la Corona por unos tres siglos. Sin embargo, a finales del siglo XVIII, ciertos cambios en la estructura social, económica y política de la colonia llevaron a una élite ilustrada de novohispanos a reflexionar acerca de su relación con España. Sin subestimar la influencia de la Ilustración, la Revolución Francesa ni la independencia de Estados Unidos, el hecho que llevó a la élite criolla a comenzar el movimiento emancipador fue la ocupación francesa de España, en 1808. Hay que recordar que en ese año, Carlos IV y Fernando VII abdicaron sucesivamente en favor de José Bonaparte, de modo que España quedó como una especie de protectorado francés.
En las colonias españolas en América, se formaron varias juntas que tenían como propósito conservar la soberanía hasta que regresara el rey Fernando VII al trono. Nueva España no fue la excepción (encabezados por Francisco Primo de Verdad y Ramos), la diferencia es que el primer intento de este tipo concluyó con la destitución del virrey y la sujeción del Ayuntamiento de México a la autoridad directa de la nueva cabeza de la colonia (que a diferencia de Iturrigaray, no simpatizaba con la Junta). Tal situación llevó a los criollos a radicalizar su posición. Finalmente, el núcleo donde hubo de comenzar la guerra por la independencia fue Dolores, Guanajuato, luego que la conspiración de Querétaro fue descubierta.
Aunque aquélla madrugada del 16 de septiembre de 1810 el cura Miguel Hidalgo y Costilla se lanzó a la guerra apoyado por una tropa de indígenas y campesinos, bajo el grito de "Viva la Virgen de Guadalupe, muerte al mal gobierno, abajo los gachupines", finalmente la revolución le llevó por otro camino y se convirtió en lo que fue: una guerra independentista.
El conflicto duró once años y distó mucho de ser un movimiento homogéneo. Como se ha dicho, al principio reivindicaba la soberanía de Fernando VII sobre España y sus colonias, pero con el paso del tiempo adquirió matices republicanos. En 1813, el Congreso de Chilpancingo (protegido por el generalísimo José María Morelos y Pavón) declaró constitucionalmente la independencia de la América Mexicana.
La derrota de Morelos en 1815 redujo el movimiento a una guerra de guerrillas. Hacia 1820, sólo quedaban algunos núcleos rebeldes, sobre todo en la sierra Madre del Sur y en Veracruz. Por esas fechas, Agustín de Iturbide pactó alianzas con casi todas las facciones (incluyendo al gobierno virreinal) y de esta suerte se consumó la independencia el 27 de septiembre de 1821. España no la reconoció formalmente hasta diciembre de 1836 y de hecho intentó reconquistar México, sin éxito.
La ex colonia española pasó a ser una efímera monarquía constitucional católica llamada Imperio Mexicano. Finalmente fue disuelto en 1823, cuando luego de varios enfrentamientos internos y la separación de Centroamérica, se convirtió en una república federal.
Personajes Precursores de la Independencia de México
Francisco Primo de Verdad y Ramos y Miguel Ramos Arizpe fueron dos insignes personajes precursores del movimiento de Independencia. Francisco Primo de Verdad y Ramos nació el 9 de junio de 1760, en la ex-hacienda de Ciénega del Rincón de Mata (Aguascalientes). Siendo aún joven fue enviado a la ciudad de México para estudiar en el Real Colegio de San Ildefonso la carrera de Derecho; pues en ese tiempo no había escuelas superiores en la ciudad de Aguascalientes. Falleció el 4 de octubre de 1808, en la ciudad de México.
Sufrió la discriminación de que eran objeto los criollos por parte de las autoridades de España, quienes, temerosas de que surgieran ánimos nacionalistas entre los nacidos en las colonias, reservaban los mejores trabajos, públicos y privados, a los nacidos en España, especialmente con las restricciones que se dieron por las reformas administrativas ordenadas por el rey Carlos III de España.
Dichas reformas restauraron el prestigio de España como potencia mundial, pero sus colonias fueron explotadas sin medida para lograr la ambiciosa meta. De fuera venían los hombres a regular los destinos del país: el gachupín, se decía, "viene a gobernar unos pueblos que no conoce, a manejar unos derechos que no ha estudiado, a imponerse en unas costumbres que no ha sabido, a tratar a gente que nunca ha visto". Con el gran anhelo de cambiar ese orden de cosas, Francisco se esforzó en estudiar leyes y comenzó a relacionarse con los principales personajes del Ayuntamiento de la ciudad de México, del que llegaría a ocupar el cargo de síndico, uno de los más importantes del organismo.
A finales del siglo XVIII, las noticias sobre la independencia de las Trece Colonias británicas y el triunfo de la Revolución Francesa formaban parte de las conversaciones cotidianas de los americanos, y Francisco, con la formación académica que tenía, no era ajeno a estos temas.
Con motivo del motín de Aranjuez y las abdicaciones de Bayona; consecuencia de las Guerras Napoleónicas, el licenciado Primo de Verdad propone al virrey José de Iturrigaray convocar a los ayuntamientos de la Nueva España, para formar un gobierno provisional basado en el pueblo, con el argumento de que a falta del monarca, la soberanía vuelve al pueblo.
Por su parte Miguel Ramos Arizpe fue un político de la España de principios del siglo XIX y del México naciente como nación independiente. Fue ordenado sacerdote católico en 1803. El Congreso Mexicano lo ha declarado Benemérito de la Patria por su labor en la independencia mexicana y en los posteriores gobiernos del nuevo país.
Ramos Arizpe nació en el Valle de San Nicolás de la Capellanía, hoy llamada ciudad Ramos Arizpe denominación que se le atribuyó, junto con la categoría de villa el 19 de mayo de 1850 en su honor, en el estado de Coahuila, actualmente México, el 15 de febrero de 1775.
Comenzó estudios en el Seminario de Monterrey donde se ordenó sacerdote en 1803. Siguió estudios en la Real Universidad de Guadalajara donde cinco años después se doctoró en filosofía, cánones y leyes. Ejerció la docencia en el Seminario de Monterrey donde impartió las cátedras de derecho canónico y civil.
En las elecciones para Cortes de Cádiz de septiembre de 1810 fue elegido diputado por Coahuila en las que contribuyó muy destacadamente en todo el período legislativo (1810 - 1814) en donde
...