La cáscara del coco convertida en carbón

CAPITULO I.

EL PROBLEMA.

Titulo del Proyecto

    La cáscara del coco convertida en carbón

Justificación

    El cocotero es un planta que se la da múltiples usos. La planta como tal nos sirve para muchas cosas: tanto en artesanías, como en juguetes, inciensos, carbón, entre otros.

    En este caso particular se realizara el carbón como medio natural, el cual nos puede ser útil para cocinar generando recursos o fuentes de empleo en beneficio de la comunidad, o a los que no constan del dinero suficiente para comprar este producto en mercados u otros negocios.

    La importancia de este proyecto es el aprovechamiento que se le pueda hacer a esta planta, en el cual se utiliza un producto que abunda en la población de San Juan de los Cayos, ya que esta palmera tiene producción en casi todos los meses del año, y el cual permite obtener grandes beneficios económicos a la población.  

Objetivo General

• Elaborar carbón vegetal a base de la cáscara dura del coco.

Objetivos Específicos

• Seleccionar los materiales y procedimientos necesarios para la elaboración del carbón.
• Seguir los pasos para la elaboración del carbón.
• Describir las propiedades q aporta el producto a la comunidad.

CAPITULO II

MARCO TEORICO.

Antecedentes

Base Teórica  

Propiedades del Carbón

El carbón se evalúa de acuerdo con ciertas propiedades. Las más importantes son:

• Potencia calorífica: es la mas importante, ya que el calor potencial es la mercancía objeto de compraventa. Depende de la cantidad de humedad y de cenizas, así como de la composición de la materia orgánica.
• Humedad: componente no combustible que aumenta el peso muerto del carbón, consume calor de la parte combustible y debilita su estructura física.
• Ceniza: material mineral inorgánica que queda como residuo de la combustión. En la Mayoría de las minas de carbón funcionan plantas de lavado para la separación de la materia inútil.
• Azufre: impureza inorgánica del carbón. Es perjudicial ya que en la combustión se forma ácidos corrosivos.
• Temperatura de fusión de las cenizas: los carbones pobres producen cenizas fundidas que ocasionan graves averías al obstruir los pasos de aire de las parrillas.
• Tamaño: determinado por el grado de rotura que sufre en la manipulación, pero regulando por la trituración que se realiza durante el proceso.
• Triturabilidad:  propiedad de interés principal para la fabricación de cemento y de las instalaciones que utilicen carbón en polvo. Los carbones se diferencian en su dureza, pero la pizarra o pirita (minerales duros), aumenta la dificultad de trituración.  
• Desmenuzamiento: propiedad parecida a la Triturabilidad, pero perjudicial para los carbones destinados a uso domésticos.
• Características de coquificación: es muy significativa en la clasificación del carbón destinado a los hornos  de coque y a la predicción de la eficacia en las parrillas.
• Tendencia a formar escorias: función derivada de la composición de las cenizas y de las condiciones de manipulación. Para la fácil extracción de las cenizas, éstas deben ser granuladas.
• Grado de ignición: depende de las propiedades del carbón e influye en la velocidad de combustión.
• Uniformidad de calidad: un carbón de calidad pobre pero uniforme puede ser preferible a otro de calidad mas elevada pero variable.

Reseña Histórica

         El coco viene de las playas paradisíacas, salpicadas de esbeltos cocoteros, son la imagen mas vendida del caribe.

La planta puede encontrarse en la orilla de playas tropicales arenosas del Mar Caribe, Océano Indico y Pacifico.

El coco suele mencionarse como constituyente ineludible de la gastronomía venezolana de simple, y resulta que el coco no es autóctono de tierras americanas ni su sabor dialoga con ancestrales manjares indígenas.

El coco ó nucifera linnaeus (de la familia de las palmas) es propio de la zona tropical de Asia y el Pacifico. Se cree que llego a estos lares de manos de hombre, aunque cada vez cobra mas fuerza la teoría según la cual la nuez del coco  nado mas de 6.000 kilómetros desde las costas indomalayas hasta orillas del nuevo mundo, haciendo gala de la capacidad de la semilla de germinar aun habiendo estado en aguas saladas durante 100 días. De lo que si hay testimonio explica el historiador Rafael Cartay en su libro “El pan nuestro de cada día”, es de que, después de la conquista, españoles y portugueses lo extendieron en el litoral Atlántico hasta el norte de México, en las Antillas y en la América del Sur        

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