ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Novela De Amor


Enviado por   •  28 de Septiembre de 2014  •  822 Palabras (4 Páginas)  •  222 Visitas

Página 1 de 4

SONORA MARACAIBO

Estaba una madre sentada junto a la cuna de su hijito, muy afligida y angustiada pues temía que el pequeño se muriera, en efecto aquel recién nacido tan prematuro un sietemesino, estaba pálido como la cera, tenía los ojitos medio cerrados y respiraba casi imperceptiblemente. La tristeza de la madre aumentaba por momentos al contemplar a la tierna criatura.

Llamaron a la puerta y entró un hombre viejo, pobre envuelto en un holgado cobertor; son mantas que calientan, pero él estaba helado. Se estaba en lo más crudo del invierno.

Como el padre tiritaba de frío y el niño se había quedado dormido, la madre se levantó y puso a calentar café en un bote, sobre la estufa, para reanimar al anciano. Éste se había sentado junto a la cuna, y mecía a su hijo.

-¿Crees que vivirá? -preguntó la madre al padre-. ¡El buen Dios no querrá

Quitármelo!

El padre, hizo un gesto extraño con la cabeza; lo mismo podía ser afirmativo que negativo. La mujer bajó los ojos, y las lágrimas rodaron por sus mejillas.

Aquella desesperación, que inundaba a los dos por no poder hacer nada y tratar de salvar a su hijo, los dos desesperados salieron a la calle el padre tomo al niño, lo cargo envuelto en tantas cobijas para que no lo pudiera tocar ni el aire todo aparecía cubierto de hielo y nieve, y soplaba un viento cortante.

-Aurelio deberíamos de ir a ver ala curandera que nos de algo un brebaje o una

Planta para que se alivie a mi hijo que le quite esa terrible temperatura – dijo la madre Desesperada.

El señor un tanto no convencido le contesto.

-No vieja sabes que eso no me convence a mi tendremos que llevar al niño al pueblo con un médico, él sabrá que hacer y será más seguro.

Entonces partieron hacia el pueblo, el clima era extremoso, no había luz solo la luna es la que los acompañaba, más de 45 minutos de camino ya con los pies agotados y solo tenían de apoyo en par de huaraches todos desgarrados, Por fin llegaron al pueblo, y entrando al dispensario.

La señora con lágrimas en los ojos y una cara de cansancio, Gritando de una Manera abrumadora

-Doctor, doctor salve a mi hijo que lleva más de 3 días enfermos y sin ninguna mejora.

-calmada mujer que ya estamos aquí, nuestro hijo pronto sanara- dijo el padre.

Era todo un silencio después de aquella y enorme angustia de la madre, de repente por la puerta del dispensario, se oía unos pasos agigantados parecía que venía corriendo y si era el medico un hombre alto, con cabello teniéndose ya

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (4.3 Kb)  
Leer 3 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com