PROBLEMÁTICA DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR EN EL PERÚ.

PROBLEMÁTICA DE LA EDUCACION SUPERIOR EN EL PERÚ

En el Perú, la calidad de la educación superior en las últimas décadas no ha generado mejora alguna. En 1983, creo la ley N° 23733, donde el ente rector de estudio, coordinación y orientación de la universidades del Perú, fue la Asamblea nacional de Rectores (ANR)^[1]. Este no tuvo claro cuáles eran sus funciones, ya que no aporto significativamente en el avance académico de las universidades, ello se debió a que hubo intereses entre rectores, lo cual genero una gran restricción en el progreso de la calidad superior.

En 1995, se creó el Consejo Nacional para la Autorización de Funcionamiento de Universidades (CONAFU) mediante la ley N° 26439, como órgano autónomo del ANR^[2]. Tuvo como objetivo autorizar y supervisar el funcionamiento de las universidades del Perú. Luego, en 1996 entró en vigencia el Decreto Legislativo Nº 882, Ley de Promoción de la Inversión en la Educación, que permitió la creación y el funcionamiento de universidades privadas con o sin fines de lucro, bajo cualquier forma de organización. Esto generó una expansión de la oferta y mayor acceso a la educación superior universitaria, pero el mejoramiento de la calidad universitaria no formó parte de dicho crecimiento.^[3] 

En consecuencia, dada las acciones que tomo el gobierno para la mejorar la educación superior, mediante la creación de dichas leyes, no se logró obtener los resultados esperados. Seguimos ocupando pésimos lugares en el Ranking de las mejores universidades del mundo, donde la mejor universidad peruana “Pontificia Universidad Católica del Perú”  se encuentra en el rango 491-500, la única entre las primeras 500.

En conclusión, es urgente mejorar la calidad de la educación de las universidades, donde el estado debe jugar un rol importante a través del MINEDU. Se debe mejorar las toma de decisiones en cuanto al financiamiento que se le otorga a las universidades, porque no es solo mejorar la infraestructura educativa y rendir cuentas, sino que dicho recurso financiero debe tener un impacto significativo en los progresos del aprendizaje y la calidad de los estudiantes universitarios, a través de contratar docentes competentes y generar incentivos hacia la investigación, donde los temas deben estar ligados a la problemática nacional, regional y local. Por lo tanto, para poder lograr mejores resultados y no seguir en lo mismo (dejar de lado la calidad universitaria), se apuesta por la P.L. N°302200, la cual se pasara a examinar la magnitud del impacto positivo que tiene en la mejora la calidad de los estudiantes, desarrollo económico del país y mayor bienestar para la sociedad.

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