REFORMA ENERGETICA

INTRODUCCION

El objetivo de la Reforma Energética en materia de hidrocarburos es permitir un abasto suficiente, a precios competitivos, de los combustibles que requieren los consumidores residenciales, comerciales e industriales en México. Lo anterior permitirá generar un nuevo impulso industrializador, y con él, empleo, inversión y crecimiento, a partir de los recursos petroleros con que cuenta el país.

Se propone la introducción de esquemas contractuales efectivos para la exploración y extracción de petróleo y gas natural; la participación de particulares en refinación, petroquímica, transporte y almacenamiento de los productos petroleros, así como el fortalecimiento de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la rectoría del Estado

INDICE

Capitulo primero

1. Antecedentes Históricos

1.1 1Revolución Industrial

1.2 Dictadura Porfiriana

1.3 Revolución Mexicana

1.4 Antecedentes de la expropiación.

Capitulo segundo

2. Antecedentes de la expropiación

2.1 Lázaro Cárdenas

2.2 La expropiación

2.3 Conflicto Legal

2.4 Artículo 27 De La Constitución Política De Los Estados Unidos Mexicanos

Capítulo Tercero

3. Antecedentes Reforma al sector hidrocarburo

3.1 Diagnóstico

3.2 Capacidad de ejecución

a) Aguas profundas

b) Gas y petróleo de lutitas

c) Campos maduros

3.3 Aguas profundas

a) Gas y petróleo de lutitas

b) Campos maduros

Capitulo cuarto

4. PETRÓLEO Y DEMÁS HIDROCARBUROS

a) Exploración y extracción

4.1 Marco Jurídico

4.2 Propuesta de reformas

4.3 Beneficios esperados

Capitulo Quinto

5. Situación del sector eléctrico

a) Marco institucional

b) Energías limpias

c) Red nacional de transmisión y distribución

5.1 Propuesta de reformas

5.2 Beneficios separados

Capitulo Sexto

6. Bibliografía

6.1 Anexos

6.2 Conclusiones

CAPITULO PRIMERO

1.- Antecedentes Históricos

La revolución industrial del siglo XIX modificó la fuente de energía para la producción industrial y los transportes, aumentando la importancia de las empresas petroleras internacionales.

En México, la dictadura porfiriana consideraba esencial para el desenvolvimiento del país la participación de capitales extranjeros, quienes se encargarían de desarrollar nuestros recursos naturales.

Durante este periodo los inversionistas extranjeros gozaron de facilidades ilimitadas para el manejo de tales recursos, mantenían bajo su control a buena parte de las autoridades civiles de la zona petrolera, fijaban a su arbitrio los precios que las tiendas de raya ponían a los productos de primera necesidad. Además, las empresas gozaban de exenciones de impuestos para el establecimiento y mantenimiento de sus industrias.

Con el derrocamiento del régimen porfirista, y durante la lucha revolucionaria, la industria petrolera se aisló más del proceso económico general del país y llegó a constituir, un enclave extranjero. Dos empresas extranjeras tenían una presencia predominante en México: La Standard Oil (Exxon) y la Royal Dutch. La primera de ellas era norteamericana, propiedad de los Rockefeller; la segunda estaba constituida por capital holandés e inglés. El 60% del petróleo mexicano estaba en manos de compañías inglesas y el 39.2% en manos de compañías norteamericanas.

Al terminar la revolución mexicana y ser aprobada la constitución de 1917, su artículo 27 estableció el derecho de la nación a tener en propiedad exclusiva la tierra, el subsuelo y las aguas en los límites del territorio mexicano; lo cual se oponía claramente a los intereses de las compañías extranjeras.

El conflicto petrolero comenzó en 1935 cuando las empresas, en manos de capital extranjero, trataron de impedir la formación de sindicatos y usaron para ello todos los medios que estuvieron a su alcance, tanto lícitos como ilícitos. Aun así, se logró, en cada compañía petrolera, crear sindicatos únicos, pero las condiciones de trabajo entre una y otra eran muy diferentes.

Finalmente, el 27 de diciembre de 1935 se conformó el Sindicato Unico de Trabajadores Petroleros, no sin vencer una serie de trabas legales, particularmente en Tamaulipas y Veracruz. El 29 de enero de 1936, este sindicato se incorporó al Comité de Defensa Proletaria, del cual surgiría, al mes siguiente, la Confederación de Trabajadores de México (CTM).

El 20 de julio de ese año, el Sindicato Único de Trabajadores Petroleros llevó a cabo su primera convención, en la cual formuló un proyecto de contrato general con todas las compañías y emplazó a huelga para exigir su cumplimiento.

El presidente Lázaro Cárdenas intervino para mediar ante las compañías intentando lograr la firma de este contrato. Se aplazó la huelga por cuatro meses, que se prolongaron aún dos más; pero todo fue inútil, pues no se llegó a ningún acuerdo. El 28 de mayo de 1937 estalló la huelga, lo que paralizó al país entero al no despacharse gasolina por doce días.

En vista de esa situación, el presidente Cárdenas hizo un llamado a la cordura y la huelga se levantó en tanto no se emitiera un fallo. Las compañías declararon que se encontraban con problemas financieros y no podían cumplir con las demandas de los trabajadores. Se decidió entonces investigar al respecto. El 3 de agosto, una comisión de peritos dio a conocer su conclusión: la industria petrolera mexicana produce rendimientos muy superiores a la de Estados Unidos.

1.1Revolución Industrial

(Siglo XVIII-XIX). Las empresas petroleras internacionales aumentaron su popularidad e importancia dentro de la vida económica de varios países, entre ellos México.

1.2 Dictadura Porfiriana

(1876-1911). Se considera esencial para el desarrollo del país la participación de capitales extranjeros a los que se les dan todas las facilidades para manejar los recursos además de tener bajo su control casi a todas las autoridades civiles de la zona petrolera y fijar los precios de los productos de primera necesidad en las tiendas de raya. Además, las empresas disponían de impuestos para el establecimiento y mantenimiento de sus industrias.

1.3 Revolución Mexicana

(1910). La industria petrolera se aparta del proceso económico general del país. Dos empresas extranjeras predominan en el país: La Standard Oil (Exxon) de capital norteamericano propiedad de Rockefeller, y la Royal Dutch constituida por capital holandés e inglés. El 60% del petróleo mexicano estaba en manos de compañías inglesas y el 39.2% en manos de norteamericanos.

Constitución de 1917.

El artículo 27 señaló el derecho de la nación a tener en propiedad exclusiva la tierra, el subsuelo y las aguas en los límites del territorio mexicano; lo cual se oponía a los intereses de los extranjeros.

1935. Las empresas extranjeras tratan de impedir la formación de sindicatos, sin embargo las compañías petroleras logran formar sindicatos únicos con condiciones de trabajo entre ellos muy diferentes. El 27 de diciembre de 1935 se forma el Sindicato Único de Trabajadores Petroleros.

1936. El 29 de enero el Sindicato Único de Trabajadores Petroleros se incorpora al Comité de Defensa Proletaria, y de la cual surge la Confederación de Trabajadores de México (CTM). El 20 de julio de 1936, el Sindicato realiza su primera convención, y formula un proyecto de contrato general con todas las compañías convocando a huelga para exigir su cumplimiento. Lázaro Cárdenas (presidente de México) interviene sin éxito a fin que las compañías firmen el contrato, por lo que la huelga se pospone 4 meses, prolongándose 2 meses más esperando que se firmara.

1937. El 28 de mayo estalla la huelga, lo que paralizó al país entero al no despacharse gasolina en doce días. Los trabajadores se niegan a terminar la huelga y las compañías declaran no tener fondos para cumplir las demandas de los trabajadores aún cuando "la industria petrolera mexicana produce rendimientos muy superiores a la de Estados Unidos". Se siguen una serie de hechos laborales ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, fallando ésta a favor de los trabajadores y exigiendo a las compañías petroleras el pago de 26 millones de pesos de salarios caídos; hecho que no acataron, y se ampararon ante la Suprema Corte de Justicia.

1938. El 3 de marzo a Suprema Corte de Justicia niega el amparo a las compañías petroleras y los obliga a elevar los salarios y mejorar las condiciones laborales de sus trabajadores. El presidente Lázaro Cárdenas ofrece mediar ante el sindicato para que aceptara el pago de los 26 millones de pesos y no de 40 millones, como lo exigían. En este acto del presidente los empresarios de las compañías petroleras cuestionan la capacidad del Presidente para lograrlo, siendo ese acto de desconfianza lo que finalmente generó que el presidente Lázaro Cárdenas decidiera poner fin a tan largo conflicto y anunciar la expropiación petrolera.

Capitulo segundo

2. Antecedentes de la expropiación.

Todo comenzó en 1935 cuando las empresas petroleras, en manos de capital extranjero, trataron de impedir la formación de sindicatos y usaron para ello todos los medios que

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