Segundo año de Historia Historia de Medioevo

INSTITUTO DEFORMACION DOCENTE N° 809- Esquel

Segundo año de Historia

Historia de Medioevo

Profesor: Nahuel Bender

Integrantes: Rocha Andrea

                   Federico Vidal

1. Mencionen las áreas donde aparece el Islam y las regiones que llego a controlar. Caractericen las administraciones Omeyas y Abasíes.

Según el autor Antoni Segura, Hourani A y Henrri Pirenne nos dan a conocer un gran panorama de la expansión islámica y las transformaciones;  el islam constituye la tercera gran religión monoteísta. Surgió a comienzo del siglo VII en la Península Arábiga, donde Dios por boca del arcángel Gabriel, revelo al Profeta Mahoma el libro sagrado el Corán, que contiene todos los principios básicos y las enseñanzas necesarias para el creyente para su salvación espiritual y la organización de vida terrenal. El islam es la doctrina que abarca lo que nosotros entendemos por religión y lo que entendemos por política. Que compromete a todo y a cada uno de los miembros de una comunidad creyente. La expansión del islam se dio por la predica de Mahoma quien forjo un Estado regido por principios religiosos que muy pronto se extendió y conformo un Imperio.

Mahoma nació en la Meca        , ene l año 570, era hijo de familia de comerciantes del clan de los Hachemitas. Quedando huérfano a los seis años fue adoptado por su abuelo y luego por su tío, quien lo introdujo en el mundo del comercio y lo incorporo a sus viajes. A los 40 años inicio sus experiencias místicas retirándose a meditar y rogar en el monte de acuerdo con la tradición musulmana, allí recibió por primera vez, por boca del arcángel Gabriel la palabra de Dios. Mahoma le confió estas primeras experiencias a su esposa y hacia el año 613 empezó su predicación en la Meca, su prédica era en los sectores más pobres de la población. En torno al año 630 conquistando definitivamente la Meca, Mahoma se dirigió a Ka´ba y consagro el santuario casa de Dios. Poco después Mahoma se trasladó de nuevo a Medina donde murió el 8 de Junio del año 632. La predicación de Mahoma había durado 20 años y a su muerte dejo una nueva religión totalmente consolidada.

El islam se propago rápidamente por gran parte de oriente, Norte de África y España. El éxito de la expansión se debió en gran medida a la guerra santa.

En algunos de sus pasajes, el Corán alienta a la lucha contra el infiel, contra todos aquellos que se oponen abiertamente al Islam.

La península  Arábiga, extendida al Sur de Siria y de Mesopotamia, rodeada por las aguas del Golfo Pérsico, el Océano Indico y el mar Rojo, se mantuvo relativamente aislada de los centros políticos y culturales de la Antigüedad.

Si bien a la muerte de Mahoma (632) comenzaba ya arraigar entre los musulmanes un ideal nacional, no se había concretado la unificación total del pueblo árabe bajo la doctrina del profeta. Fueron sus sucesores, los califas, quienes llevaron a cabo un formidable movimiento expansionista. Califa o vicario fue el nombre que recibieron los sucesores de Mahoma. Los cuatros primeros (Abu Bequer, Omar, Otman, Ali) fueron llamados ortodoxos o legítimos por ser considerados los más dignos de continuar la obra del profeta al ser sus parientes más directos. Con ellos el islam se afirmó en Arabia, se extendió por Siria, Persia, Egipto, y Palestina y adquirió una estructura política definida.

El primer impulso de la expansión islámica y regiones que llego a controlar fuera de la Península arábiga la llevo  cabo el segundo califa Umar ibn al-hattab el cual venció a los bizantinos ya a los persas (637) y conquisto (638) Jerusalén y Egipto(641). Una década después de la muerte de Mahoma, Umar se había hecho con el control de Siria. Dominaba la ciudad santa de Jerusalén y sus ejércitos acampaban al Este del golfo Pérsico y al Oeste del Nilo. El sucesor de Umar, Utman Ibn Affan hizo avanzar a los ejércitos musulmanes hacia el Este. Con el cuarto califa Allibn Alitalib, primo y yerno de Mahoma se planteó abiertamente  la cuestión sucesoria. La batalla Siffin (657) escindió el islam en Sunnitas, Siitas y Jariyitas y después del asesinato de Ali (661) fue elegido nuevo califa el gobernador de Damasco, Mu Awiya Ibn Abu Sufyan quien instauro la dinastía Omeya que gobernaría en Damasco (661-750) y en Córdoba (756-1010).

Causas de la expansión islámica

Todos los factores, en conjunto, influyen:

• Entusiasmo religioso que deriva del precepto de Guerra Santa o Yihad. Implica que al creyente le espere el reparto del botín o bien el paraíso.
• Se extendió gracias a la división y desorganización de los dos grandes imperios que les rodeaban, el Imperio Bizantino y el Imperio Persa, el cuál fue arrasado por el Islam.
• Cohesión guerrera de base tribal de los combatientes, así como la gran habilidad bélica que tienen.
• Rapidez de las tropas árabes(caballos, camellos, arcos, espadas).
• Gran capacidad del Islam para adaptarse a los pueblos dominados.
• La política de pactos desarrollada ampliamente por ellos. Más inteligente que una lucha militar. Es lo que ocurrió en la Península Ibérica

El islam prosiguió su expansión a pesar de la fragmentación política y la rivalidad entre diferentes poderes musulmanes en consolidación. La expansión Otomana también constituyo una nueva presencia musulmana durante 4 siglos.

La segunda expansión del islam tuvo un carácter inminentemente religioso y podemos fechar sus inicios entre los siglos IX y X momento en que empezó la islamización en las tribus turcas procedentes de Mongolia que habitaban las estepas de Asia central. Los primeros en convertirse serían los turcos, que en el siglo XI dominaron Irán, Irak y la Anatolia bizantina.

A partir del siglo X, las rutas de la seda abrieron las puertas del Turkestan oriental al Islam que ya estaba presente en el Norte de la India, para llegar al Norte de China siglos más tarde. De forma paralela el comercio marítimo llevo el conocimiento del Islam a las costas de Arabia y del Golfo Pérsico y las costas de Asia meridional y al África Oriental. Por último, en África Occidental la penetración del Islam fue muy temprana.

Los Omeyas

Hacia el 660 una serie de revueltas encabezadas por Mohavia (gobernador de Siria) pusieron en tela de juicio la legitimidad del califa Ali. Como consecuencia de estas disensiones internas Ali fue asesinado y una nueva dinastía proveniente de Siria- la de los omeyas- fue la encargada de la conducción del imperio islámico. La capital de la misma pasó a ser Damasco y a partir de ese momento, el gobierno cobro un acentuado carácter monárquico por influencia de los imperios persas y bizantino. Los Omeyas |gobernaron desde el 661 a 750, periodo beneficioso para la propagación del Islam que alcanzo a dominar España, el Sur de Asia Menor y el Turquestán, extendiéndose luego hasta las orillas del Indo. Esta rápida expansión no fue obra del azar: responde a múltiples causas, las conquistas constituían un medio para acallar los enfrentamientos entre tribus porque los soldados obtenían nuevos beneficios, representados por tierras y botín. Los califatos de los primeros omeyas estuvieron marcados por la guerra civil que tuvieron que librar contra Siitas y Jariyitas. En el año 680 Yaz Idj obtuvo una victoria decisiva en Karbala vencida la resiste. Los omeyas reconquistaron la meca y al mismo tiempo expulsaron a los Jariyitas. La consolidación de la dinastía omeya la primera y única totalmente árabe, permitió continuar la expansión del islam. Fue una expansión que perseguía más la construcción de un Estado dominado por los árabes que la islamización de la población. Los omeyas preferían confiar determinadas misiones a un árabe cristiano que a un musulmán de otra etnia, desde la conquista de Siria, Palestina e Irak, los cristianos árabes eran sus mejores aliados contra los bizantinos y los persas. La estabilidad política permitió que prosiguiera la expansión y en el año 670, atravesando el desierto, el ejército árabe llego a Túnez, donde fundo la primera capital árabe del Magreb, kairuan.

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