Alfabetidad visual. Algunas de las características de los mensajes visuales

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ÍNDICE

INTRODUCCIÓN        2

LA COMUNICACIÓN VISUAL        3

El mensaje visual        4

Algunas de las características de los mensajes visuales        5

Lenguaje verbal y lenguaje visual        6

Elementos básicos de la comunicación visual        7

El punto        7

La línea        8

El contorno        8

Dirección        9

Tono        

El color        

Textura        

Escala        

Dimensión        

Movimiento        

Elementos de relación        

Mensajes de las formas: mensajes no intencionados o casuales, y mensajes intencionados.        

LEYES DE LA GESTALT        

Principio general de figura y fondo        

Ley general de la buena forma        

Ley del cierre o de la completud        

Ley del contraste        

Ley de la proximidad        

Ley de la similaridad        

Movimiento común o destino común        

CONCLUSIÓN        

BIBLIOGRAFÍAS        

INTRODUCCIÓN

La siguiente investigación se realizó conforme a una estructura de trabajo, del cual nos proporcionaron la información necesaria para llevar a cabo su debido desarrollo.

Para la comprensión de la comunicación visual debemos de darnos cuenta de que es como aprender una nueva lengua, pero en esta no nos comunicaremos con palabras, señas u otra cuestión, sino que simple y sencillamente a través de imágenes, figuras, carteles, entre otros, según el contexto en el que nos encontremos nos darán o compartiremos cierta información que puede ser interpretada de distintas formas, y es ahí donde el sentido de la vista es un elemento muy importante, pues ellos son los que nos proporcionan el poder observar nuestro entorno.

El sentido de la vista nos sirve para poder percibir el color, la forma, el tamaño, la posición, la distancia, entre otras cuestiones. Los ojos son los órganos de la vista, situadas uno al lado del otro de la parte superior de la cara.

Para que la comunicación visual se lleve a cabo debe de haber cierta relación con la vista y el lenguaje, pues como primera instancia debemos de capacidad de visualizar, o sea, poder formar imágenes mentalmente, pues la evolución del lenguaje se debe a muchos aspectos visuales, ya que la cuestión fundamental es la alfabetidad y su significado en el contexto del lenguaje.

El lenguaje ha ocupado una posición única en el aprendizaje humano, ha funcionado como medio de almacenamiento y transmisión de información, pues es un vehículo para el intercambio de ideas.

En lo que comprende este tema, las formas también proporcionan ciertos mensajes, de los cuales se conocen los intencionados (los que se hacen con un fin o propósito) y los no intencionados (los que se interpretan libremente por quien es recibido).

LA COMUNICACIÓN VISUAL

        La comunicación visual se puede definir como todo lo que ven nuestros ojos; una nube, una flor, un dibujo técnico, un zapato, un cartel, una libélula, un telegrama como tal (incluyendo su contenido), una bandera. Imágenes que, como todas las demás, tienen un valor distinto, según el contexto en el que están insertas, dando informaciones diferentes.

Así pues, la comunicación visual es en algunos casos un medio imprescindible para pasar información de un emisor a un receptor, pero la condición esencial para su funcionamiento es la exactitud de las informaciones, la objetividad de las señales, la ausencia de falsas interpretaciones, la codificación unitaria. Todas estas interpretaciones se pueden alcanzar solamente si las dos partes participan en la comunicación tienen un conocimiento instrumental del fenómeno.

El soporte de la comunicación visual puede existir también solo, sin información, y puede contener una información cuando es utilizado. Así son soportes de la comunicación visual el signo, el color, la luz, el movimiento…, que se utilizan en relación con el que ha de recibir el mensaje.

Pero conocer la comunicación visual es como aprender una lengua, una lengua hecha solamente de imágenes que tienen el mismo significado para personas de cualquier nación, por lo tanto, de cualquier lengua. El lenguaje visual es un lenguaje quizás más limitado que el hablado, pero sin duda más directo. Un ejemplo evidente lo hablamos en buen cinema en el que no son necesarias las palabras, si las imágenes narran bien una historia.

Todo el mundo recibe continuamente comunicaciones visuales, de las que pueden extraerse consideraciones, y por tanto conocimiento, sin utilizar las palabras. No solamente las imágenes que forman parte normalmente de las artes visuales, son comunicaciones visuales, sino también el comportamiento de una persona, su manera de vestir, el orden o desorden de un ambiente, la manera como una persona utiliza un instrumento, un conjunto de materias y colores que pueden dar un sentido de miseria o de riqueza, y estos tipos de comunicación visual son utilizadas con frecuencia en la ambientación de lugares que han de dar una comunicación visual de prestigio o de reconocimiento, de trabajo o de confort.

El mensaje visual

La comunicación visual se produce por medio de mensajes visuales, que forman parte de la gran familia de todos los mensajes que actúan sobre nuestros sentidos, sonoros, térmicos, dinámicos, etc.

        Por ello se presume que un emisor envía mensajes y un receptor recibe mensajes. Pero el receptor está inmerso en un ambiente lleno de interferencias que pueden alterar en incluso anular el mensaje. Por ejemplo, una señal roja en un ambiente en el que predomine la luz roja quedara casi anulada; o bien un cartel en la calle con colores banales, fijado entre otros carteles igualmente banales, se mezclara con ellos anulándose en la uniformidad. El indio que trasmite su mensaje con nubes de humo puede ser estorbado por un temporal.

        Supongamos que el mensaje visual está bien proyectado, de manera que no sea deformado durante la emisión: llegara al receptor, pero ahí encontrara otros obstáculos. Cada receptor, y cada una de sus maneras, tiene algo que podríamos llamar filtros, a través de los cuales ha de pasar el mensaje para que sea recibido. Uno de estos filtros es de carácter sensorial. Por ejemplo: un daltónico no ve determinados los colores y por ello los mensajes basados exclusivamente en un lenguaje cromático se alteran o son anulados. Otro filtro lo podríamos llamar operativo o dependiente de las características constitucionales del receptor. Ejemplo: está claro que un niño de tres años analizara un mensaje de una mañera muy diferente de la de un hombre maduro. Un tercer filtro, que se podría llamar cultural, dejara pasar solamente aquellos mensajes que el receptor reconozca, es decir, los que forman parte de un universo cultural. Ejemplo: muchos occidentales no reconocen la música oriental como música, porque no reconocen a sus normas culturales; para ellos la música “ha de ser” las que siempre han conocido, y ninguna otra.

        Estos tres filtros no se distinguen de una manera rigurosa y si bien se suceden en el orden indicado, pueden producirse invenciones o alteraciones o contaminaciones recíprocas. Supongamos en fin que el mensaje, una vez atravesada la zona de interferencia y los filtros, llega a la zona del receptor, que llamaremos zona emisora del receptor. Esta zona puede admitir dos tipos de respuestas al mensaje recibido: una interna y otra externa. Ejemplo: el mensaje visual dice, “aquí hay un bar”, la respuesta externa envía al individuo a beber; la respuesta interna dice, “no tengo sed.”

Algunas de las características de los mensajes visuales

        Es completamente comprensible la propensión a conectar la estructura verbal con la visual. Los datos visuales presentan tres niveles distintivos e individuales: el input que consiste en una miríada de sistemas de símbolos; el material visual representacional que reconocemos en el entorno y que es posible reproducir en el dibujo, la pintura, la escultura y el cine: y la infraestructura abstracta, o forma de todo lo que vemos, ya sea natural o esté compuesto por efectos intencionados.

        Existe un vasto mundo de símbolos que identifican acciones y organizaciones, estados de ánimo, direcciones; símbolos que van desde gran riqueza en detalles representacionales a los completamente abstractos y por tanto irrrelacionados con la información reconocible.

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