Cartas a un estudiante de Derecho

INTRODUCCIÓN

Este libro trata de un profesor que nos cuenta la experiencia que vivió cuando fue un estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México, en la carrera de Derecho; este libro es un tanto más de consideraciones y/o recomendaciones que técnico-jurídico hacia los estudiantes que apenas inician su vida de estudiante de Derecho, ya que en base a sus experiencias, en cada uno de los capitulos nos va mostrando los puntos que debemos tomar en cuentra, consejos, e incluso hasta ciertas revistas, libros y páginas web en donde podemos encontrar mucha información que nos servirá a lo largo de nuestra carrera, pero no sólo nos da consideraciones que nos ayudarán en nuestra formación académica, si no que también para saber como podremos organizar y disfrutar mejor nuestra vida universitaria.

CARTAS A UN ESTUDIANTE DE DERECHO

El autor Miguel Carbonell comienza con una bienvenida que es la Carta número I; en esta carta nos dice que como estudiantes de recién ingresados a la Universidad, pensamos que iba a ser lo mismo que la Preparatoria, pero lo que no sabiamos era que iba a dar un cambio totalmente diferente en nuestras vidas, desde el primer día ya se siente un cambio, el despertar cada mañana en que podemos mejorar en nuestras vidas, que hoy podremos poder ser mejores que ayer, que lucharemos día a día para tener el futuro que planeamos, poder cumplir nuestros sueños de poder ser grandes profesionistas en un futuro, etc. Pero cada día nos preguntaremos: ¿Cómo podré mejorar? ¿Qué tendré que hacer para lograrlo?, etc, todos los dias que despertemos nos podremos hacer todo este tipo de preguntas para poder obtener cualidades que nos hagan destacar en la profesión que ya hemos elegido; el estar en la Universidad ya no es sólo pensar en pasar la materia, si no, en tener mejores calificaciónes, destacar como un mejor estudiante con nuestro intelecto y con nuestras calificaciónes, ya que aparte de destacar, el tener buenas calificaciones te podrá abrir muchas puertas. Nos menciona que debemos de aprender a saber distinguir entre dos modalidades, que son “Hábitos Formales” y “Hábitos Sustanciales”, los hábitos sustanciales se refieren al aprendizaje y los estudios que son los que componen la carrera Universitaria, y los hábitos formales se refieren a aquellos que son los que nos permitirán aprovechar mejor los años que llevaremos en la Universidad; un ejemplo de los que nos menciona Carbonell de los hábitos formales es que se podrán realizar otras actividades fuera de la escuela, reuniones con amigos, etc. Pero estos no pueden ser más importantes que las clases, las tareas o el estudio diario o para exámenes, las actividades fuera de las clases deben de ser secundarias y darle prioridad a las obligaciones que conllevan la carrera y nunca al revés, en la vida Universitaria siempre podrás realizar muchas actividades pero nunca debemos olvidar que nuestra obligación principal que es estudiar. También nos da consejos sobre como podemos concentrarnos al hacer nuestras tareas, o estudiar, o leer; especifíca que cada persona se concentra de manera diferente, unos pueden concentrarse con música, otros en total silencio, unos puden estar en un cuarto sólo para poder concentrarse, otros podrán estar en un espacio público y también podrá concentrarse, cada persona puede tomar el consejo que mejor le convenga para poder llevar su concentración más eficiente ante sus tareas, trabajos, lecturas, etc.

En mi opinión, en esta carta que fue el darnos la Bienvenida, esta Bienvenida fue tanto como para lo que veremos en el libro como para lo que empezaremos a vivir en nuestra vida Universitaria en la carrera de Derecho, para ir comenzando con la carta número uno me gustó mucho el como se explica, siendo tan directo y sincero, ya que nos menciona francamente lo que es; el entrar a la Universidad no es algo sencillo, y claramente eso se siente desde el primer dia, lo digo por experiencia propia, ya que en mis años anteriores de escolaridad, siempre se iniciaba con una semana relajada, sin tareas ni trabajos, pero ahora en la Universidad desde el prime día nos dejaron tareas, trabajos y libros pero desde un principio se sabe que no será un camino sencillo a lo largo de nuestra vida, y hasta Carbonell nos lo menciona, pero nada es difícil si nos proponemos a dar lo mejor de nosotros, siempre dar más de lo que podemos, con esfuerzo y dedicación podremos ser los mejores en lo que hacemos; siempre debemos poner como prioridad el estudiar, claro, si podremos realizar nuestras actividades fuera de las clases, pero nunca ponerlo como principal antes que el estudiar.

En la Carta número II nos habla sobre los hábitos del estudio, donde anteriormente se mencionó que se llamaban “Hábitos Sustanciales”, Carbonell menciona que los profesores ya no son como en la secundaria o en la preparatoria, donde los profesores o titulares del salón te decían, toma apuntes, entra a clase, pon atención en clase, realiza tu tarea, etc. En la Universidad es completamente diferente, simplemente los profesores no se preocupaban para nada de nosotros, y no es porque no les interesemos, simplemente es porque ellos ya dan por hecho que nosotros debemos hacernos cargo de nuestros trabajos y tareas, de nuestras asistencias a clase, de si estabamos listos para las clases o no, etc.

Carbonell nos cuenta sobre su experiencia en el como organizaba su tiempo, nos menciona que el si dormía sus ocho horas, pero de una manera diferente, el dormía de cinco de la tarde a las nueve de la noche, y luego despertaba para estudiar y hacer una breve interrupción para poder cenar, después dormía nuevamente y despertaba ya hasta las cinco de la mañana para poder llegar a tiempo a clases, claro, hace incapie a que no a todos les puede funcionar de la misma manera pero, al menos a el le funcionaba muy bien así, ya que para el, era lo mejor estudiar en la madrugada, ya que tenía la facilidad de poder concentrarse mejor.

Ahora pasando a otro tema, como anteriormente se mencionó, no es bueno faltar ni un solo día a clases, ya que es súper importante tomar apuntes y escuchar la clase que imparten los profesores, porque los maestros nos hacen recomendaciones bibliográficas de donde podemos investigar más a fondo el tema, o poder realizar una tarea o trabajo que dejen, retomando sobre los apuntes, a Carbonell se le facilitaba la técnica que tenía para poder estudiar más que era pasando sus apuntes en limpio en uno de sus cuadernos que tenía especial para la materia, aparte de que el agregaba más información de la que investigaba mediante libros que le recomendaban sus profesores o que el mismo investigaba; los libros es una base fundamental de esta carrera pero representan solamente una parte dentro del universo de información, también se deben de consultar las revistas jurídicas, de preferencia al nivel internacional, ya que hay publicaciónes periódicas muy prestigiosas que nos ayudarán a enriquecer nuestros conocimientos, ya que las revistas entran a materiales que profundiza en ciertos temas.

En mi opinión sobre esta carta es que, otra vez, nos menciona puntos muy importantes que debemos considerar, principalmente donde da énfasis al que no faltemos a clases, aunque la escuela ya no nos obligue como tal y sólo dependa de nosotros si asistimos o no, es bueno que no faltemos para no perderle el hilo a las clases; también que siempre debemos tomar apuntes, aunque no alcancemos a captar todo lo que explica el profesor es importante pedir los apuntes a un compañero, y anotarlos como en un borrador y ya una vez que los tengamos, es bueno pasarlo en limpio porque aparte de tener los apuntes en orden y limpios, así podemos agregarle más información de la que podamos investigar y mientras vamos pasándolo se nos va quedando grabada la información y ya este nos sirve como estudio; también es importante pedirle bibliografía nuestros profesores para poder complementar nuestras anotaciones y poder estudiar un poco más sobre el tema y siempre estar leyendo e informandonos sobre las noticias que sucedan alrededor de nuestro entorno.

En la Carta número III, se habla sobre el lenguaje jurídico, Carbonell nos menciona que en los primeros dias de clases, escucharemos a nuestros profesores utilizar términos que anteriormente no hayamos escuchado y que no conocemos bien sobre ellos, el lenguaje jurídico requiere de mucha concentración y aprendizaje constante ya que el manejo y dominio de lenguaje es muy importante en toda nuestra carrera. Es importante saber manejar y dominar el lenguaje ya que es el instrumento fundamental con el que puede interactuar un ser humano para llegar a ciertos fines ya que sin el logro de este, ya no se podrá lograr este objetivo; un abogado es aquella persona que logra casi siempre dominar el saber comunicarse con eficacia lo que piensa, tanto escrito como verbal; los abogados deben de plantear bien sus ideas y pensamientos, ya que están sobre tiempo en una audiencia y si no alcanzan a lograrlo en el caso, no tendrán un buen desempeño. En seguida Carbonell nos enlista un par de sugerencias que debemos de tener ante una audiencia en la que debemos aplicar todo lo anterior; ahora volviendo al el lenguaje jurídico como el menciona, para profesores y estudiantes de derecho es el encontrar un balance razonable entre el uso de tecnicismos jurídicos y el lenguaje común corriente que usa cualquier ciudadano.

En mi opinión personal sobre esta carta es que nos hace énfasis a que el lenguaje jurídico es una parte muy fundamental de la carrera de Derecho, es muy importante que sepamos

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