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Teoría del desarrollo

Erik Erikson es el psicólogo del desarrollo, y formulo una teoría para explicar el desarrollo personal del niño. Esta nos ayuda a comprender la aparición del yo al iniciarse el desarrollo, la necesidad de la autosuficiencia en la etapa escolar y la búsqueda de autentidad por parte del adolecente.

Durante el primer año de vida, al niño le interesan sobre todo las actividades como morder, succionar y comer. En el segundo año, sus necesidades se desplazan al control de esfínteres. Erikson estaba convencido de que los niños pasan por una seria de etapas discontinuas a lo largo de se desarrollo. Erikson fue uno de los primeros teóricos del ciclo vital, pues pensaba que el desarrollo es un proceso que dura toda la vida. Igual que Freud subrayo la importancia que los sentimientos y las relaciones sociales tienen en el desarrollo.

De acuerdo con la teoría de Erikson, el niño encara constantemente nuevas funciones o problemas de desarrollo que habrá de resolver de alguna manera conforme vaya madurando. Erikson descubrió un resultado positivo y otro negativo en cada etapa. Erikson creía que en gran medida el ambiente social influye en la eficacia con que se satisfacen las necesidades del desarrollo en cada etapa.

Etapas del desarrollo

Durante la niñez el niño debe de adquirir un sentido básico de confianza como fundamento de su desarrollo ulterior, y este lo adquiere en la primera etapa que es la de confianza afrente a desconfianza, si es que sus necesidades básicas de alimento, cuidados y comodidad se satisfacen con sensibilidad y uniformidad. En la segunda etapa que es Autonomía frente a vergüenza y duda, el niño necesita menos contacto físico con los cuidadores, y comienza a desarrollar sin ayuda actividades como caminar, comer, defecar y orinar.

La niñez temprana e intermedia son periodos importantes en la adquisición de autocontrol, de la iniciativa y de las metas. Entre los 3 y 6 años de edad el niño intenta resolver los conflictos relacionados con la tercera etapa de Erikson, la de Iniciativa frente a culpa. Para obtener el sentido de iniciativa se requiere la cualidad de emprender, planear y enfrentarse a una tarea por el desarrollo de ser activo y dinámico. Los prescolares son muy pero deben de darse cuenta que no siempre pueden dejarse llevar pos sus impulsos.

En la primaria el niño aprende lo que Erikson llama sentido de laboriosidad. En esta etapa de laboriosidad frente a inferioridad, comienza a identificar sus cualidades y a disfrutar sus logros. Si no se le apoya o si no logra corresponder a las expectativas de los demás, puede presentar sentimientos de inferioridad o inadecuación.

Quizá la aportación teórica más importante de Erikson sea su idea de la aparición de la identidad en la adolescencia. Durante esta los jóvenes inician la etapa de identidad frente a la confusión de papeles. Para formarse una identidad hay que aceptar una serie de convicciones, valores y papeles del adulto.

Sin duda la crisis de identidad se debe a los cambios físicos desarrollados durante la adolescencia, pero la sociedad les exige conducirse en formas nuevas. Deben comenzar a ser más responsables y a tomar decisiones. Deben prepararse para la adultez, es decir, diseñar el papel que desarrollaran en el mundo de los adultos.

Implicaciones en la educación

La teoría de Erikson sostiene que los niños necesitan un ambiente escolar seguro y relaciones afectuosas con los adultos para conservar el sentido de confianza indispensable para su desarrollo personal.

El auto concepto designa las creencias, las actitudes, el conocimiento y las ideas referentes a nosotros mismos. Esta organizado jerárquicamente en categorías y en dimensiones que definen el yo y dirigen el comportamiento.

La autoestima es una evaluación de nuestros rasgos, de nuestras capacidades y de nuestras características. En opinión de un experto, la autoestima es un juicio personal del calor, indica asta que punto alguien se cree capaz importante, exitoso y valioso.

La percepción de la competencia influye en su motivación para aprender. Los que se consideran competentes suelen sentir mayor motivación intrínseca para aprender quienes se consideran poco competentes. El autoconcepto y la autoestima influyen en el rendimiento académico.

El autoconcepto

Los niños comienzan a considerarse individuos separados durante el periodo inicial de la marcha. Entre los 21 y 24 meses, los niños se reconocen en el espejo y luego comienzan a utilizar palabras como mi, yo y mio, para afirmar su individualidad.

Durante las etapas prescolares y escolar, los niños se describen a si mismos a partir de sus rasgos físicos, intereses, acciones, y otros aspectos concretos. En los años intermedios de la niñez empiezan a describirse a partir de rasgos psicológicos.

Los niños de mayor edad saben que la gente no conoce sus pensamientos ni sus sentimientos. En esta tendencia evolutiva los psicólogos ven la aparición del yo psicológico o interior. Durante la adolescencia, o durante la etapa de las operaciones formales, es cuando el niño comienza a describirse con valores abstractos, creencias y actitudes.

El niño adquiere una idea mas diferenciada del yo conforme va madurando. Y en la etapa de prescolar o el primer grado, el niño aprende conceptos individuales de sus habilidades físicas, sociales y cognoscitivas. El autoconcepto de estudiantes de mayor edad puede subdividirse según el éxito de las materias como lectura, matemáticas o ciencias. Es decir un estudiante puede considerarse bueno en matemáticas pero sin talento para la música. El niño puede tener un autoconcepto académico deficiente en algunas y un autoconcepto promedio o por arriba del promedio en otras.

Otro cambio notable en la etapa escolar es el uso de comparaciones sociales para evaluarse uno mismo, los niños mayores tienden más a hacer juicios comparativos sobre sus habilidades. En opinión de los teóricos, las comparaciones le sirven al niño para identificar sus características especiales y distinguirse de los demás. Sin embargo, las comparaciones también pueden menoscabar el autoconcepto o la autoestima cuando el niño se percibe menos capaz, menos socialmente competente o atractivo que sus compañeros.

Numerosos estudios revelan que la edad influye en el autoconcepto global y en el académico. En general, se observa una disminución del autoconcepto global en los últimos años de la niñez y en los primeros de la adolescencia, seguida por un resurgimiento al final de la adolescencia y en la adultez temprana.

En general, los autoconceptos académicos se van haciendo más exactos con la edad. A diferencia de los niños de corta edad que suelen subestimar sus habilidades en algunos dominios, los de mayor edad tienen una visión más realista de ellas. Es decir, sus autopercepciones se correlacionan más estrechamente con las calificaciones, con las evaluaciones de sus maestros y con otras fuentes de retroalimentación externa.

Otro cambio importante es su creciente capacidad para reflexionar sobre asimismo. A medida que la domina, llega a conocerse mejor.

Cambios evolutivos

En los primeros años de escuela, la autoestima aumenta a medida que el niño obtiene éxito en las relaciones con sus compañeros y en otros aspectos que le importan. Los últimos años de primaria se observa una gran estabilidad de el autoestima en los niños cuyo ambiente y grupo social de colaboración permanece bastante estables

Una evidencia creciente indica que las experiencias escolares pueden ser tan importantes como las de la familia y las de los compañeros en la aparición de la autoestima. Los niños que logran un buen rendimiento y éxito en la escuela suelen decir que tienen una mayor autoestima. Aparte del rendimiento académico, las relaciones entre profesor alumno pueden ocasionar cambios evolutivos en la autoestima.

Además de la disminución de su autopercepción en los últimos años de la niñez y en los primeros de la adolescencia, los estudiantes muestran notables reducciones de la autoestima cuando inician la adolescencia. Los teóricos piensan que a esto puede contribuir la transición a nuevos ambientes escolares.

La transición a la preparatoria es particularmente difícil, porque el adolescente esta iniciando la pubertad y ajustándose al mismo tiempo a un nuevo ambiente. Esto no le ocurre a los que permanecen en la misma escuela.

Concepciones de los papeles sexuales

El género es el componente fundamental del yo y puede influir profundamente en la autoestima. A medida que crece, el niño emplea la información proveniente de los padres, los compañeros, la escuela y los medios masivos para formular teorías de como deben comportarse ambos sexos. Cuando algunos niños no adaptan la conducta típica de su sexo, pueden sufrir el rechazo o reprensiones por parte de los adultos o de sus compañeros.

Tendencias evolutivas

En esta edad, el niño parece imitar las conductas estereotipadas según el sexo y las actitudes modeladas por los adultos, compañeros y personajes de televisión en su ambiente. La expresión estereotipada según el sexo significa que el niño presenta una conducta que la cultura define como apropiada para su sexo.

Aunque los niños de 2 y 3 años realizan conductas estereotipadas según el sexo, todavía no entienden la constancia del sexo. Creen que es posible cambiar de sexo con solo vestirse de otra manera.

Hacia los 4 o 5 años de edad casi todos los niños comprenden la constancia del sexo, es decir, que el sexo es permanente y no puede cambiarse. Una vez adquirido el sentido

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