El jurista y el simulador del derecho Ignacio Burgoa Orihuela

El Jurista Y El Simulador Del Derecho

Yo considero que esta obra literaria llama el “Jurista y el simulador del derecho” del maestro Ignacio Burgoa Orihuela, este es un libro que todo abogado, y estudiante de derecho debe de leer, mas sin embargo es sorprendente la cantidad licenciados en derecho que lo desconocen y caen en la figura del simulador, como se marca en esta lectura, y que solo pocos pueden hacerse llamar abogados o para este libro juristas.

El autor marca el Derecho como la base de una sociedad, el cual está en constante evolución para ajustarse a los cambios políticos, sociales, económicos y etc., y así estabilizar la seguridad social.

El autor del libro, señala o menciona ciertas características con las que debe de contar el licenciado en derecho para poder ser considerado un jurista y no un simulador, entre dichas características pueden resaltar algunas, como lo es la libertad, aunque se esté bajo el mando de un patrón, la libertad se puede expresar en cuanto a la voluntad de seguir la ética o no, la honestidad, el valor civil, el amor por el derecho en cuanto su aplicación, la disponibilidad y buscar siempre lo justo para su cliente, ya que a pesar de que un abogado no esté al servicio de alguien puede ser un deshonesto, falso apático y etc.

El jurista no solo debe de tener mencionadas características sino que también tiene que hacer honra al significado de jurisprudente o maestro del derecho, como también son hechos llamar, ya que ambos expresan; sabiduría, estudio constante y experiencia en el área del derecho, como lo indica el autor en su libro, todo jurista debe de ser un científico y artista en la búsqueda de la cultura jurídica.

En virtud del párrafo anterior, el autor hace una distinción de tipologías respecto del jurista; Jurisconsulto, quien se considera como el elabora o hace el derecho exponiendo su doctrina sobre múltiples materias jurídicas en libros, tratados y obras escritas en general. El juez, quien es el defensor del principio de juridicidad, velando por la legalidad en cada caso concreto. Abogado, quien es una especie de jurisprudente que se vale de su sabiduría para patrocinar, dirigir o asesorar a las partes contendientes. Maestro del Derecho, quien tiene como deber la enseñanza y la educación jurídica, fomentando los valores y el conocimiento del derecho.

A pesar de las diferentes tipologías del jurista, se puede notar las similitudes que tienen cada uno de ellos, como lo son las características antes mencionadas, las cuales hacen una distinción entre el jurista y un simulador.

Como contraparte encontramos a esos licenciados en derechos, que se desempeñan como juristas,  cuando en realidad son simples pseudo-abogados o bien llamados por el autor del libro, simuladores del derecho, los cuales también cuentan con características propias que los convierten en no más que un simulador como el ser vanidosos, egoístas, mentirosos, fraudulentos, falsos, mediocres y corruptos.

Por desgracia este tipo de abogados son los que se encuentran en gran cantidad en la vida real, abogados que han desprestigiado la figura del abogado ante la sociedad y a causa de ello, los que hacen la excepción quedan sepultados bajo la mala imagen que la gente ha creado a raíz de malas experiencias vividas por un simple simulador.

Como estudiante de derecho, este libro me hace ver el reflejo de la realidad, el ver invadido el campo laboral de simuladores del derecho, pero más que desalentarme, me motiva para en mi caso seguir adelante llenando las expectativas e ir cumpliendo con cada una de las características con las que debe de contar un verdadero abogado, o para el autor, un jurista.

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