Ensayo de “El Túnel”

Ensayo de “El Túnel”:

La novela, relatada por el mismo protagonista, nos plantea la historia de un crimen, un amor platónico, y un desencuentro que termina con la vida de la única persona que pudo entender a nuestro protagonista, y empieza con la confesión por parte de nuestro protagonista de haber cometido tal asesinato (“Bastará decir que soy Juan Pablo Castel, el pintor que mató a María Iribarne…”), esta confesión nos da una visión auto reflexiva de Juan Pablo Castel, nuestro protagonista y narrador, y una imagen cínica, ya que lo admite de forma tan directa.

Este personaje nos atrapa curiosamente con su confesión, tal vez el crimen es la idea principal en el relato, pero ciertamente lo atractivo de esta novela es el proceso por el cual Castel transcurre, de un amor platónico a un proceso de locura que demuestra la desesperación del protagonista. Castel busca el amor absoluto por parte de la persona que lo entiende, lo cual es inalcanzable y María Iribarne no se lo puede conceder (ella presenta una imagen más madura y moderada que el protagonista, y tiene miedo de lastimar a Castel, una razón para no poder entregarle el amor absoluto que Castel demanda de ella).

En la novela se presenta la personalidad y la inestabilidad psíquica de Castel. Muestra al protagonista como inestable y aislado de la sociedad, demostrando su falta de comunicación con la sociedad. Castel considera a la humanidad de manera repugnante, al punto de llamar a los grupos de personas como “conjuntos de bichos”, y su odio por las “repeticiones”.

Esta desesperación, soledad y desequilibrio nos lleva a tener una serie de sueños (tres sueños), en estos sueños nos demuestra como gradualmente Castel llega a su estado de desesperación, tristeza y desequilibrio psicológico:

En el primer sueño, Castel parece buscar refugio en María Iribarne, o por lo menos la representa de esa forma, en medio de un escenario oscuro que provoca paranoia a sus victimas (“me encontraba perdido en la oscuridad o tenía la impresión de enemigos escondidos que podían asaltarme por detrás o de gentes que cuchicheaban y se burlaban de mí y mi ingenuidad.....cuando me desperté, comprendí que la casa de sueño era María.”)

En el segundo sueño representa a su soledad e incomprensión con “el afuera”, en el sueño, Castel es transformado por un mago, pero estos no notan su cambio y no comprenden lo que el trata de comunicar, sintiéndose más aislado con el mundo de “afuera” (“Entonces comprendí que nadie, nunca, sabría que yo había sido transformado en pájaro. Estaba perdido para siempre y el secreto iría conmigo a la tumba.”)

En el tercer y último sueño, Castel se ve encapsulado dentro de un túnel oscuro y solitario, mientras observa a María viviendo afuera una vida normal y poco a poco olvidándose de él. Vemos que ya no intenta comunicarse, y

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