LA META

En el mundo empresarial se observan diversas situaciones tanto beneficiosas para una compañía como devastadoras para los intereses de esta. Tales acontecimientos son impredecibles y dinámicos por lo cual no se pueden evitar ya que su determinación es casi imposible, estos encaminan a que en algún momento todo sistema deba encontrarse con ciertas dificultades las cuales debe saber sobrellevar y de esta manera preservar su integridad. La cabeza visible de toda organización son sus directivos; son ellos quienes deben lidiar con cada contrariedad que impida el normal funcionamiento y progreso del negocio, por lo cual deben poseer la capacidad de sortear los distintos obstáculos que se presenten y encontrar e implementar la mejor solución para resolver el problema. En el libro La Meta se tocan los temas antes mencionados expresados de tal forma que son fácilmente entendibles. Haciendo uso de la literatura de ficción, se relata la historia de una fábrica que se encuentra inmersa en enredos tan graves que está a punto de ser clausurada por los altos mandos de la compañía.

El autor trata de humanizar su escrito al mencionar los apartes de la vida personal del director de la fábrica - Alex Rogo, principal responsable de proteger los intereses de la organización – dando matices de cotidianidad a la novela. Al realizar la lectura del libro se pueden discernir claramente asuntos que impiden alcanzar la meta, y correcciones que ayudarían en la transformación en avance que deben tener las empresas para no verse afectadas por los constantes cambios del entorno económico. Siguiendo la estructura de la historia, la problemática básica se centra en exponer que si una empresa no conoce - o incluso conoce pero no tiene en cuenta - el objetivo que rige toda actividad económica sería absurdo intentar corregir los problemas que se estén presentando. Por esta razón queda claramente consignado que la meta es y siempre será, tener la mayor rentabilidad posible, es decir ganar dinero. Habiendo dejado clara tal aseveración se hace necesario identificar los inconvenientes principales y posteriormente realizar las modificaciones pertinentes.

Uno de los pecados más graves que se comenten en la empresa es tratar de ser adivinos y predecir lo que se debe hacer cuando existe mano de obra desocupada. Por el deseo de asignar a toda costa actividades a trabajadores que se encuentran libres se incurre en hacer predicciones de futuros pedidos por lo cual se aumenta el inventario de sobremanera y se generan costos innecesarios en la compañía; esto es síntoma de carencias de una organización adecuada encaminada a establecer criterios de producción donde cada empleado disponga de las actividades que debe realizar teniendo en cuenta prioridades de pedidos a entregar. Pero en realidad ¿La posesión de un inventario grande conlleva a cumplir la meta? Claro que no, mientras esa inversión no se traduzca en ganancias solo estaría representando costos. Si se mira desde el punto de vista de las ventas, es muy poco probable deshacerse rápidamente de tal cantidad de productos cuando solo se está basado en predicciones de pedidos que resultan ser ficticios. Un punto clave al que hace referencia la historia es la afirmación que mientras se busque equilibrar la capacidad de los recursos con la demanda del mercado, la empresa va encaminada al fracaso. Esta problemática se explica desde el punto de vista de los objetivos; las consecuencias puntuales mencionadas son el decrecimiento de los ingresos y el aumento de inventario, aspectos que en la mayoría de ocasiones se quieren corregir tomando medidas que no ayudan a alcanzar la meta y

que solo mejoran un parámetro y no consideran globalmente la organización, por ejemplo despidos masivos de los operarios.

Dando paso a uno de los temas más interesantes que se debaten en este escrito, se hace alusión a las llamadas fluctuaciones. Como ya fue mencionado anteriormente, el día a día de la empresa está ligado a eventos en su mayoría probabilísticos ya que no pueden ser previstos de antemano. Las fluctuaciones estadísticas se refieren a las variaciones que se presenten en cualquier punto del proceso principal para cumplir con las actividades de la organización. Dichos cambios imprevistos afectan íntegramente el proceso debido a la dependencia que existe entre una operación y otra, de aquí se deriva el

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