Literatura La Tecnologia
sasm9712045 de Julio de 2015
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BLOQUE TEMÁTICO I. GÉNERO NARRATIVO
1. Enlista las características del género narrativo.
2. Explica que es el Lenguaje literario y como se presenta en él la función poética y emotiva.
3. Define connotación y denotación y da dos ejemplos.
4. Define las siguientes formas del discurso en la literatura: descripción, narración y diálogo.
5. Define prosa y verso.
6. Describe los elementos de la narración: tema, argumento, planteamiento, clímax, desenlace, personajes (principales, secundarios y ambientales) y tipo de narrador.}
7. Define los siguientes subgéneros narrativos: mito, fábula, epopeya, leyenda, cuento y novela.
BLOQUE TEMÁTICO II. LA NOVELA MEXICANA E IBEROAMERICANA CONTEMPORÁNEA.
1. Investiga las características de la novela mexicana e iberoamericana contemporánea (de la literatura de “la ola” a la actualidad:
-Rasgos característicos.
- Contexto histórico-cultural: movimientos, corrientes y tendencias literarias.
-Autores representativos.
3. Define lo que es una reseña crítica literaria, con base en esto, elabora el trabajo solicitado.
BLOUE 3. El ensayo literario mexicano e iberoamericano contemporáneo
a) Investiga los Antecedentes históricos del ensayo en México.
b) Define las características del ensayo.
c) Lee el siguiente ensayo y contesta lo que se pide:
¿Conectados pero solos?
Sherry Turkle
Las relaciones humanas son vivas, complicadas y demandantes. Las limpiamos con tecnología y al hacerlo, algo de lo que puede suceder es que se sacrifica la conversación por la simple conexión. Utilizamos conversaciones entre nosotros para aprender a tener conversaciones con nosotros mismos. Así, huir de la conversación en realidad puede afectar, porque pone en riesgo nuestra capacidad de autorreflexión.
Esperamos más de la tecnología y menos de los demás. Y me pregunto: “¿Por qué hemos llegado a esto?” Pienso que es porque la tecnología nos llega en donde somos más vulnerables. Estamos solos, pero tenemos miedo a la intimidad. Desde las redes sociales hasta los robots sociales estamos desarrollando tecnologías que nos dan la ilusión de compañía sin las exigencias de la amistad. Volteamos a la tecnología para sentirnos conectados de maneras que podamos controlar cómodamente. Pero no estamos tan cómodos, no tenemos tanto control. Hoy esos teléfonos de bolsillo están cambiando nuestras mentes y nuestros corazones porque nos ofrecen tres gratificantes fantasías: La primera es que podamos poner la atención donde queremos tenerla; la segunda, que siempre seremos escuchados; y la tercera, que nunca estaremos solos.
Esta última idea, que nunca estaremos solos, es clave para cambiar nuestra psique. Porque en el momento que alguien se queda solo, incluso por unos segundos, se pone ansioso, se aterra, se inquieta, busca un dispositivo.
Estar solos es como tener un problema que hay que resolver, y la gente lo soluciona conectándose. Pero en este caso, conectarse es más un síntoma que un remedio. Expresa pero no resuelve un problema subyacente. Más que un síntoma, la conexión permanente está cambiando la forma que la gente piensa de sí misma. Está conformando un nuevo modo de ser. La mejor forma de describirlo es: Comparto luego existo.
Usamos la tecnología para definirnos, antes era: tengo una sensación, quiero hacer una llamada. Ahora es: quiero tener una sensación, tengo que enviar un mensaje. El problema con este nuevo esquema de “comparto luego existo” es que si no tenemos conexión, no nos hallamos con nosotros mismos. Entonces, ¿qué hacemos? Nos conectamos más y más. Pero en el proceso nos disponemos a estar aislados. ¿Cómo se pasa de la conexión al aislamiento? Se termina aislado si no se cultiva la
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