Relacion entre miedo y derecho

DE LA RELACION ENTRE MIEDO Y DERECHO^[1]

Por: Juan Pablo Montoya Hoyos^[2]

“Como todas las demás formas de convivencia humana, nuestra sociedad moderna liquida es un artefacto que trata de hacernos llevadero el vivir con miedo”… (Bauman, Z. Miedo líquido. La sociedad contemporánea y sus temores. 2006)

Así nos dice este reconocido sociólogo en el libro en el que voy a basar mi tesis argumental, con la cual expondré de la manera más concisa posible, por qué la necesidad del miedo en nuestra sociedad actual, y su aplicación en algunas de las áreas del derecho.

Bauman nos expone el miedo humano (siendo diferente al miedo que siente por instinto un animal ante una amenaza o peligro latente) como “…un «miedo derivativo» que orienta su conducta (tras haber reformado su percepción del mundo y las expectativas que guían su elección de comportamientos) tanto si hay una amenaza inmediatamente presente como si no”… (p. 11) siendo este miedo inevitable, aun con la mayor seguridad que se nos pueda brindar, este sentimiento indescriptible de temor nos obliga a buscar el abrigo de la sociedad, la cual más que protegernos de los peligros que generan miedo, nos hace olvidarnos de ellos, restándoles importancia con infinidad de convencionalismos, tareas y cuanto más actos burocráticos que se vuelven nuestro centro de atención, y es por esto que el individuo se somete sin rechistar (o casi) ante lo que esta le impone.

Es cuando se constituyen las sociedades humanas, que se busca una manera de organizarlas, asignando funciones a cada uno de los individuos, para crear un organismo funcional. Este organismo funcional debe tener como cualquier otro una cabeza, es decir, un líder que interceda por todos para darles un punto de apoyo y una guía a seguir, y así evitarles el temor a la incertidumbre que produce tomar decisiones. Es así como se forma el Estado.

El Estado surge, con el supuesto objetivo de proteger al individuo de los peligros inminentes que trae consigo la naturaleza del mundo, y esto lo logra en gran parte, hoy ya no es el hombre el que le teme al león, sino al revés, pero aun así, hay un peligro (o mejor dicho, un suceso) del cual no nos puede proteger ni la más avanzada tecnología ni la mejor organizada sociedad, esta es la muerte, pero bien, ya dije anteriormente que más que protegernos, la sociedad nos distrae, pues sin la percepción de que algo sea una amenaza, esta deja de serlo, esa es la magia de la sociedad, que ha logrado convertir a la muerte, aun hoy, en algo casi aceptable (si bien no deseado) “…las sociedades humanas funcionan siempre como máquinas de inmortalidad, a las que nos «enchufamos» los individuos para recibir descargas simbólicas vitalizantes que nos permitan combatir la amenaza innegable de la muerte”…(Savater, F Política para Amador. 1993)

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