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Teoría General Del Desarrollo Psicológico Del Niño


Enviado por   •  31 de Mayo de 2014  •  3.406 Palabras (14 Páginas)  •  295 Visitas

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TEORÍA GENERAL DEL DESARROLLO PSICOLÓGICO DEL NIÑO.

En el proceso de estudio de un individuo en cuanto a su personalidad, sus motivaciones, aptitudes, actitud frente a la vida, situación actual, modalidad de relación con la familia y la comunidad, la psicología del desarrollo ofrece como instrumento el estudio de los acontecimientos de la vida del sujeto desde las épocas más tempranas, y como estos acontecimientos repercuten influyendo en la formación de su personalidad. Los factores que han de influir en el desarrollo empiezan a surgir aun antes de que el individuo sea concebido; y no nos referimos solamente a la personalidad y madurez de los padres, sino también a las circunstancias que determinan que el embarazo es esperado, deseado, no deseado, repudiado, o vehementemente anhelado.

El estado emocional de la madre en cada uno de estos casos influirá definitivamente el destino del producto a través de las actitudes que los padres adoptaran hacia su hijo. No sabemos aún como estos estados emocionales afectaran directamente al feto en el útero. En el pasado se llegó a afirmar que dichas emociones no podrían afectar directamente al feto, ya que no existen conexiones neurológicas entre la madre y este. Recientemente, gracias a los avances en la endocrinología y la bioquímica de las emociones, la pregunta de que si las emociones de la madre afecta al feto ha cobrado nuevo interés y creado fascinantes áreas para las investigación.

Las actitudes de los padres hacia el producto son poco favorables si el embarazo se produce en una mujer soltera quien el producto viene a trastornar todos sus planes y ambiente social, o si se produce en una madre que ya tiene varios hijos y este producto viene solo a arruinar su situación económica. La situación es diferente si hay un marido que provea a la mujer con recursos externos durante el embarazo. Estas circunstancias van a producir mayor o menor grado una actitud de rechazo por parte de los padres que, de no ser tan extrema que culmine en el aborto, influirá en la vida del niño en el futuro así como su confianza básica en sí mismo y la precepción de la aceptación de los demás será permeada por ese rechazo inicial. Cuando el embarazo ha sido vehementemente anhelad, ya sea por qué ocurre tardíamente o porque ha sido precedido por varios abortos, la actitud de los padres también será peculiar: el embarazo se tiñe por la preocupación o miedo a perder el producto, que se transforma en “producto importante”.

Más tarde la actitud de la familia es sobreprotección al niño, al que se ve como delicado, frágil, débil y, consecuentemente así es como se le hace sentir y permear su relación con otros niños, sus actividades escolares y, posteriormente, su vida adulta. Las actitudes de sobreprotección y permisividad en estos casos, afectan el desarrollo de personalidad del niño, que desarrolla tendencias específicas y defectos de conducta que afectan a la socialización y aprendizaje escolar, sumándose así otros factores de alteración posterior. Otros antecedentes a señalar se encuentran en relación con la existencia de daño cerebral y de otras alteraciones embriológicas, ya sea a nivel anatómico funcional: desnutriciones feta, infecciones virales durante el primer trimestre del embarazo, la utilización de medicamentos, tales como preparados hormonales, antibióticos, tranquilizantes, etc., algunos de los cuales sabemos que tienen efectos nocivos en el producto y otros se sospecha o se tiene posibles evidencias incipientes. Otras circunstancias a tomar en cuenta son las enfermedades infecciosas durante el embarazo, en especial de las venéreas y, en general, toda enfermedad o traumatismo que haya requerido hospitalización o no, pero que haya sometido a la madre a tenciones o debilitamiento físico o emocional.

Las circunstancias que rodean al parto también son importantes para el futuro del aparato mental, y su conocimiento es trascendental para la comprensión integradora del aparato psicológico del sujeto cuyo desarrollo pretendemos estudiar. En el trabajo de parto prolongado, u otros antecedentes que puedan sugerir que haya habido hipoxia, nos hace comprender en no pocos casos el origen de la disfunción cerebral o retraso mental de un paciente: parto traumático, o utilización de fórceps, maniobras traumáticas, cesáreas, parto gemelar, etc. ha ido apareciendo evidencia que parece indicar que el cambio repentino de presión producida por cesárea puede tener efectos nocivos en el sistema nervioso central del producto. La utilización de anestesia general aparece como antecedente de importancias en algunos casos de daño cerebral mínimo y algunos investigadores partidarios del parto natural o psicoprofiláctico pretende comprobar que a través de ejercicios respiratorios la parturienta aumenta la concentración del oxígeno que llega al feto, a la vez que disminuye o controlo los dolores del parto.

La mujer que considere un parto como un logro, contrasta en su actitud con aquellas a quien la anestesia hizo permanecer ausente. Tenemos la convicción de que estas diferencias contribuyen diferentes actitudes de la madre hacia el niño: algunas madres durante el parto verbalizan vehementemente su rechazo hacia el producto y hacia el marido. Posiblemente el rechazo no tenga origen en el parto, pero la experiencia del parto si podría modificar la actitud que la madre va a tener hacia su hijo en el futuro inmediato, aunque la principal causa del rechazo se derive del repudio que algunas madres presentan hacia su condición de mujeres, tanto en lo biológico como en lo social. Al interrogar a los padres sobre la historia del nacimiento de un niño, podemos explorar datos que nos dan ideas sobre la actitud que tuvieron hacia el nacimiento de este; por ejemplo, exploramos cual fue la reacción de la madre y del padre la primera vez que vieron al niño, que les pareció, que emociones expresaron, en donde estaba el padre en el momento del nacimiento, etc. Las primeras semanas de la vida nos parece suma mente importantes para el desarrollo, ya que consideramos que esta etapa de la vida en donde el aparato psicológico es más frágil, puesto que con el equipo que cuenta es incipiente.

El recién nacido requiere de constante atención y gratificación y experimenta aun así sensaciones displácetelas para las que no tiene tolerancia en absoluto. Sin embargo, requiere constante atención en las necesidades básicas a su edad sean atendidas por un ser humano que se mantenga disponible. El contacto entre la madre y el bebe es tan importante para la madre como para este; tal vez aún más importante para la madre, de modo que esta mantenga y se desarrolle el estado emocional hacia su hijo que produzca en este una respuesta emocional que asegure el desarrollo óptimo de su

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