El envejecimiento saludable

Introducción.

El envejecimiento saludable es el proceso de fomentar y mantener la capacidad funcional que permite el bienestar en la vejez dónde se va a optimizar las oportunidades de salud participación y seguridad que tiene como fin mejorar la calidad de vida de las personas mayores. Este nos brinda la posibilidad de vivir una vejez plena desarrollando un estilo de vida saludable desde la niñez y manteniéndolo a través de los años. Teniendo una correcta alimentación, actividad física, vivir en un entorno físico y social que sea armonioso y relajado, evitando así el riesgo de padecer enfermedades físicas y mentales donde el único fin es mejorar la calidad de vida a medida que van llegando a la vejez, manteniendo todas sus esferas estables y brindándoles una vida digna e independiente.

Desarrollo.

Al elaborar una respuesta de salud pública al envejecimiento, es importante no solo considerar estrategias que contrarresten las pérdidas asociadas con la edad avanzada, sino también que refuercen la recuperación, la adaptación y el crecimiento psicosocial. Los estados de salud pueden tomar distintas trayectorias típicas, y las necesidades de la persona y las de sus cuidadores pueden variar de manera predecible según la trayectoria de la enfermedad, es necesario evaluar las necesidades de salud de una persona mayor, no solo es importante tener en cuenta las enfermedades concretas que puede presentar, sino también cómo estas interactúan con el entorno y repercuten en las trayectorias de funcionamiento. Los sistemas de salud que tienen en cuenta las necesidades complejas de la vejez y se ocupan de ellas de una manera integrada son más eficaces, estos enfoques basados en el funcionamiento también pueden ser útiles para elaborar una respuesta de salud pública al envejecimiento, el nivel de funcionalidad se determina no solo mediante la evaluación de las capacidades físicas y mentales, sino también por las interacciones que tenemos con los entornos que habitamos a lo largo de la vida. En este informe se considera la salud como un atributo fundamental e integral que permite a las personas mayores conseguir las cosas que creen importantes, se la entiende en un sentido dinámico basado en el concepto de resiliencia.

Esta capacidad de adaptación marca la diferencia entre personas, la resiliencia convierte en un objetivo potencial para las políticas de salud pública. Por lo tanto, al plantear la meta de una estrategia de salud pública sobre el envejecimiento, la OMS considera el Envejecimiento Saludable en un sentido amplio, basado en el curso de la vida, en perspectivas funcionales y mantener la capacidad funcional que permite el bienestar en la vejez. La capacidad funcional comprende los atributos relacionados con la salud que permiten a una persona ser y hacer lo que es importante para ella. En las distintas trayectorias,

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