EL CINE Y LOS ESTEREOTIPOS FEMENINOS
Enviado por brandonvlds • 17 de Febrero de 2016 • Trabajos • 1.179 Palabras (5 Páginas) • 250 Visitas
EL CINE Y LOS ESTEREOTIPOS FEMENINOS
En el presente ensayo se aborda el tema de los estereotipos femeninos que se han marcado y divulgado en el cine por décadas enteras, enfocando principalmente los personajes clásicos de la mujer ideal, citando diversas opiniones que llevan a las diferentes tendencias marcadas por iconos del cine y que han sido utilizadas como una marca esencial para la mujer actual.
Para Suárez Villegas (2007), un estereotipo es la imagen creada y mantenida de algo en particular, creando así una idea premeditada acerca del tema u objeto a evaluar, que establece una referencia o impacto en la sociedad.
La investigación sobre la mujer en los medios, surge marcando fuertemente con un tinte reivindicativo y critico las imágenes estereotipadas de la mujer siempre buena, pasiva, obediente, tierna, maternal, amable, comprensiva, discreta, delicada, dependiente y sin iniciativa, temerosa, atractiva físicamente, siempre joven, y con apoyo incondicional para el hombre. También con la afectividad, dependencia y preocupación por los demás.
“La imagen no se limita a reflejar lo que somos, también nos configura”. (Aguilar, P., 2009, p.6).
Al paso de los años, la imagen dócil y servil de la mujer ha sido renovada, buscando un nuevo enfoque que lleva a la mujer a un estándar de belleza, la mujer se ha convertido en un símbolo, ya sea sexual o de independencia laboral, la dama sumisa que necesitaba de la protección de un hombre ah quedado en el pasado, la mujer deja de ser una presa para convertirse en depredadora.
Pero, ¿cuándo es que la mujer toma un rasgo distinto en el cine?
“En los años 50, la máxima meta que debía alcanzar la mujer era aquella de casarse, tener hijos y vivir felizmente en una casa agradable y con el mismo hombre hasta el final de la vida. El matrimonio, como las joyas, era para siempre. Y aunque se consideraba bien que las chicas estudiaran, o incluso que disfrutaran brevemente de una carrera profesional, un vistazo a las revistas femeninas de los años 50 bastaba para constatar que las prioridades eran definitivamente el hogar, estar guapa y guisarle buenas comidas a marido (…). Por lo demás, había también un nuevo tipo de mujer que se iba incorporando al acerbo cultural del pueblo: la nueva mujer profesional. Segura de sí misma, casi inexpugnable, su atractivo era tan prestigioso y duro que parecía intimidante y eficaz en grado sumo. Representada como un ser frío y hermoso en fotos y películas, resultaba socialmente aceptable porque se entendía que estaba dispuesta a renunciar a todo, en cuanto encontrara al hombre de su vida”. (Mulvey & Richards, 1998).
Dice Belmonte Jiménez (2011), es entonces cuando llega al estrellato Norma Jean, que después sería conocida como Marilyn Monroe, la mujer que revitaliza al cine, se convierte en el mayor símbolo sexual de la historia y consigue la admiración de todos a su alrededor, Marilyn logra estallar la bomba de la censura y captar la atención de hombres y mujeres, con películas como “Diamond´s are the girl´s best friend” (Los caballeros las prefieren rubias), con ello transforma a la estructura de la doncella dulce, pura y maternal, a un aspecto mercantilizado de la mujer, deja de ser un objeto de amabilidad y consigue llevar a la dama a la imagen más comercial, logrando así convertirse en la mujer más admirada por las mujeres y amada por los hombres, llevando al estándar más alto de la belleza femenina.
Al convertirse Monroe en el símbolo sexual más aclamado del momento, nacen nuevas estrellas, como, Audrey Hepburn, Elizabeth Taylor, Grace Kelly, entre otras, que mantienen la imagen creada por Marilyn, manteniendo el estándar de belleza femenina en la cúspide de la cadena cinematográfica durante un tiempo considerable.
La imagen sexual de la mujer, la obsesión por las joyas y la capacidad femenina para obtener lo que deseaba, no parecía ser suficiente para conseguir el impacto necesario en las damas conforme avanzaba el tiempo, es entonces cuando surge “Pretty Woman” (Mujer bonita), y con ella una nueva estrella, Julia Roberts, que de igual manera conserva el estándar de belleza en lo más alto, pero a diferencia de las películas protagonizadas por las actrices que le precedían, los diamantes y la belleza dejan de ser una prioridad, es aquí cuando se utiliza el aspecto más fundamental y remasterizado de todos, el amor, a pesar de las dificultades y todo el proceso que tiene la película, cuyo tema central es la prostitución de la protagonista, logra superar todas las adversidades, así consigue encontrar al hombre de su vida y ser “feliz por siempre”.
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