El grupo Panda

Recapitulemos: Panda (o Pxndx, como prefieran) empieza su historia en Monterrey, Nuevo León, en 1997 con un demo al que siguió Arroz con leche en el 2001. Después La revancha del príncipe charro, Para ti con desprecio, Amantes sunt amentes y Sinfonía soledad, este último del 2007 es un recopilatorio de los conciertos que el grupo dio en el Auditorio Nacional.

Ahora bien, además del éxito que han tenido, estuvieron involucrados en una diatriba a propósito de sus composiciones. Es decir, los acusaron de plagiar letras o riffs de grupos como My Chemical Romance, Green Day o Fall out boy, por mencionar algunos. Blogs, programas de radio, revistas y foros se ocuparon ampliamente de discutir esto.

No obstante, dudo que ésta sea la razón por la que mucha de la gente odie a Pxndx. Sin conceder el plagio, aunque sí las coincidencias que son inobjetables, se podría pensar en las similitudes entre las trompetas de Jerry Rivera de “Amores como el nuestro” y “Hips don’t lie” de Shakira, o en el parecido de “My sweet lord” de Harrison y “He’s so fine” de The Chiffons, como puede haber muchísimos otros ejemplos. Y dudo que alguien vilipendie tanto al ex Beatle o a la inmaculada Shakira como a estos músicos regiomontanos.

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Entonces, si no es el plagio, que incluso se puede argumentar que una gran mayoría de los escuchas no se darían cuenta normalmente, ¿qué es? ¿El éxito abrumador de la banda? El 25 y 26 de noviembre llenan el Auditorio Nacional. Además, han tenido dos participaciones en el Vive Latino con muy buena respuesta y sin que pudieran cumplir sus detractores la promesa de bajarlos a punta de madrazos y mentadas. (Al fin y al cabo, no duelen tanto). Han recibido diversos premios en canales especializados de música, revistas, público; ventas que superan los cientos de miles; conciertos… Pero tampoco creo que sea la razón del encono. Al fin y al cabo Zoé y Café Tacuba son grupos tanto o más exitosos y no tienen ese anatema del desprecio “rockero” encima.

Habría que pensar en una razón más, su música está identificada con el movimiento emo, especialmente en sus últimos dos discos. Y en la situación social mexicana de los últimos meses creció la cobertura del pique que esta “tribu” sostenía con darkies, punks, etc. Si esta fuera la razón me parecería la más absurda. Además, creo que no es tan simple. Blink 182, Green Day o los ya mencionados MCR también convergen con la emo-realidad y no tienen un rechazo tan marcado.

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