ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

CONVERGENCIA

aalopez12319 de Junio de 2014

3.298 Palabras (14 Páginas)378 Visitas

Página 1 de 14

Convergencia, Interdependencia y divergencia

A largo plazo el crecimiento de las economías de mercados emergentes y en desarrollo no depende tanto de las economías avanzadas, pero a corto plazo van de la mano

Kemal Dervis¸

La mayoría de la gente siente que vive en un mundo globalizado integrado. Pero si examinamos la historia reciente, .que podemos decir realmente sobre la naturaleza de esa integración? La economía mundial parece estar caracterizada hoy por tres tendencias fundamentales.

Tres tendencias fundamentales

La primera tendencia es una nueva convergencia. Al recibir el Premio Nobel en 1979, Sir Arthur Lewis, el fallecido economista experto en desarrollo, afirmó: “En los 100 últimos años, la tasa de crecimiento del producto del mundo en desarrollo dependió de la tasa de crecimiento del producto del mundo desarrollado.

Cuando el mundo desarrollado crece rápido, el mundo en desarrollo crece rápido; cuando el mundo desarrollado se desacelera, el mundo en desarrollo se desacelera. ¿Es inevitable este vinculo?”

Los datos recientes llevan a pensar que, si bien ese vinculo aun existe, hoy es importante intuir entre tendencias a largo plazo y movimientos cíclicos.

Desde 1990 aproximadamente, el crecimiento del ingreso per cápita de las economías emergentes y en desarrollo se ha acelerado de manera sostenible y es sustancialmente superior al de las economías avanzadas. Esto representa un profundo cambio estructural de la dinámica de la economía mundial.

Una segunda característica fundamental de la economía mundial es la interdependencia cíclica. Si bien en los últimos 20 años las tasas de crecimiento tendencial a largo plazo de las economías emergentes y en desarrollo se han “desacoplado” de las registradas en las economías avanzadas, eso no significa que los movimientos cíclicos en torno a la tendencia se hayan desvinculado.

La nueva convergencia y la mayor interdependencia coinciden con una tercera tendencia, relacionada con la distribución del ingreso. En muchos países, la desigualdad en la distribución del ingreso se ha acentuado, y en particular ha aumentado drásticamente la proporción del ingreso que captan quienes más ganan.

En Estados Unidos, el 1% mas acaudalado prácticamente triplico su participación en el ingreso en las tres últimas décadas, y hoy dicha participación representa alrededor del 20% del ingreso nacional total (Alvarado et al., 2012). Al mismo tiempo, aunque la nueva convergencia ha acortado la distancia entre las economías avanzadas y las economías en desarrollo si se las toma como dos agregados, en algunos de los países mas pobres hay millones de personas cuyo ingreso se ha mantenido prácticamente estancado durante mas de un siglo (véase “Mas o menos”, F&D, septiembre de 2011). Estos dos hechos han generado una creciente divergencia entre la gente más rica del mundo y la más pobre, a pesar de la amplia convergencia del ingreso promedio.

Nueva convergencia

La economía mundial ingreso en una nueva era de convergencia alrededor de 1990, cuando el promedio de ingresos per cápita de las economías de mercados emergentes y en desarrollo tomadas en conjunto comenzó a crecer mucho más rápido que en las economías avanzadas. La marcada división entre países ricos y pobres que caracterizo al mundo desde la revolución industrial de comienzos del siglo XIX se está desdibujando. Un interrogante fundamental es si esta nueva convergencia tiene probabilidades de continuar y conducir a una reestructuración fundamental de la economía mundial a lo largo de la próxima década, aproximadamente.

La revolución industrial y el colonialismo dieron lugar a una gran divergencia (Maddison, 2007). Entre comienzos del siglo XIX y mediados del siglo XX, la brecha entre el promedio de ingreso per cápita del “norte”, mas prospero e industrial, y del “sur”, menos desarrollado, se incremento de un factor de 3 o 4 a un factor de 20 o mas (Milanovic, 2012). Esa divergencia se atenuó después de la Segunda Guerra Mundial, cuando el colonialismo llego a su fin, pero, en promedio, la brecha relativa de ingresos se mantuvo estable entre 1950 y 1990.

Durante las dos últimas décadas, sin embargo, el ingreso per cápitas de las economías emergentes y en desarrollo tomadas en su conjunto ha crecido a un ritmo que casi triplica al de las economías avanzadas, a pesar de la crisis asiática de 1997–98.

Las economías emergentes y en desarrollo están gozando de un ritmo más rápido de crecimiento a largo plazo que las economías avanzadas, especialmente desde finales del siglo pasado.

Crecimiento y ciclos:

Durante las últimas tres décadas, las economías avanzadas, emergentes y en desarrollo han registrado un crecimiento importante, pero también han experimentado fuertes movimientos cíclicos.

En los mercados emergentes, el crecimiento se acelero en la década de 1990, y en los países menos desarrollados, alrededor de comienzos del siglo.

El desacople de la tasa de crecimiento tendencial de los países de mercados emergentes observada a partir de la década de 1990, y en los países en desarrollo durante la última década, es muy notable.

Esta nueva convergencia puede atribuirse en gran parte a tres factores.

Primero, la globalización.

Alimentada por vínculos comerciales más fuertes y mayor inversión extranjera directa— facilita la convergencia del crecimiento porque los países rezagados pueden importar y adaptar tecnología y conocimientos técnicos. Es mucho más fácil adaptar tecnologías que inventarlas.

Segundo, la transición demográfica.

La experimentaron la mayoría de las economías emergentes y muchas economías en desarrollo al desacelerarse el crecimiento de la población se promovió una mayor intensidad del capital y acelero el crecimiento per cápita. Al mismo tiempo, muchos de estos países vivieron una era dorada cuando la proporción entre la población económicamente activa y la población total toco máximos. Entre tanto, la proporción de personas de la tercera edad creció significativamente en las economías avanzadas, particularmente en Europa y Japon.

Tercera, la mayor proporción del ingreso invertido.

Por los países emergentes y en desarrollo: 27,0% del PIB durante la última década, en comparación con 20,5% en las economías avanzadas. La inversión no solo incrementa la productividad de la mano de obra al proporcionar mas capital para trabajar, sino que también puede impulsar una mayor productividad total de los factores —la productividad conjunta del capital y la mano de obra— al incorporar nuevos conocimientos y técnicas de producción y facilitar la transición desde sectores de escasa productividad como la agricultura hacia sectores de gran productividad como la manufactura, lo cual acelera la convergencia de las tasas de crecimiento.

Este tercer factor —mayores tasas de inversión— adquiere particular relevancia en Asia, sobre todo en China, aunque no solo allí. Las tasas de crecimiento tendencial aumentaron antes y en mayor medida en las economías asiáticas que en otras economías emergentes.

Continuara esta convergencia? Las proyecciones siempre son riesgosas, y algunos de los factores que la sustentaron durante los 20 últimos años podrían perder ímpetu pronto. Gran parte del crecimiento de la manufactura necesario para la convergencia ya ha tenido lugar, y la reasignación de la mano de obra desde sectores de baja productividad hacia los de alta productividad también ha agotado parte de su potencial; en algunos países, ni siquiera la rápida expansión de la actividad manufacturera ha creado mucho empleo, con lo cual ha aumentado la proporción de mano de obra ocupada en actividades de baja productividad (Rodrik, 2011).

Pero la convergencia a la cual nos referimos es la convergencia agregada de las economías emergentes y en desarrollo, y no un análisis en el que se asigna el mismo peso a países muy pequeños, que a países como China, India o Indonesia. A nivel agregado, existe un margen sustancial para el crecimiento de convergencia durante los próximos 10 a 15 años como mínimo. La reasignación de la mano de obra de sectores de baja a alta productividad quizá se desacelere, pero es probable que su reasignación de empresas de baja a alta productividad continúe a un ritmo solido, incluso dentro de subsectores definidos con criterios estrechos. Los sectores de los servicios, la energía y la infraestructura también podrían ofrecer un gran potencial para la adaptación de nuevas tecnologías. Y con la excepción notable de China, los factores demográficos favorecerán a las economías emergentes y en desarrollo mas que a los “viejos” países ricos durante mas de una década.

Por último, el nivel tan elevado de los coeficientes de deuda de la mayoría de las economías avanzadas restringirá sus politicas macroeconomicas y desalentara la inversión.

Esta convergencia ininterrumpida, aunque quizás algo mas lenta, transformara profundamente la economía mundial. Para 2025–30, el ingreso per cápita de muchas economías de mercados emergentes estará mucho mas cerca de los niveles de las economías avanzadas, como resultado tanto de los diferenciales de crecimiento como de la apreciación real que probablemente experimenten sus monedas.

La economía china indudablemente llegara a ser la mas grande del mundo, y las de Brasil e India serán mucho mas grandes que las del Reino Unido

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (22 Kb)
Leer 13 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com