El proceso de escritura

IX . El proceso de escritura

Actividad: Se leerá el siguiente texto de forma individual, subrayando lo que considere más relevante. Posteriormente se compartirá con sus compañeros en equipos de 5 integrantes, para finalizar se comentará con el resto del grupo.

Introducción: “Desde la más remota antigüedad, el hombre ha utilizado la lengua escrita, para que a través del tiempo y del espacio, poder dar testimonio de su paso por la tierra y comunicar a los demás sus hechos, experiencias, conocimientos, ideas y opiniones, Pues bien la base fundamental, de cualquier acto de comunicación es la buena redacción, que consiste en expresarse por escrito, con exactitud para decir sólo lo que se pretende comunicar, con claridad para evitar interpretaciones erróneas; con concisión, sin rodeos, ni palabras superfluas, y con originalidad, para dar a los escritos un carácter personal.” Éstas últimas se refieren a las características de la buena redacción.

“Conocemos cosas, lugares, personas, etc. y tenemos una imagen mental de ellos; podemos formarnos un concepto, opinión o juicio sobre los mismos; somos capaces de imaginar, disponer, inventar y trazar cosas o tener la intención de hacerlas. . . Es decir, tenemos ideas que podemos desarrollar por escrito. Sin embargo, no todos somos capaces de hacerlo bien, porque elegir una idea interesante y saber desarrollarla, distribuyendo los pensamientos y las palabras en el discurso para que los lectores la comprendan son facultades que dependen de la imaginación de cada uno de nosotros para extraer ideas del recuerdo, la experiencia y el saber; de su capacidad lógica para valorarlas, desechar las que son útiles o interesantes y ordenar las partes del discurso en función del punto de vista en que se afronte, los efectos que se desean producir en los receptores del mismo y la propia naturaleza del escrito y de su cultura lingüística suficiente para elegir y utilizar la mejor forma de expresar lo que se pretende, haciendo un uso correcto de la lengua”

“Aunque no todas las personas poseemos esas capacidades en igual grado, existen técnicas de trabajo que ayudan a acrecentarlas y perfeccionarlas, al tiempo que son poderosos auxiliares que facilitan la práctica de la redacción. El que escribe, para comunicar algo a los demás con corrección y belleza expresiva, debe hacerlo recorriendo las siguientes etapas de un proceso normal de escritura”, Estas etapas que nos ayudan a corregir y poco a poco darle belleza al texto se llaman momentos de la redacción y son las siguientes:

a) PLANEACIÓN. Consiste en plantarse y dar respuesta a tres preguntas fundamentales: 1. Qué pretendo comunicar, es decir, sobre cuál tema quiero redactar y que idea precisa deseo transmitir, 2. Cuál es la intención comunicativa, es decir, que pretendo informar, enseñar, deleitar, persuadir o conmover con esa idea que quiero transmitir y 3. Cómo voy a expresarla, esto es cómo la voy a desarrollar y plasmar con propiedad y corrección. Cuando se tienen respuestas claras a las preguntas anteriores, antes de empezar a escribir para desarrollar el tema, es necesario estudiarlo detenidamente para establecer criterios, ordenar las ideas, buscar datos y ejemplos para defenderlas, dar razones, establecer ideas contrastantes y tratar de convencer a los lectores y para alcanzar estos objetivos se recomienda lo siguiente: 1. Anotar el tema y todo lo que se conoce del mismo, 2. Buscar

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