Emprendimiento E Innovacion
SANLOLO091 de Septiembre de 2013
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EMPRENDIMIENTO E INNOVACIÓN EN COLOMBIA:
¿QUÉ NOS ESTÁ HACIENDO FALTA?
El impacto del emprendimiento y la innovación sobre los negocios avanza de una manera
tan rápida y tiene un alcance tan vasto, que resulta difícil entender cómo actuar para lograr
los resultados que un país como Colombia busca en este frente. La evidencia internacional
confirma que los niveles más altos de desarrollo corresponden a países que muestran
también altos niveles de emprendimiento innovador en sus economías. Lo que está menos
claro es cómo pueden llegar a ese estado las naciones que aún están lejos de él.
El problema es complejo, pues el emprendimiento y la innovación se realizan realmente en
tres niveles: el nivel macro del país y el entorno, el nivel intermedio de las empresas y el
nivel básico de los individuos. El emprendimiento innovador es una actitud en las personas,
una cultura y una capacidad en las empresas y una característica del entorno competitivo en
los países. Estos tres niveles tienen que funcionar al mismo tiempo, pues cada uno de ellos
se alimenta de los demás. Para lograr una sociedad más emprendedora, es necesario activar
el potencial de las personas, las empresas y el contexto macro.
La abundancia de implicaciones y conexiones entre estas variables hace que sea difícil
pasar de las consideraciones analíticas a una estrategia y al despliegue de acciones que sean
efectivas en los tres campos. El emprendimiento es una actitud básica hacia la
identificación de oportunidades y la toma de riesgos por parte de los individuos, en
organizaciones de todos los tamaños. La innovación es el desarrollo de nuevos productos,
servicios y modelos de negocio que generen valor para las organizaciones y está
relacionada con el crecimiento económico, el tamaño y la dinámica de los mercados, la
estrategia de las empresas, la identificación de necesidades latentes en los consumidores, la
generación y adaptación de conocimiento y tecnología, la capacidad de los individuos para
crear y actuar en grupos interdisciplinarios y la gestión de procesos para mantener un flujo
de nuevos productos y servicios, por mencionar solamente algunos temas. El espacio que
estos conceptos abarcan es amplio y, cuando se introducen los tres nivels de análisis
(macro, empresas e individuos), las combinaciones posibles se multiplican.
El presente documento desarrolla un marco conceptual que permite visualizar cómo
interactúan las principales variables que determinan la innovación en los tres niveles del
contexto macro, las organizaciones y los individuos. Se presenta también información sobre
el caso colombiano respecto los tres niveles de análisis, con el objetivo de sintetizar un
primer diagnóstico de la situación en el país en esta materia e identificar unas prioridades
para la acción.
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Emprendimiento, innovación y capitalismo emprendedor
Un primer paso consiste en aclarar los términos. La innovación es el proceso deliberado
que permite el desarrollo de nuevos productos, servicios y modelos de negocios en las
organizaciones. Este proceso debe llevar a resultados concretos y medibles y está asociado
al desarrollo de un espíritu emprendedor en los individuos, es decir, a una actitud hacia el
trabajo que se caracteriza por la permanente búsqueda de oportunidades y por la capacidad
para articular recursos humanos y físicos con el objetivo de aprovecharlas.
Desde esta perspectiva, si bien la innovación está siempre está asociada con el
emprendimiento, es posible tener emprendimiento sin innovación. Así, las pequeñas o
grandes empresas que no tienen vocación de innovación están por fuera del ámbito que se
pretende examinar aquí, aunque hayan sido creadas por emprendedores exitosos. Y se debe
anotar que también es posible tener innovación sin creación de empresas nuevas, pues el
espíritu emprendedor y la innovación pueden surgir a partir de empresas grandes, que
tienen décadas de historia.
Esta noción de “emprendimiento innovador”, o “innovación emprendedora”, tiene una
importancia extraordinaria para en la economía moderna. En las últimas décadas ha
ocurrido una transformación básica en la economía mundial, que ha pasado desde el
capitalismo administrativo al capitalismo emprendedor (Acs & Armington, 2006;
Audrestch et al, 2006; Baumol et al, 2007), donde la noción de emprendimiento ocupa un
lugar central como motor del desarrollo económico. Dentro de este planteamiento, la
estructura de las firmas se hace más dinámica, las instituciones burocráticas son
reemplazadas por soluciones emprendedoras y de mercado y la innovación es buscada
como un objetivo explícito de negocio, por su capacidad para transformar las reglas del
juego (Acs & Serv, 2007).
Esta perspectiva tiene implicaciones de fondo para la política pública y la estrategia
empresarial. Por ejemplo, aquí no tiene sentido hablar de una “política pública para el
emprendimiento y la innovación”, sino de cómo se toman las decisiones de política en una
economía del emprendimiento y la innovación. De la misma manera, en las empresas no se
debería hablar de “estrategia para la innovación”, sino de cómo se define y se ejecuta la
estrategia empresarial en una economía del emprendimiento y la innovación. En otras
palabras, el emprendimiento y la innovación hacen parte de las nuevas reglas del juego en
la economía del presente siglo. No existe la opción de no participar en este juego, la única
decisión se refiere a cómo participar de la mejor manera posible.
Tres niveles
La operación de la economía del emprendimiento y la innovación se puede entender mejor
al considerar tres niveles diferentes y las interacciones entre ellos: el nivel macro, el nivel
de las organizaciones y el nivel de los individuos. Estas interacciones se pueden apreciar en
el Gráfico 1.
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En este modelo, las variables en cada uno de los niveles identifican resultados acumulados.
Por su parte, las interrelaciones identifican variables de decisión, que permiten actuar para
cambiar los resultados acumulados en cada uno de los niveles.
En el nivel macroeconómico se identifican los elementos centrales que determinan el
entorno que enfrentan las empresas y los individuos para ejecutar su actividad de
innovación emprendedora. Las variables centrales en este nivel son:
¾ El grado de desarrollo económico. Está demostrado que los países que tienen los
niveles más altos de producto per capita tienen también los mayores índices de
emprendimiento innovador en su territorio (GEM, 2007).
¾ El tamaño de los mercados. Cuanto mayor es el tamaño del mercado para las
empresas de un país, mayor es la probabilidad de tener empresas competitivas
(Global Competitiveness Report, 2007).
¾ La intensidad de la competencia. Cuanto más libre sea el entorno de la competencia
y mayores garantías tengan las empresas pequeñas frente a las grandes, mayor será
la actividad innovadora (Porter, XXX; Wennekers, 2006).
¾ La prevalencia de la tecnología. Mientras más amplio sea el uso de tecnologías
modernas, en particular a las tecnologías de información y comunicaciones, mayor
será el ritmo de la innovación (Global Competitiveness Report, 2007)
¾ La diversidad demográfica. La composición demográfica de los países (en términos
de edad, género, educación y migración) tiene incidencia sobre el desempeño
innovador. Por ejemplo, mientras más abierto sea un país a los flujos migratorios,
especialmente los de poblaciones con altos niveles de educación, mayor será el
desarrollo de la innovación emprendedora (Ewing Kauffman Foundation, 2007).
En el nivel de las organizaciones, las variables centrales son las siguientes (Grant, 2008):
¾ La estrategia empresarial. El establecimiento de una misión de largo plazo para la
organización, la identificación de un propósito central y la definición de un
compromiso con una estrategia específica son condiciones indispensables para que
una empresa logre resultados sostenidos en innovación.
¾ Recursos y capacidades. Las organizaciones deben asegurar los recursos y
capacidades necesarios para que la capacidad innovadora sea una ventaja
competitiva sostenible a lo largo del tiempo.
¾ Cultura organizacional. La innovación emprendedora solamente puede darse en
organizaciones que desarrollen una cultura organizacional abierta, con una jerarquía
plana, equipos multidisciplinarios, una actitud de aceptación del error (siempre y
cuando éste contribuya al aprendizaje) y un compromiso explícito de la dirección de
la empresa hacia la innovación.
¾ Gobierno corporativo. La innovación tiene mayores probabilidades de ocurrir
cuando las decisiones están alineadas con los intereses de largo plazo de la
organización y no con las motivaciones de corto plazo de los individuos (Ewing
Kauffman Foundation, 2007).
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Gráfico 1
Emprendimiento
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