Los Amos Del Mundo

LOS AMOS DEL MUNDO

¿QUIÉN MANDA AQUÍ?

El primer capítulo del libro LOS AMOS DEL MUNDO, de Vicenç Navarro y Juan Torres, titulado ¿Quién manda aquí? trata sobre quiénes son los que mandan de verdad e influyen en todas las decisiones políticas, económicas y sociales de los países. Por otro lado, los autores son críticos con las entidades bancarias y las grandes empresas ya que esta son las que más poder tienen en el ámbito político y económico del que realmente deberían tener.

El capítulo comienza hablando sobre la opinión y el concepto que tienen los ciudadanos del poder, y que en muchas ocasiones esta opinión es incorrecta, porque hablan de que un partido político o un presidente de un país llega al poder en un momento determinado, cuándo deberían decir que ha llegado al gobierno ya que realmente el poder reside en el pueblo, o al menos eso es lo que establece un estado democrático.

Después, nos explica cómo son verdaderamente las democracias en este mundo. Con esto quieren decir que aunque en un país haya democracia, realmente el poder no reside en el pueblo, ni siquiera en el gobierno, realmente se encuentra en las empresas grandes y en los bancos más poderosos. Por ello, cuando el gobierno ha de redactar decretos o leyes u otro tipo de normas importantes, siempre están detrás estas entidades, presionando para que las decisiones que se tomen sean de su total beneficio y muy probablemente los trabajadores salgan muy perjudicados.

También es bastante crítico con la Unión Europea, sobre todo con el trato que está recibiendo Grecia, y que posiblemente también recibirá España. Dicho trato es el que recibe un país después del rescate económico de la UE y esta manda autoridades extranjeras a ese país para que controlen al Gobierno y así en un futuro puedan devolver el crédito.

Más tarde habla de cómo se impuso la política neoliberal, o también conocida como capitalista y que ahora tenemos en Europa, en los pocos países que eran comunistas de América Latina. Primero se daba un golpe de Estado militar y después estos países servían como ejemplo de cómo se debía manejar el país para llevarlo a una economía capitalista. Esta nueva política daba más poder aún a los poderosos y quitaba poder y privilegios a los trabajadores o mejor dicho “hacia más ricos a los ricos y más pobres a los pobres”. Esta nueva forma de política restringe la democracia y aumenta el poder a las grandes entidades del ámbito económico. Esto se consigue con un sistema monetario privado, aumentar la desigualdad social, que crezca la deuda del país (y así los bancos podrán hacer negocios), y por último que el poder político, económico y los medios de comunicación se unan para aumentar el poder mediático. Las políticas económicas de las democracias actuales favorecen a las grandes empresas y perjudican a los trabajadores, y esto nos lleva a una nueva recesión que lo único “bueno” que aporta es que los grandes empresarios obtengan grandes beneficios.

En EEUU los famosos lobbies, financieros y empresariales (representantes de las grandes empresas o bancos, que presionan a los políticos para que tomen medidas que beneficien a sus entidades), presionaron a los políticos para que tomaran decisiones como la desregularización de la banca europea y esto junto a las influencias del mundo empresarial, comenzaron a hundir el que hasta hace poco era el Estado de bienestar y también comenzó a la actual crisis.

La gran concentración del capital en estas grandes entidades conduce a que tengan un inmenso poder, donde no solo pueden manipular los precios de sus productos, sino que además tienen capacidad de manejar grandes sumas de dinero, y por tanto pueden condicionar las decisiones financieras y económicas de un país. Dicho poder pone en jaque a los gobiernos, ya que con solo una amenaza por parte de estas

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