El Surgimiento De La Conciencia Del Hombre

El surgimiento de la conciencia del hombre

La lectura da cuenta de dos apartados que abarcan el tema del surgimiento de la conciencia del hombre.

El primer apartado supone las condiciones del surgimiento de la conciencia, en el que se plantean los criterios de tal existencia.

En primera instancia hay que definir la existencia de un reflejo consciente que es el reflejo de la realidad objetal. En ese sentido Engels citado por Leóntiev afirma que el trabajo fue el que creó conciencia en el hombre, el trabajo trajo consigo el boleto a la evolución del hombre puesto que ejerció influencia en el desarrollo del cerebro y de los órganos de los sentidos, estimulando y desarrollando más al hombre en un nivel anotomofisiologico.

De manera que a nivel general, el eje por el que se desarrolla el tema de la conciencia será bajo el criterio del trabajo.

El trabajo, es el proceso de influencia del hombre sobre la naturaleza, en consecuencia el trabajo proporciona de manera genuina rasgos que encaminan al hombre a relacionarse con sus semejantes, pues solo así se puede relacionar con la naturaleza.

Con lo anterior es importante señalar que el trabajo tiene dos características que favorecen a que el hombre se relaciones con los otros. El primero es el empleo y la preparación de instrumento y el segundo es la actividad conjunta colectiva, estos dos rasgos permiten no solo detectar la existencia de la conciencia sino también a dar cuenta de las relaciones humanas.

El atributo principal del trabajo es ligar a las personas, también mediatiza su comunicación, en ese orden de ideas el hombre actúa sobre la naturaleza, se asocia para actuar en común generando vínculos y relaciones sociales.

Profundizando más sobre el trabajo, es relevante señalar que dicha actividad, supone la existencia del término de la acción, que es el proceso en el que no coincide el objeto de una actividad con el motivo, esto quiere decir que la acción viene siendo un elemento que proporciona el acercamiento hacia un fin donde no se satisface en primera instancia el objeto de la actividad pero si ayuda a que se logra el fin de tal actividad para poder satisfacer la necesidad primordial. En ese sentido a diferencia del animal, las acciones dadas en la actividad del trabajo en el hombre también tienen un carácter biológico instintivo pero la diferencia radica en que en el hombre el proceso de trabajo se guía por una colectividad más elaborada que permite dar cuenta de la existencia de un reflejo psíquico superior al del animal.

Con lo anterior se puede decir que se aborda los criterios más esenciales por los cuales se rigen las condiciones del surgimiento de la conciencia.

El segundo apartado explica el proceso de formación del pensamiento y del lenguaje. Estos dos procesos también se dan por medio del trabajo y del instrumento, donde este último es el intermediario entre el hombre y el objeto de trabajo, es con el que se ejecuta acciones.

El instrumento es un factor que genera conciencia por que el empleo del mismo solo se da en relación con la toma de conciencia de la finalidad de la acción laboral, en consecuencia el generar un instrumento supone una abstracción verdadera y consciente de pensamiento en el que se relaciona el por qué y para que esta hecho un instrumento. Es así como se determina que el instrumento es un objeto social.

El pensamiento es otro elemento que forma parte de la conciencia en el hombre, puesto que es un proceso de reflejo consciente de la realidad que permite vinculaciones y relaciones objetivas que favorecen un racionamiento de objetos que no son alcanzables en primera instancia por la percepción.

A lo sumo, el lenguaje liga la conciencia del hombre y es una necesidad de comunicación que va en pro de las acciones colectivas.

En conclusión se afirma que la relaciones de estos elementos

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