Enamoramiento Ciencia

ENAMORAMIENTO: CONCEPCION CIENTIFICA.

Existen cientos de definiciones románticas que endulzan nuestros oídos acerca del enamoramiento y como nos hace sentir, pero la ciencia también tiene muchas cosas que decir sobre este proceso, a lo mejor no tan seductoras pero no por eso menos importantes.

Según las estadísticas, todos los humanos tenemos la capacidad de enamorarnos hasta 7 veces (*), pero ¿Por qué enamorarnos de cierta persona y no de otra? La psicología nos dice que entre los 5 y 8 años de edad creamos una especia de molde en base a nuestros recuerdos (conscientes o inconscientes) (*rc), a diferencia de esto, la ciencia del enamoramiento es más acertada: “En la cascada de reacciones emocionales hay electricidad (descargas neuronales) y hay química (hormonas y otras sustancias que participan). Ellas son las que hacen que una pasión amorosa descontrole nuestra vida y ellas son las que explican buena parte de los signos del enamoramiento” (rc*). Es decir que cuando creemos que cierta persona es adecuada se dispara como una señal de alarma y nuestro cuerpo parece entrar en una fase de ebullición.

Lo que sucede es esto: nuestro sistema nervioso a través del hipotálamo envía a las glándulas suprarrenales (que se encuentran justo por encima de los riñones) que aumenten la cantidad de algunos neurotransmisores que comunican entre sí las células nerviosas. Un ejemplo es la feniletilamina, un compuesto de las anfetaminas que curiosamente encontramos en el chocolate ¿será por esto que después de una ruptura, acudamos al chocolate?, la feniletilamina, causa la euforia y excitación inicial, a lo que nosotros llamamos las “maripositas en el estomago”

A partir de este momento, ¡ya no hay marcha atrás! “todos los capilares, folículos pilosos y glándulas sudoríparas del cuerpo. El suave músculo intestinal, las glándulas lacrimales, la vejiga y los genitales, el organismo entero está sometido al bombardeo que parte de este arco vibrante de nudos y cuerdas.”(rc*).

Comenzando el proceso, se segregan cantidades grandes de dopamina que es la que se encarga de hacernos querer repetir aquello nos da placer, como estar más tiempo con esa persona, besarla y también nos produce esa euforia y adrenalina que sentimos cuando vemos a esa persona o recibimos un mensaje de texto de él o ella además de disminuir el apetito y dar vitalidad. Seguida a esta se dispara la oxitocina y la vasopresina, que son péptidos, esto es, sustancias formadas por aminoácidos, que son los componentes de las proteínas, por supuesto tienen que ver con el deseo sexual pero curiosamente también con formar lazos afectivos, todos estos neurotransmisores forman un “coctel” explosivo que hace que nos pasemos horas y horas hablando al teléfono sin cansarnos o tener sueño.

También entra en el juego el circuito de Papez en el sistema límbico, este nombre lo reciben un conjunto de estructuras nerviosas que se encargan de las emociones.

Un experimento alemán mostro que en sujetos muy enamorados, cuando les presentaban fotografías de la persona amada se activaban regiones del cerebro relacionadas con emociones positivas, que nos causan bienestar, como la ínsula, la corteza del cíngulo y los núcleos caudados. Al mismo tiempo se inactivan otras regiones del cerebro, como la amígdala y la corteza cerebral frontal y pre frontal, que se asocian con el miedo, la tristeza y a la manera de

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