Ensayo Sobre El Cuento Teresa

Ensayo sobre el cuento Teresa.

Teresa es una niña que, a su corta edad, ha vivido una serie de experiencias con sus padres, hermanos, amigos, abuelos, maestro, mostrando tener una imaginación sorprendente que no es común con otros niños a su corta edad, de la manera cómo percibe su mundo con una mentalidad muy amplia para razonar a cualquier pregunta que le hicieran.

Su mundo, es un mundo bonito lleno de fantasías, es una niña que para todo tiene una respuesta y explicación de cómo entiende las cosas que pasan a su alrededor, lo cual muestra la inocencia de todo niño y al leer sus ocurrencias y picardías me conecto y me lleva a recordar mi infancia donde no habían preocupaciones como tenemos los adultos hoy en día, todo era bonito. Teresa estaba en un mundo al que estaba descubriendo y para todo tenía una pregunta y si no respondían a su pregunta ella sacaba sus conclusiones según su imaginación.

A Teresa le encantaba que le leyeran cuentos cosa que le permitía reforzar su imaginación, que es el cimiento del pensamiento, pues el cuento genera curiosidad. El cuento entendido tanto como instrumento de aprendizaje como fin en sí mismo, pues trasmite un pensamiento optimista y desemboca en una reflexión constructiva, sin dejar de lado el fin último de la literatura infantil, que no es otro que el de divertir y entretener al lector.

Teresa es una niña vulnerable, inocente y con muchas ganas de tener amigos.

La inocencia de Teresa no refleja ignorancia, ingenuidad o falta de madurez, refleja la sorpresa, la ilusión, la imaginación, su limpia y maravillosa manera de ver las cosas. Como por ejemplo en el caso del rompecabezas. Cuando Marta la amiga de su mama, estaba embarazada e iba de visita, teresa pasaba un rato tocándole la barriga para sentir las pataditas que daba él bebe. Una vez en lugar de hacer eso se quedó mirando fijamente a Marta, de arriba abajo, hasta que su mamá le pregunto qué le pasaba, Teresa estaba tan intrigada, porque no sabía cómo iba a salir él bebe. Primero sale la cabeza, le explico Marta. Después el cuerpo, más adelante los brazos, y por ultimo las piernas.

Y Teresa respondió, que había entendido, con la cara iluminada y ¡después lo arman entre el doctor y tú!

En su inteligencia inocente ella se imaginó que el niño salía por partes y después era armado por los doctores y por la mama del bebe.

Historias como estas las hemos vivido con nuestros sobrinos, hermanos, hijos, primos o con cualquier niño que nos podríamos encontrar en el camino, porque los niños son así de maravillosos y especiales. Madurar no debería suponer el abandono de esta capacidad de respuesta sincera, el dejar de aprender, el estar de vuelta de todo. Hay que dejarnos sorprender y ejercitar nuestra

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