Feminismo: mas allá de la envidia fálica

[pic 1]

UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA

FACULTAD DE HUMANIDADES Y EDUCACIÓN

ESCUELA DE PSICOLOGÍA

FEMINISMO: MÁS ALLÁ DE LA ENVIDIA FÁLICA

Profesor:                                                                                                                 Autores:

ACEVEDO, Margareth.                                                                      PERALTA, Victoria.

CARACAS, FEBRERO DE 2020

En la actualidad, existen diversas corrientes o movimientos que buscan la reivindicación de grupos que en el pasado no han gozado de libertades y derechos humanos necesarios para crear una integración armoniosa entre la persona y la sociedad, cuyo fin es crear un cambio social que permita a los individuos proceder con la realización de sus metas y desnaturalizar el estado de las cosas que generan estancamiento y producen conflicto.

Entre estos movimientos se encuentra el feminismo, un concepto al cual le subyacen creencias de índole política, económica, cultural y social, que a su vez posee diferentes corrientes que explican las distintas maneras en que se entiende, se cree y se vive el mismo. A lo largo de la historia, gran cantidad de autores han expuesto su definición sobre lo que consideran se trata el feminismo. La Real Academia Española (2001) por su parte, expresa que el feminismo se trata de una “Doctrina social favorable a la mujer, a quien concede capacidad y derechos reservados antes a los hombres. Movimiento que exige para las mujeres iguales derechos que para los hombres” (definición 1 y 2). Para efectos de este ensayo se tomará como definición central la realizada por Fiss (1993) el cual afirma que:

El feminismo es el conjunto de creencias e ideas que pertenecen al amplio movimiento social y político que busca alcanzar una mayor igualdad para las mujeres. El feminismo, como su ideología dominante, da forma y dirección al movimiento de las mujeres y, desde luego, es moldeado por éste. Las mujeres buscan igualdad en todas las esferas de la vida y utilizan una amplia gama de estrategias para alcanzar este objetivo. (p. 211)

Según estas definiciones el feminismo busca igualdad, pero ¿a qué se refiere con igualdad? ¿Ser iguales a los hombres? ¿En qué sentido iguales a ellos? ¿Tener igualdad de oportunidades en el ámbito de los derechos, en lo social y político o va más allá?

Victoria Sau, una psicóloga y activista feminista española, extiende la definición de feminismo y explica que no solo es un movimiento político y social que busca la igualdad, sino que supone la toma de conciencia de las mujeres como colectivo humano, es decir existe una identificación con el grupo; dando cuenta de la dominación, la explotación y la opresión por parte de los hombres dentro de la sociedad patriarcal a lo largo de la historia, lo cual impulsa a las mujeres a la acción para la liberación de su sexo (Sau, 1990). Aquí se introduce que no solo es igualdad, sino que también incluye el desmontar las creencias estereotipadas que se vinculan con su sexo y demostrar la primacía social que los hombres poseen.

En este movimiento existen diversas corrientes, entre ellas resaltan dos, el feminismo de la diferencia y el feminismo de la igualdad, que poseen puntos de vistas contrarios.

El feminismo de la igualdad o también llamado ilustrado expone que las construcciones de la razón patriarcal se deben a las diferencias de sexo. Donde la esencia femenina pertenece a un ideal de lo que debería llegar a ser una mujer, siendo esta la razón que realza las construcciones patriarcales tanto del cuerpo como de la subjetividad femenina y lo legitima en el sistema, un sistema claramente patriarcal, en el cual se reduce a la mujer a la vulnerabilidad, resignación y pasividad. Debido a eso las mujeres se colocaron en una posición frente a los hombres como iguales (León, 2008).

Por otro lado, el feminismo de la diferencia o indómito, denuncia, por una parte, que la verdadera causa de la desigualdad entre hombres y mujeres es la caracterización patriarcal de la mujer, más el empeño feminista por igualar a mujeres y hombres y, por otra parte, explica que las mujeres no deberían querer ni poder insertarse como iguales en un mundo proyectado por los hombres (De las heras, 2009). A su vez, plantea que existe una esencia común, esencia que posee valores femeninos intrínsecos, que conforma la identidad en todas las mujeres. Buscando revalorar a la mujer por medio de sus atributos dados desde lo social, pero desligándolo de los prejuicios masculinos (Solleiro, 2016).

Si se toma el feminismo de la igualdad como eje, nacen diversas interrogantes ya asomadas al principio del ensayo.

En ese caso, ¿por qué las mujeres que creen en el feminismo de la igualdad en vez de apropiarse de su feminidad y  trabajar en pro a desmontar las conductas estereotipadas vinculadas a la misma, se acercan más o parecen estar más cómodas aproximándose a características que socialmente están atribuidas a lo masculino? Características que van desde lo superficial como dejarse crecer el vello corporal, tener un corte de cabello que históricamente ha sido asociado a lo masculino, entre otras cosas. Si bien se entiende actualmente que son características aisladas, es decir, que no le pertenecen a ningún género, para la sociedad se podría interpretar como mujeres queriendo ser hombres o lucir como hombres. Aun así es considerable entender el querer ser iguales a los hombres en razón a los derechos, oportunidades de empleo, educación y política, es decir, una participación igualitaria de las mujeres en todos los ámbitos sociales. Pero, ¿el querer parecerse a ellos en aspectos físicos que significa?  ¿Es un acto de rivalidad para expresar que si los hombres pueden yo también, en todos los sentidos de la palabra o verdaderamente se siente empoderadas con el hecho de que se les vea asociadas en lo físico con características de índole masculinas? Y si es así ¿Cuál sería la razón? Demostrar que no son actos encasillados a un solo género y con eso ayudar al cambio social, demostrar que las mujeres también pueden lucir así sin perder valor o ser menos mujeres, o inconscientemente estar manifestando algún complejo de masculinidad el cual será explicado más adelante. Por consiguiente, el psicoanálisis podría explicar, el querer aproximarse en todos los sentidos al hombre, desde la falta, pero para poder entender esto es necesario primero precisar algunos términos.

...