La Educación Que Tenemos

La educación que tenemos, la educación que queremos

Resención por Jorge Alberto Ortiz Matamoros

Materia: Sicología del Aprendizaje

Dentro de la materia Sicología del Aprendizaje, ahora toca escribir sobre el artículo titulado “La educación que tenemos, la educación que queremos”, cuyo autor es el español José Gimeno Sacristán, y el cual forma parte del libro “La educación en el siglo XXI, los retos del futuro inmediato” , publicado en 1999.

Este material está dividido en cuatro partes:

a) La construcción de la imagen de “lo deseable”. El futuro desde el presente.

b) La construcción de un proyecto para la educación que “había que hacer”.

c) Los ejes de un proyecto todavía válido para el futuro.

d) Educar para el futuro sin proyecto para la educación. De vuelta a la modernidad.

A lo largo del artículo, Gimeno se centra en explicar su visión sobre el futuro de la educación y plantea que hablar sobre el futuro es imposible por cuanto éste no tiene realidad, no existe; más bien menciona la importancia de un proyecto educativo utópico todavía válido basado en la Ilustración que reconstruya y se nutra de elementos o imágenes del pasado y del presente. Además, señala que la encargada de entrelazar y reconstruir dichos elementos es la escuela como institución “Ilustrada” y recalca la importancia del proyecto “que había que hacer” ante las inseguridades propias de la postmodernidad.

Desde acá desglosaré desde mi punto de vista lo anterior , que considero la idea central del artículo. Veamos, Gimeno enfatiza desde el principio en la importancia de todo lo hecho antes, a lo que llama imágenes del pasado o “imágenes del mundo”, para finalmente referirse a todo lo anterior como “tradición” (y dentro del contexto de lo que escribe lo usa como sinónimo de cultura). El presente no puede ser sin la tradición, de la cual se alimenta y sirve para construir nuevos presentes, que serán la base para el futuro. ¿Pero qué tiene que ver con la educación y el futuro de ésta si el porvenir no existe?

Es aquí donde el autor sugiere enfocarse en “analizar las continuidades de las imágenes del pasado, las del presente y sus proyecciones en el futuro”(pág. 30). O sea, en los medios para llegar a un fin concreto, proyectarse, ir más allá, y recalca que uno de los aspectos esenciales de la educación es el ser “proyecto”. Estoy de acuerdo ya que para lograr mejores resultados en el tema educativo es necesaria la planificación, la búsqueda de objetivos y un plazo para lograrlos.

Al referirse al tipo de proyecto alude a uno “utópico” e “ilustrado”. Al principio me pareció extraño, pues considero que utópico es algo irrealizable, imposible, pero creo que su concepción cabe dentro de las llamadas “utopías modernas”, orientadas hacia el futuro, progresistas, no estáticas, en las que se busca individualidades nuevas que lleven a la sociedad al desarrollo. Además, considera la generación de utopías algo propio de la cultura occidental.

...